noticias, confidencial, colombia, bogota, medellin, cali, barranquilla, una, emergencia, que, no, cesa,

Angustia y desespero vivieron cerca de 200 habitantes de calle establecidos en el caño Comuneros en la calle 6 con carrera 30 por cuenta de las fuertes lluvias que perduraron durante toda la noche del miércoles y la madrugada de este jueves. Aunque la policía reporta desaparecidos, el departamento de Seguridad de Bogotá señala que no hay ninguna novedad.

Los habitantes de calle desalojados del Bronx y que aún permanecen deambulando en la ciudad, han provocado en las últimas semanas disturbios y movilizaciones ciudadanas por cuenta de su asentamiento en diferentes zonas comerciales y de vivienda en Bogotá, situación que ha generan inseguridad en la comunidad e incertidumbre.

Tras la intervención del Bronx en el mes de mayo donde fueron desalojados 1.700 habitantes de calle, la problemática sobre la rehabilitación y reubicación de estas personas en albergues ha ido incrementando.

Cientos de estos habitantes de calle siguen deambulando de manera masiva por las zonas aledañas al sector del Bronx, lugares de comercio y de vivienda como La Estanzuela, San Andresito San José y la Plaza España, donde se han visto afectados comerciantes y los mismos ciudadanos que frecuentan el lugar a causa de la inseguridad y de los levantamientos contra las edificaciones de los mismos habitantes de calle.

Luego de marchas y de la intervención de las autoridades para sacar estas personas de dichos lugares, los habitantes de calle se tomaron el caño de la sexta con carrera 30 este miércoles prendiendo de nuevo la alerta en la comunidad.

Según ellos, se han instalado allí porque no tienen donde vivir y manifiestan que el Alcalde no ha hecho nada para reubicarlos “y la policía nos saca de todos los sitios donde estamos”.

A unas horas de estar instalados en el lugar, la noche llegó con una fuerte lluvia provocando la creciente del río Tunjuelito y el desborde de los afluentes cercanos, entre ellos el del caño. Una emergencia empezaron a vivir los habitantes de calle al ser varios de sus compañeros arrastrados por la corriente del conducto.

Según reportes de la Policía Metropolitana y señalamientos de las personas que se encontraban en el lugar, cerca de siete personas están desaparecidas. Sin embargo, el secretario de seguridad de Bogotá, Daniel Mejía, informó a medios de comunicación que no hay ningún reporte.

Algunas personas que presenciaron los hechos hacia las dos de la madrugada de este jueves, manifiestan que serían 20 los desaparecidos por la creciente del río. Algunas imágenes televisivas de medios de comunicación también darían cuenta de lo sucedido.

Mejía manifiesta que desde la madrugada fue activado un puesto de mando unificado entre la Policía, Bomberos e Idiger para controlar la situación, y fue enfático al decir que no ha sido activado ningún sistema de emergencia por lo sucedido, cosa que le compete a Idiger.

No obstante señaló que es preciso establecer medidas de protección para las personas de calle. “Este es un buen ejemplo de lo que venimos diciendo en el Distrito, que necesitamos tener más herramientas para proteger a los habitantes de calle”, expresó el secretario de Seguridad quien indicó que Integración Social en acompañamiento de la Consejería han estado haciendo una llamado permanente a esta personas para que acepten ir a los albergues e iniciar un proceso de rehabilitación.

Ante este panorama, una de las problemáticas y dificultades para normalizar la situación y establecer medidas contundentes a los hecho es que por ley, dado el fallo de la Corte Constitucional, no se puede forzar a esta personas a que reciban atención en los diferentes centros instalados en la ciudad, depende es de su voluntad.

“La secretaria jurídica del distrito está evaluando las alternativas que se tendrían con los pronunciamientos y los fallos de la corte actuales, y que herramientas jurídicas y legales quedan para tomar medidas de protección”, concluyó

De 1.700 habitantes que salieron tras la recuperación del Bronx, muchos de ellos han aceptado oferta de rehabilitación, otros se han encontrado con sus familias y entre 100 y 150 están trabajando con entidades del distrito.

Alrededor de 60 u 80 habitantes de calle que se encontraban este miércoles en el caño, aceptaron ir a los albergues.