El barrio La Castellana presenta varias problemáticas por el parqueo de vehículos en el espacio público. Habitantes del sector indican haber sido amenazados por las personas que se apoderaron de las calles para cuidar los autos.
Es alarmante los inconvenientes que se presentan por la invasión al espacio público en el barrio La Castellana, pues el mal parqueo de vehículos por la asistencia al Teatro Nacional La Castellana, a la iglesia cristiana El Lugar de Su Presencia, como también varios establecimientos comerciales y empresariales ya incomoda a los habitantes de esta zona.
Asimismo, según informaron vecinos inconformes del sector, hay personas que se apoderaron de las cuadras del barrio, incluso bajo esta ilegalidad, estos individuos estarían cobrando hasta 7.000 pesos por cuidar un vehículo en vía pública.
Añadido a lo anterior y como un factor que debe ser investigado por las autoridades competentes, algunos residentes afirmaron que se han presentado amenazas a los propietarios de parqueaderos legales, vecinos e incluso funcionarios distritales.
“Las amenazas contra mí han sido que me abordan para decirme que les estoy quitando el negocio de hace mucho, se hacen al frente del parqueadero para que los clientes no entren, los espantan, les dicen que es muy caro”, señaló el propietario de un parqueadero del sector.
Una mujer que lleva más de dos décadas viviendo en este barrio, y que también solicitó que no reveláramos su nombre, dijo que además de lo anterior, estos hombres habrían, al parecer, amenazado a dos funcionarios de la Secretaría de Movilidad que estaban dejando volantes en los parabrisas de carros mal estacionados, buscando precisamente desincentivar esta práctica.
Según esta mujer, “un carro abandonado propicia problemas de inseguridad”, y casos como hurto de llantas y de emblemas de vehículos e incluso atracos han aumentado significativamente debido al fenómeno del mal parqueo.
Por su parte, Antonio Suárez, Alcalde local de Barrios, asegura que conoce la problemática de la invasión que fomenta la problemática en la zona y que junto con la Policía de Tránsito han realizado operativos. Respecto a las amenazas a propietarios de parqueaderos, el alcalde Suárez asegura que no conoce ninguna denuncia formal.
“Tenemos una dificultad con la ocupación del espacio público que se ha dado por un cambio en la vocación de este sector, que hoy reúne gran parte del conglomerado empresarial de la ciudad; las casas que antes eran usadas para vivienda hoy son oficinas”, manifestó el funcionario.