Juan Carlos Osorio recapacitó y pidió disculpas en rueda de prensa por el lamentable episodio en el que insultó fuertemente al asistente técnico de Nueva Zelanda en el polémico encuentro de la Copa Condeferaciones.
“Motherfucker (hijo de puta)”, le espetó después de agarrarse un tremendo cabreo, en el que fue necesario que lo pararán, en una jugada en el que su jugador Salcedo se lesionó y los rivales no tiraron la pelota fuera e incluso tuvieron una ocasión de gol.
Después del encuentro, Osorio respiró hondo y explicaciones sobre lo ocurrido. “No se puede pasar la frontera de la violencia”, confesó. “Quiero ofrecer disculpas, me pasé de tono con un asistente de ellos. Respetamos su idea de jugar directa y física, pero cuando eso pasa el límite y es un atropello al ‘fair play’, ese es mi límite de aceptar las cosas”, continuó.
El enfado de Osorio en el campo llegó a un punto en el que nunca antes s ele había visto al técnico. Más tarde dio su versión: “Pasaron varios segundos en los que nuestros jugadores les pidieron que pararan la jugada. Cuando es un juego directo que pasa la frontera de la violencia, no se puede permitir”.
Osorio no dudó en señalar al culpable, a quien atacó verbalmente sobre el campo. “Me ofendió y perdí el control, la cámara me persigue a mí, pero el asistente de ellos fue culpable directo de lo que pasó”, explicó. Sin embargo, no quiso aclarar las palabras que le contestó el asistente técnico de Nueva Zelanda: “No puedo repetir lo que me dijo en español, se acabó, pero él sabe lo que dijo”.