A pesar de la reducción en el precio de los combustibles en el país, un amplio sector del gremio de los camioneros inició, este lunes 23 de febrero un paro indefinido. Las exigencias de los transportadores van más allá del costo de los combustibles. El reporte de las autoridades y del Ministerio de Interior es de una jornada en completa calma.
Con el parqueo de cientos de camiones en las orillas de las carreteras de algunas regiones del país como Antioquia, Santander, Boyacá o Cundinamarca, entre otras, inició el paro camionero convocado para este lunes 23 de febrero.
El cese de actividades liderado por la ATC (Asociación de Transportadores de Carga), representados por Orlando Ramírez, no ha contado con el apoyo de la ACC (Asociación Colombiana de Camioneros), quienes según el Gobierno Nacional se encuentran en un diálogo fluido con estos.
Los camioneros que han iniciado la huelga piden que exista una reducción significativa del precio de los combustibles en el país, esto debido a la “caída de los precios internacionales del petróleo” como lo aseguró Ramírez. El Ministerio de Minas anunció que a la media noche de este lunes, al mismo tiempo que iniciaba el paro la gasolina reduciría su precio en 300 pesos. Sin embargo, para los camioneros esa rebaja es minúscula.
Además, del precio de los combustibles los camioneros piden negociar la desaparecida tabla de fletes, no piensan aceptar la existencia de más peajes y que no se den aumentos altos en el precio de los peajes que se darían con el fin de financiar las carreteras 4G, una de las grandes apuestas del Gobierno Nacional.
El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, ha dado un parte de tranquilidad sobre el desarrollo del paro hasta el momento. Así mismo anunció que el ejecutivo seguirá negociando con los camioneros las exigencias que estos tienen.