Sanders ganó Michigan

El demócrata Bernie Sanders, senador por Vermont, consiguió ganar Michigan y sumar 65 delegados más. Cifra nada despreciable, pero aún insuficiente, pues su rival Hillary Rodham Clinton obtuvo 86 delegados, 29 gracias a su triunfo en Mississippi y 57 debido a su derrota en Michigan.

“Vamos a esperar lo que viene – avisó el candidato a través de una cadena radial-, sin embargo estamos felices, algo está ocurriendo”

Se refiere Sanders al movimientos, principalmente entre los jóvenes, que no sólo le acarreado tremendas victorias, sino que, además le ha proporcionado los fondos suficientes para continuar en la lucha: “somos una campaña austera, nuestros millones de donantes en promedio han dado 25 dólares, pero preferimos eso a ser un movimiento financiado por Wall-Street, porque todos sabemos lo que hacen los financiadores luego de que se elige a los candidatos que apoyaron”

Y es que el senador por Vermont, reconocido por su honorabilidad y amado como nadie en su estado natal, ha sido insistente en denunciar dos cosas, la excesiva concentración de la riqueza ‘gringa’ en manos del 1% de los ciudadanos y la pobreza extrema de gran parte de la nación: “es una realidad injusta de la cual el pueblo americano está cansado y en contra de la cual debemos luchar”

Ambos candidatos conservan opciones de ser los nominados, sin embargo, Clinton mantiene una cómoda ventaja debido a los 717 súper delegados que ya anunciaron su voto por ella.

Es bueno recordar que en Estados Unidos los candidatos a la presidencia de la republica del partido republicano y demócrata se escogen en una convención a la que asisten delegados y súper-delegados. Los delegados se escogen de dos maneras: votaciones directas o votaciones por asamblea (Caucos). Y los súper-delegados; figuras escogidas ‘a dedo’, personalidades del partido, representantes y miembros del comité central. En el caso de los republicanos los súper-delegados son 3 por estado, mientras que entre los demócratas –el menos demócrata de los partidos- son 717.