El presidente Juan Manuel Santos, dijo hoy que las Farc se equivocan si consideran que pueden presionar mediante secuestros al Gobierno para conseguir una tregua bilateral en medio de los diálogos de paz que se realizan en Cuba.
“Si las Farc creen que a través de los secuestros van a tratar de presionar al Gobierno para lo que ellos aspiran, y es un cese al fuego, se equivocan”, dijo Santos a periodistas en el balneario de Cartagena durante la presentación del Plan Integral de Seguridad para el departamento de Bolívar.
En las ultimas dos semanas las Farc secuestraron a dos policías en el departamento del Valle del Cauca, quienes según Santos, “están vivos”.
Ayer, el mismo grupo secuestró, pero en el vecino departamento del Cauca, a dos ingenieros y un topógrafo de la petrolera canadiense Gran Tierra, que luego fueron liberados por la presión de las tropas.
Santos agregó que con estos actos, las Farc generan una reacción opuesta y aseguró que es todo lo contrario porque lo que hacen ese tipo de acciones es estimular al Ejército a ser cada vez más contundentes. Eso que quede absolutamente claro.”
Subrayó además que las autoridades no bajarán la guardia hasta que desaparezca por completo el delito del secuestro y manifestó que las acciones de las Farc se presentan en momentos en que el Gobierno y esa guerrilla reanudan las negociaciones de paz en La Habana, en donde insisten en la necesidad de una tregua bilateral.
El martes, antes de partir a Cuba, el exvicepresidente y jefe negociador del Gobierno, Humberto de la Calle, señaló que la determinación de las Farc de seguir perpetrando secuestros es “una respuesta equivocada que atenta contra el proceso” de paz.
Por su lado, las Farc han reinvidicado su potestad de secuestrar, acción que llamó captura de “prisioneros de guerra” en el marco del conflicto.
De otro lado, Santos señaló que los pronunciamientos de su hermano Enrique, quien participó en la primera fase de las negociaciones de paz, no comprometen al Gobierno porque son a título personal.
El periodista Enrique Santos pidió el miércoles en un foro en Washington acelerar el ritmo del proceso porque “si no se oxigena, puede morir”.
“No se trata de poner plazos fatales” señaló ayer el periodista, quien reconoció que un conflicto que 50 años “no se resuelve en 50 meses, ni en 50 semanas”, pero advirtió que la agenda “tiene que moverse más”, para evitar que la sensación de que esta negociaciones son “algo distinto” a los intentos anteriores se “evapore”.
EFE