Luego del ataque de las Farc contra una estructura del Ejército en Buenos Aires (Cauca), donde murieron 11 militares y la reunión que sostuvo el presidente Santos con la Cúpula Militar en horas de la mañana, el Mandatario decidió reanudar los bombardeos apelando que no fue un hecho fortuito sino un ataque deliberado.
Esta mañana el país se despertó con la noticia de que un grupo de militares fue atacado en el Cauca por la columna Miller Perdomo de las Farc. Fuentes oficiales señalaron que 17 uniformados resultaron heridos y 10 soldados y un suboficial son las víctimas mortales. Esto ha generado una crisis en la opinión pública por las posiciones encontradas entre diferentes sectores políticos.
El enfrentamiento entre el Ejército y las Farc se produjo en el municipio de Buenos Aires (Cauca). De acuerdo con información de la Fuerza Pública las tropas del Batallón de Combate Terrestre, de la fuerza de Tarea Apolo están gestionando actividades para “garantizar la seguridad de la población civil”.
A este hecho las Farc manifestaron, por medio de el comandante guerrillero Pastor Alape, que lo ocurrido hace parte de la “incoherencia gubernamental de estar ordenando operativos militares contra una guerrilla en tregua”.
Asimismo, el guerrillero le hizo un llamado al presidente Juan Manuel Santos “para que entienda que el cese al fuego bilateral es urgente para la nación, que está esperando esa noticia”.
Este hecho ha dejado hasta el momento10 militares sin vida, así desatando una tormenta en la opinión pública y en sectores políticos. Para entender un poco la situación y los efectos que podría traer el enfrentamiento, Confidencial Colombia consultó a representante de la opinión pública y política.
Ariel Ávila, coordinador del Observatorio Fundación Paz y Reconciliación, dijo que “lo que sucedió causa un impacto político en la opinión pública muy negativo al proceso de paz. En términos políticos no solo le da herramientas a la oposición, sino al Presidente y la sociedad para saber que se está negociando para acabar con esto”.
Finalmente Ávila señaló que el hecho “puede terminar en una crisis al proceso de paz, es decir, reanudar los bombardeos y las acciones armadas por parte de las Farc”.
Por su parte, el senador del Polo Democrático Alternativo, Iván Cepeda se refirió al tema como “un hecho muy doloroso que no dudamos en condenar. Pero al mismo tiempo parte de un difícil proceso que se está dando en la búsqueda de la salida del conflicto. Es un hecho que se presenta luego de tres meses y medio de una tregua de las Farc que ha sido cumplida antes de esta circunstancia terrible que se presentó”.
Frente a las reacciones suscitadas desde diferentes sectores políticos y de opinión, manifestó que: “La reacción no puede ser simplemente emotiva, ni que llame a interrumpir un proceso que le está ahorrando vidas al país”. Además mencionó la importancia del cese bilateral: “El cese unilateral ha sido una forma de salvar vidas. Pero el llamado es a profundizar en la búsqueda del cese bilateral al fuego y a las hostilidades. Que se aceleren los ritmos de esa búsqueda, acompañados del diseño de mecanismos de verificación internacional”.
Ante la solicitud del procurador de reanudar los bombardeos, Cepeda indicó que: “El procurador debe dejar de incentivar la guerra en este país. Y debe dejar de hacer declaraciones en las que se van a perder vidas. Hay que ser muy serios y muy responsables y no avivar la hoguera de la guerra”.
El senador Cepeda concluyó indicando que existe un avance significativo en el proceso de paz: “Estamos logrando salir del conflicto armado; hay que tener perseverancia, sensatez y convicción en la paz, necesarias para avanzar”.
La exministra de Defensa y quien hace parte de la Comisión Asesora de Paz, Marta Lucía Ramírez, le dijo a Confidencial Colombia que ve la muerte de los soldados con “mucho dolor” y como política y mujer de Estado considera que “es inaceptable que las cosas sigan así como van. Las Farc no pueden pretender que el Ejército deje de cumplir con su deber constitucional y legal, que es perseguir cualquier grupo armado ilegal. La muerte de 11 soldados me parce que es una tragedia y este es el equivalente a un magnicidio. El pueblo colombiano no puede ver como al costo de una negociación masacran a los soldados”.
El senador Álvaro Uribe Vélez pidió al presidente Santos por medio de un trino que “no nos engañe más por favor, no justifique el asesinato de nuestros soldados con el cuento de la “guerra que quiere terminar”.
El director del partido Centro Democratico manifestó que La “incoherencia” viene de unas Farc que dicen anhelar la paz, cuando su único propósito es sembrar muerte y terror en el país”.
A este enfrentamiento entre el Ejército y las Farc en el departamento del Cauca se suma las cinco ofensivas violatorias del cese unilateral de este grupo guerrillero que registró el Centro de Recursos para el Análisis de Conflictos (CERAC) en el mes de marzo.
Según CERAC, la suspensión de bombardeos no disminuyó la intensidad del conflicto en el primer mes de vigencia y los sustentan así:
“Dos emboscadas y dos hostigamientos a tropas del Ejército, así como el incendio de un vehículo de transporte público. Estos hechos ocurrieron en Arauquita (Arauca), Calamar (Guaviare), Santander de Quilichao (Cauca), Saladoblanco (Huila) y Chaparral (Tolima). En estas acciones murieron dos soldados y fueron reportados heridos un civil y 12 soldados”.