"Somos del patio"

La I Tertulia de ‘Aquí Canta el Vallenato’, programa costumbrista emitido por UN Radio, tuvo lugar este sábado en Madrid Cundinamarca. El conversatorio fue dirigido por el periodista Mauricio Pichot, autor de la ya popular frase: “Soy del patio”.

El programa de la 98.5 fm UN Radio, ‘Aquí Canta el Vallenato’, se ha convertido en una institución para los entendidos de este género musical y narrativo. Su director y creador, Mauricio René Pichot Éllez, hace culto a nuestro folklor cada mañana de sábado, en el que se mezclan guiones magistrales, discoteca selecta, entrevistas y remenbranzas; todo esto llevado por una impeclable locución y control master.

Después de 10 años al aire, de mucho intercambio de correos y de pronunciar su poética frase de despedida: “Soy del patio”; Mauricio se reunió con algunos de sus oyentes en una tertulia sobre narrativa costumbrista, y por supuesto amenizada con: caja, guacharaca, guitarra y acordeón.

El lugar de reunión fue el restaurante-bar ‘Colombia Café’ de don Pedro Sierra, ubicado en el municipio de Madrid, a media hora de Bogotá. Como lo muestra el video anterior, los dos invitados especiales fueron de la casa: Arley Rozo, eximio acordeonero de solo 15 años. Y el cantante y actor Poncho Quevedo, quien es ya un líder cultural en Madrid.

Invitados especiales.

Arley es un joven prodigio que ya ha participado en tres Festivales de la Leyenda Vallenata, categoría infantil. Con la edad casi cumplida, Arley se prepara para entrar en la categoría juvenil y pese a ser invidente, cuenta con todos los argumentos para disputar la corona: digitación exacta y veloz, cadencia y oido, gusto por lo clásico; y una voz muy contundente para su edad.

“Mi expectativa en categiría juvenil es pasar a rondas finales y tener un buen puesto en el escalafón. Y si mi tono de voz es fuerte, debo aprovecharlo al máximo”.

Idelfonso Quevedo es el vocalista de la agrupación ‘Los hijos del viejo Miguel’. En 2012, él y su grupo ganaron el Festival Francisco El Hombre (Riohacha – Guajira). Además de ser un músico polifacético (toca acordeón y guitarra), Poncho actua en la telenovela ‘Diomedes El Cacique’. Actualmente, también dirige una escuela de música vallenata en su municipio, Madrid.

“Fuimos los primeros ‘cachacos’ que tuvimos la oportunidad de lograr un triunfo allá en Riohacha, en la Guajira”.

Mauricio Pichot Éllez, locutor y director de ‘Aquí Canta El Vallenato”.



CC: Usted hace parte de ese grupo de locutores, promotores e investigadores de este movimiento cultural que es el vallenato auténtico. ¿Por qué la radio, ha sido tan importante para la preservación de este patrimonio cultural?

“Nuestro programa trata de mantener un espectro, el que nos dejaron nuestros ancestros, cuando a partir de la nada, crearon esta expresión literaria, porque así llamó el maestro Gabo a los cantos vallenatos. Nuestra expectativa es mantener la vigencia de estas historias, de estos cantos contados. Para que nuestro país se de cuenta de lo valioso que es ser nosotros mismos, de lo valioso que es ser auténticamente caribes y colombianos.

(…) Es decir, todo el mundo tiene derecho a hacer su propia cultura, a hacer su propia expresión artística y musical: reguetoneros, raperos, salseros; pero el vallenato se debe mantener incólume, como lo que es: una expresión literaria”.


CC: ¿Cómo nace ‘Aquí Canta el Vallenato’?

“Aquí Canta el Vallenato nació en un octubre, con un programa especial sobre Alejo Durán, a partir de una entrevista que Alejo le dio al maestro David Sánchez Juliao en el año 87. Y el programa nació como eso, como un viaje a las nostalgias, a los recuerdos, a la vigencia de todos esos relatos de nuestros abuelos, de nuestros antepasados”.

CC: ¿Cómo nace la frase: “Soy del patio”?

“Lo conté hace apenas una semana. Yo soy de Cartagena. Allá había un señor que se llamaba Bolívar, un señor grandote, muy parecido a Camilo Namén. Y los sábados a las 10 de la mañana, ponía siempre ‘Igual que aquella noche’: el canto del maestro Emiro Zuleta.

(…) El señor Bolívar, vivía pasando el parque y su música la escuchaba toda la cuadra. Yo lo escuchaba en el patio de mi casa, esas casas grandes de Cartagena. A partir de allí, a mí me nació la idea de preguntar por esas historias, de saber cómo nacieron esos relatos cantados. Me documenté hablando con mi abuelo, Juan Éllez.

(…) Mi abuelo me contaba historias como la del tema ‘La Caja de Negra’ (sonando en ese momento), de cómo en un pueblo llamado Gambote, vio parrandear a Andrés Landero, a Adolfo Pacheco, a Ramón Vargas. Si esos juglares vivieran, estuvieran por los 100 o 120 años y yo tuve la oportunidad de conocer a algunos de ellos, les insistí y casi les perseguí para que me contaran las historias de sus cantos”.


CC: ¿Cómo consigue su selecta discoteca?


“No entrando a Google, sino con los mismo juglares o con amigos como tú, que tienen esta misma pasión: Oswaldo Gómez, Guillermo Grosso Peralta, Carlos Alberto Melo Salazar. El maestro Carlos Melo lleva más de 40 años poniendo cantos vallenatos en Bogotá. También depende de preguntar constantemente, de llamar a Ivo Diaz, Emiro Zuleta o a Emilianito Zuleta”.

CC: ¿Cuál es la importancia de la radio universitaria en la producción de nuevos contenidos?


“Cada medio de comunicación, cada periodista, aborda las noticias desde su propia perspectiva. Desde el momento en que se escribe la primera línea de una crónica, de un reportaje, le estás poniendo tu impronta, tu sello. La radio universitaria tiene una gran ventaja porque le cuenta al receptor sus intereses, esos temas que fomentan una cultura propia, como lo hace Javeriana Estereo, la UN Radio o cada una de estas emisoras universitarias”.