El Escuadrón móvil antidisturbios de la Policía Nacional (ESMAD) se sobreexcede en la fuerza. A través de las redes sociales se han conocido los videos en los que los uniformados atacaron las casas de la población civil, rompiéndoles los vidrios y echando bombas de humo en lugares donde había niños y mujeres embarazadas.
La pelea no está en las zonas de vivienda campesina. Las carreteras son el escenario principal de encuentro de manifestantes y de fuerza pública, que en el caso del paro nacional, han sido vistos agrediendo con bolillo a jóvenes y ancianos.
Hasta el momento se han reportado dos civiles muertos, presuntamente por causa de la acción de los policías, sin que hasta ahora exista confirmación de medicina legal.
No es la primera vez que se visibiliza el problema. Los videos de los abusos de ese cuerpo antidisturbios le han dado la vuelta al país por las redes sociales. Y recordaron las recientes las protestas en el Catatumbo, en el que los agentes bebían cerveza antes de encontrarse con la población civil.
Tomates para el ESMAD, porque los héroes en Colombia si existen, pero la imagen que están dando y la fuerza bruta que están usando, los dejan ver como los peores villanos de la historia del paro nacional agrario
