Una reforma tributaria estructural debería aumentar el impuesto de renta que suele ser el más progresivo y que cancelan por lo general las personas con mayor poder adquisitivo, de igual manera tendría que eliminar exenciones y deducciones para que todos paguen lo mismo.
Una reforma tributaria estructural debería aumentar el impuesto de renta que suele ser el más progresivo y que cancelan por lo general las personas con mayor poder adquisitivo, de igual manera tendría que eliminar exenciones y deducciones para que todas las personas, naturales y jurídicas, paguen por igual.
Así lo dijo en Confidencial Colombia el economista y ex gerente del Banco de la República, Miguel Urrutia Montoya quien manifestó que las tarifas de IVA deben unificarse como en otros países pues ese diferencial genera problemas de recaudo y suele ser complejo.
“En materia de IVA hay que igualar las tasas, pues el argumento de que los valores menores para algunos bienes y para la comida son progresivos, no es cierto porque los ricos también comen y mucho más”, anotó Urrutia.
Consideró que entre menores tarifas, mejor se cobran los tributos porque aparte de que facilita el recaudo, permite una distribución verdaderamente más igualitaria y equitativa. Con el actual esquema, manifestó, no necesariamente los más beneficiados son los grupos más pobres.
Dijo que dese hace quince años los técnicos están diciendo que como máximo debe haber entre dos y tres tasas en IVA.
Agregó que en aras de la equidad habría que ajustar algunos impuestos para componer el panorama laboral. Explicó que la tesis es simple por cuanto la mejor distribución del ingreso se hace a través de un gasto público bien ejecutado.
“En Alemania y otros países desarrollados, los gravámenes que son progresivos mejoran un poco la distribución después de impuestos, pero lo que optimiza esa distribución es precisamente el gasto social porque al aumentar los impuestos se hace un gasto benéfico dirigido hacia los más pobres”, afirmó Urrutia Montoya.
Aclaró que como los impuestos son generales deben ser pagados por todo el mundo porque lo único seguro en la vida es la muerte y el pago de obligaciones tributarias, luego tratar de hacer que por intermedio de una reforma tributaria, la gente más pobre no pague, el asunto no funciona, pero insistió en que si la mayoría es de carácter progresivo si amerita que en general contribuyan los que mayor capacidad tienen.
Sobre el impuesto al lujo que pretende crear la DIAN, el economista consideró que es conveniente porque ese es un modelo que opera en varios países e inclusive en Colombia como es el caso de los automóviles. “En Europa el IVA es igual para todo el mundo, pero se paga un impuesto al lujo y para artículos suntuosos que no hacen parte del gravamen sobre el valor agregado”.
De manera tajante dijo que en Colombia se deben acabar los incentivos y las exenciones porque una reforma debe ser general y esas consideraciones suelen ser muy negativas y malas porque los estímulos, según los académicos, no son muy efectivos.
Las posibilidades de recuperar con IVA lo que se deja de percibir por impuestos de aduana con los TLC las vio lejanas porque esa medida prácticamente la adoptó Colombia en el gobierno de César Gaviria, además, consideró el experto, los impuestos aduaneros son muy bajos porque están en un rango promedio del seis por ciento por lo que considera que los tratados de libre comercio no golpearán duramente al fisco.
“Esa medida no la percibo, pero si los acuerdos de comercio me castigaran el erario yo si lo compensaría y lo haría con IVA, pero no creo que eso pase”, apuntó.
Cesantías y desempleo
La propuesta gubernamental de retener el 50 por ciento de las cesantías para financiar el seguro de desempleo le sonó al señor Urrutia porque consideró que ese seguro es fundamental para la gente que queda desempleada y para la macroeconomía que no se ve tan golpeada por el deterioro en el consumo.
“El seguro de desempleo garantiza que se mantenga la demanda agregada y entonces mitiga los ciclos económicos”, aseveró.
Desestimó los argumentos de las centrales de riesgo y de los constructores que aseguran que con esa medida se complica la adquisición de vivienda para las capas pobres de la sociedad por las limitantes que genera. “No creo porque como ahora hay otro ministro que las regala”.
Comprar deuda para frenar revaluación
En consideración de Miguel Urrutia Montoya, la revaluación tiene una salida y es la disminución del déficit fiscal así como la compra de deuda externa las cuales devaluarán la tasa de cambio. “Los otros sistemas son simples juegos”.
Hay que mejorar en café
Sobre el tema cafetero, Urrutia Montoya indicó que es perentorio mejorar la producción, pero sin atarla a la Calidad Colombia. Dijo que en ese tema se puede diversificar sin miedo a limitar la producción y la oferta de grano.
“Si bien el Centro de Investigación del Café, Cenicafe, ha hecho avances importantes, lo cierto es que la tecnología tiene que ser permanente y puesta a la orden de los cafeteros para la solución de problemas”, comentó.
Sostuvo que es muy sorprendente que el producto que toda la vida caracterizó al país se caiga, entendiendo que no crezca por diferentes razones, empero insistió en que el desplome de la economía cafetera deja pensando muchos. “Yo no creo que la caída en la producción de café se deba única y exclusivamente al clima”.
Finalmente destacó la política económica del Presidente, Juan Manuel Santos, entre otras cosas porque ha tenido muy buenos ministros en diferentes áreas.
Señaló que si bien aún hay muchas por hacer, lo importante es tratar de no hacerlo todo porque en ese orden de ideas el gobierno se metería en serios líos.
