La red social más conocida del mundo ha sido la herramienta de comunicación de venezolanos alrededor del planeta, que hoy eligen nuevo presidente. ¿Qué dirá el pajarito? .. De Twitter, claro está.
El ecosistema digital no es ajeno a lo que está pasando en Venezuela. Desde hace días, la agenda fue dominada por el debate e incertidumbre sobre la salud del difunto Chávez, que por meses estuvo oculto debajo de miles de declaraciones “oficiales” desde Cuba, y de una “paradójica” elección de Maduro como Presidente encargado. Simplemente se esperaba el anuncio de la muerte del mandatario como la campanada que daba inicio a una campaña electoral atípica, con Maduro como candidato oficialista, y Capriles, designado por la Mesa de la Unidad, en una campaña insólitamente corta que hoy 14 de abril recogerá sus frutos.
Las Redes Sociales han sido el termómetro perfecto, que en tiempo real, han medido paso a paso todo lo que ha acontecido durante estas últimas semanas.
Un pajarito, y no precisamente el de Twitter, fue uno de los primeros detonantes de la caída en las encuestas del candidato apadrinado por Chávez, contrarrestando con un Capriles repotenciado, con un lenguaje fuerte pero incluyente con su eslogan: Venezuela Somos Todos.
Los trending topics llevan días, pulso a pulso, en la búsqueda de alcanzar el podio mundial o nacional y ambos bandos están haciendo la tarea. Parecen ejércitos rivales donde los tweets son los misiles tratando de minar el campo contrario para ganar adeptos y simpatías. No hay un control en internet que pueda frenar la campaña a favor de los candidatos, ni a los mismos candidatos, a pesar de haber finalizado oficialmente.
Información en tiempo real con imágenes, videos, comentarios, reportes, denuncias sobre todo lo que está aconteciendo, dónde algunos son protagonistas digitales con sus ocurrencias o comentarios pertinentes.
Mensajes de optimismo y esperanza, como siempre, creyendo en la buena fe de un ejercicio democrático, nos queda la duda de la hora cero, donde se cuentan los votos, votos contados a mitad en físico otras a ciegas vía electrónica. ¿Se tomarán decisiones ajenas a nuestra voluntad? ¿Se respetarán los resultados?
