El excongresista, Jorge Enrique Robledo y el concejal Manuel Sarmiento, señalan que el presidente de la república, Gustavo Petro, junto con el exalcalde Enrique Peñalosa, tiene responsabilidad en el atraso que hoy presenta el proyecto.
Los dos políticos aseguran que la administración Petro no tomó decisiones a tiempo y que gracias esto, el exalcalde Enrique Peñalosa puso su cuota cambiando el modelo, lo que retraso aún más la construcción.
Lo primero que recuerdan Sarmiento y Robledo es que, durante la campaña por la Alcaldía de Bogotá del año 2011, el entonces candidato Gustavo Petro propuso la terminación del sistema TransMilenio que contemplaba las troncales de la Carrera Séptima, Avenida 68, Avenida Boyacá y Avenida Ciudad de Cali y que, al posesionarse como burgomaestre de la ciudad, propuso la construcción de un tranvía.
“Tomó al menos dos decisiones irresponsables: primero, perdió más de un año concentrado en un Tranvía por la séptima que no contaba con estudios, relegando el Metro a un papel secundario; segundo, como candidato y como alcalde, llegó planteando un Metro diferente al que ya se había consolidado por parte de la administración de Samuel con estudios serios de las firmas Sener y Steer Davies And Gleave, a un precio accesible de 4 billones de pesos. Con ello se perdió un tiempo valiosísimo que hoy tiene a la ciudad en esta disyuntiva”, dice el documento.
De acuerdo con Robledo y Sarmiento, “Gustavo Petro cambió la coordinación del proyecto dejándolo en manos de funcionarios del IDU y contrató una interventoría sobre los nuevos estudios – que no exigía el Banco Mundial- y que terminó retrasando en varios meses el inicio de los nuevos estudios”.
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Ambos líderes del Partido Dignidad, recordaron, además, que el entonces alcalde de Bogotá llamó al Concejo de Bogotá a sesiones extras pidiendo un cupo de endeudamiento por 800 mil millones que serían utilizados no para el proyecto metro sino para un tranvía por la Carrera Séptima. La Comisión de Hacienda del Concejo de Bogotá no aprobó el proyecto de acuerdo de Petro y decidió mantener el cupo de 800.000 millones exclusivamente para el Metro pesado.
El entonces alcalde de Bogotá, insistió en su idea del tranvía, a través de una alianza pública privada, sin embargo, esta no cuajó. “El Tranvía por la séptima se cayó definitivamente por decisión del mismo Petro: cuando la multinacional francesa Alstom, que tenía prioridad por haber sido la primera en radicar la propuesta, desistió. Petro adujo intereses de su concuñado, Carlos Gutiérrez, quién hacía parte de consorcio que quedó como segundo oferente, para no continuar con la APP”, recuerda el concejal Sarmiento.
El cabildante dice que el actual presidente de la república en calidad de alcalde de Bogotá, retomó el proyecto del metro subterráneo en el año 2013, contratando los estudios de ingeniería básica avanzada a cargo de las firmas Euroestudios e Idom y la firma colombiana Cano Jiménez, bajo la coordinación del IDU. El trazado de la primera línea terminó haciéndose con base en los estudios de ingeniería conceptual de Sener contratados por la administración de Moreno en 2008 y terminados en 2010, aunque con un Metro totalmente subterráneo.
El entonces alcalde concretó una primera línea que saldría desde el Portal de las Américas hasta la Calle 100 con Carrera 11, toda subterránea, con 23 estaciones, un máximo de 80 mil pasajeros-hora, velocidad comercial de 35 km/h, y un valor a licitar de $13,79 billones, cotizado a una tasa de cambio de $3.149 por dólar. Recibió aval del Confis el 26 de octubre de 2015 a un costo de $15,085 billones, considerando gastos adicionales del Distrito. Bajo este escenario, Juan Manuel Santos en calidad de presidente de la república y Simón Gaviria, para entonces director nacional de Planeación, entregaron a Gustavo Petro un cheque simbólico por $9 billones”.
El apoyo de Petro a la reelección de Santos solo le alcanzó para avanzar hasta la ingeniería de detalle y un Confis por 13 billones de pesos. Terminado el período de Petro, y tras el retorno de Enrique Peñalosa a la Alcaldía de Bogotá, Santos y su vicepresidente, Germán Vargas Lleras, le entregaron tres Conpes a reelegido burgomaestre, quien cambió el diseño subterráneo por uno elevado recortando el trazado hasta la Calle 72.
Al respecto la concejal María Fernando Rojas, quien ocupo el cargo de directora del Instituto de Desarrollo Urbano (IDU), durante la administración de Gustavo Petro, dijo en su cuenta de Twitter, que nunca se relegó el proyecto de la primera línea del metro y que ella fue la encargada de revisar y dar viabilidad al proyecto heredado de la administración de Samuel Moreno Rojas.