Petro no se resigna a que la primera línea del metro de Bogotá no sea subterránea

Crecen las dudas sobre el apoyo del Gobierno Nacional a la construcción del metro elevado en Bogotá, tras la revelación que hizo el concejal, Oscar Ramírez, de la sugerencia hecha por el presidente de la república al Consorcio Chino China Harbour Engineering y Xi’An Metro para que una parte del trazado se ejecute bajo tierra, es decir, subterráneo.

Para el cabildante esto resulta bastante preocupante porque para él, esto podría traducirse en retrasos y modificaciones estructurales del proyecto, “todo con miras a que el Metro de Bogotá se adapte al modelo de Petro en 2015”, según expuso.

El jefe de gabinete del Distrito, Antonio Sanguino, asegura que el contrato firmado sigue en pie y que no se ha hablado de ninguna modificación al trazado con base en solicitud alguna.

El concejal Ramírez, considera que es bastante riesgoso para las finanzas de la ciudad y de la Nación modificar el proyecto cuando ya está rodando.

“La primera línea del Metro de Bogotá no es un capricho político de nadie, sino la necesidad más urgente en materia de movilidad de toda la ciudadanía. A través del Conpes 3900 del 25 de septiembre de 2017, se declaró su importancia estratégica. Luego, el 20 de octubre del 2020 se firmó el acta de inicio. La ejecución de esta primera línea tiene hoy un 16.78% de avance físico frente a la totalidad del proyecto; la gestión predial y el traslado anticipado de redes tienen un avance del 88%, mientras que las obras del patio taller y del intercambiador de la calle 72 ya arrancaron. Todo este trabajo permitirá que las obras de construcción inicien en el primer semestre del próximo año. De cambiar las condiciones contractuales del proyecto, todo este trabajo, el primero hecho en la historia de la ciudad para construir un Metro, puede perderse”, dijo el concejal.

La primera línea del metro, como está contemplada hoy, cuesta 13,9 billones de pesos y se otorgó, vía licitación pública. Por el momento se construye el Patio Taller en la localidad de Bosa y se están modificando las redes de acueducto y alcantarillado. El Distrito se dio a la tarea de adquirir predios para darle paso a la construcción de los pilotes.

Se espera las conclusiones que saldrán de la reunión entre el primer mandatario con el director del Departamento Nacional de Planeación y el Ministerio de Hacienda para revisar la viabilidad de que la primera línea sea subterránea.