Si el Petrismo quiere un gobierno que dure más de cuatro años, tendrá que aprender a cuidar su lengua y ser más estratégico en su estilo comunicativo. Las recientes salidas en medios de comunicación de Francia Márquez, vicepresidenta de República y Cielo Rusinque, directora del Departamento de Prosperidad Social (DPS), son un ejemplo que falta estrategia, lo que al final le terminarán pasando cuenta de cobro a la popularidad e imagen de esta apuesta progresista.
Y hay que decirlo, la prensa vive del show, la polémica, el insulto y la efervescencia emocional, porque es un terreno que conoce a la perfección y que les ha dado enormes privilegios. Por eso, no perderán la posibilidad de armar un espectáculo cada vez cualquier funcionario muestre señales de querer ‘comprar’ la pelea. En esta apuesta hay que evitar caer en la trampa y ser presos del ‘anzuelo’.
Miremos el caso es el de la directora del DPS, quien la semana que dio una entrevista a un espacio de Blu Radio invadida por emociones que transmitían molestia, indignación e incomodidad. Esta situación siempre le restará credibilidad y así, las mesas de trabajo aprovecharán para vender lo que mejor les factura: especulación e indignación. Estos dos ingredientes son muy peligrosos para la popularidad y gobernabilidad del Gobierno Petro.
Pero no le bastó esa entrevista a la señora Rusinque, sino que le dio por hacer réplica de una publicación en Twitter sobre la periodista Vicky Dávila y su responsabilidad en el ocultamiento de información en el caso Aida Merlano. La cuenta no solo era de un portal de dudosa credibilidad, si no que le abrió la posibilidad para que la famosa directora de medio sacara todo su arsenal de descalificaciones y patanería. En eso la presentadora es hábil porque tiene claro su rol, mientras que la funcionaria pierde en su objetividad en un terreno que no le luce bien y donde su Entidad no tiene nada qué decir.
Y como si esto no bastara, Francia Márquez concede una entrevista a la revista Semana donde la noticia final es el tono desafiante que muestra frente al uso que ella hace de helicópteros del Estado para transportarse. Si bien es claro que ese mensaje iba directo a opositores quienes la han atacado por esto, el ciudadano común se queda con el titular y extracto sensacionalista que se reproduce miles de veces y mina el mensaje de mejores condiciones de vida por el que se hicieron elegir.
Los tres episodios mencionados, se suman a ya pasadas salidas en medios de otros personajes del actual Gobierno, donde están proyectando una imagen funcionarios reactivos y poco proactivos, siendo este último atributo una premisa de cualquier vocero. Antes de comprar discusiones de tipo personal, se debe propender por posicionar los logros de su gestión al frente de las instituciones.
Y se equivocan estos líderes cuando le piden a los periodistas orientar las conversaciones sobre temas de la gestión, pues no lo harán. Insisto, los medios hábilmente saben llevar las conversaciones para sacar titulares explosivos, que se orienten de forma subjetiva al comportamiento de los funcionarios y las emociones que estos producen. Además, desde la campaña presidencial se pasaron los límites del periodismo y más de un medio ha caído en el activismo a favor de grupos políticos.
Si seguimos así nos esperan capítulos de eternas peleas en vivo y en directo entre entrevistados y entrevistadores que zanjarán sus diferencias en medio del insulto, sacrificando el seguimiento a las políticas públicas y sus resultados. Dejen de ‘morder el anzuelo’ porque estamos condenando las discusiones de país a un reallity de televisión. Cuiden el tono de los mensajes, porque estamos en un país que se deja provocar muy fácil.