La salud mental en el trabajo es un tema que preocupa a nivel global. En Colombia, la última Encuesta Nacional de Condiciones de Salud y Trabajo, realizada por el Ministerio de Trabajo, revela que entre un 20 % y 33 % de los trabajadores presenta altos niveles de estrés. Otros estudios señalan que, al menos, 3 de cada 5 trabajadores colombianos se siente agobiado por su trabajo. Sin embargo, a pesar de las consecuencias personales y laborales que tiene el estrés en el trabajo, poco más de 26% de los afectados consulta con un especialista.
De acuerdo con la psiquiatra Marta Elena Bernal, especialista de Coomeva Medicina Prepagada, no solo el número de consultas es bajo sino que, cuando el caso llega al médico, un evento de salud que podría haberse controlado fácilmente, ya ha escalado al nivel de enfermedad, lo que aumenta las consecuencias personales —ansiedad, crisis de pánico, insomnio, irritabilidad, intolerancia, exceso de sensibilidad— y laborales —ausentismo, alta rotación, baja productividad, aumento de accidentes laborales—. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) estima que los accidentes laborales y el estrés generan pérdidas anuales equivalentes a 4% del Producto Interno Bruto (PIB) global.
¿Por qué no consultamos al médico cuando tenemos estrés laboral?
Según la especialista de Coomeva Medicina Prepagada, sigue habiendo muchas ideas equivocadas alrededor de la salud mental. “Cuando nuestro cuerpo se enferma, todos sabemos que debemos cuidarnos y seguir un tratamiento para recuperar la salud —explica la doctora Bernal—; pero tendemos a pensar que una enfermedad mental es definitiva, que es un punto sin retorno, por eso intentamos ocultarnos y evitar el diagnóstico”.
En Colombia, aunque el estrés laboral afecta por igual a hombres y mujeres, el paciente promedio que consulta un problema de salud mental es mujer y tiene entre 30 y 50 años. “Existe una mayor exigencia social sobre los hombres en el sentido de que se espera que sean más autosuficientes y que tengan mayor aguante ante la adversidad, lo que hace que sean más reacios a pedir ayuda médica”, explica la psiquiatra quien añade que, en consecuencia, cuando el hombre consulta suele llegar con síntomas mucho más avanzados que las mujeres.
¿Cómo se trata el estrés laboral?
El tratamiento suele requerir un manejo interdisciplinario que busca guiar al paciente en un trabajo personal para manejar la ansiedad a través de pensamientos positivos y terapias de respiración, que pueda identificar qué puede y qué no puede controlar y qué cambios debe hacer antes de cambiarse a sí mismo. “Hay mucha prevención en tomar medicación en procesos de problemas mentales, pero son coadyuvantes para mejorar y controlar los síntomas”.
Para la especialista de Coomeva Medicina Prepagada, no hay que estigmatizar los problemas de salud mental laboral: son una enfermedad más y, como tal, se necesita seguir un tratamiento para lograr la curación. El primer paso es ser capaces de reconocer los síntomas en sus inicios, antes de que se conviertan en un verdadero problema de salud. El segundo sería acudir al médico y seguir sus indicaciones. El tercero es hablar, describir qué estamos sintiendo, sin ocultar información, pues a menudo hay una mezcla de factores, no solo laborales, sino personales y familiares.
“Estos tratamientos son muy exitosos. Aunque depende del diagnóstico, la personalidad del paciente y otros factores, en un promedio de 4 semanas o menos la persona se recupera y puede retomar sus actividades laborales con normalidad”, concluye la doctora Bernal.