El pesimismo reina en Wall Street en pleno inicio de año. Los principales índices estadounidenses cotizan con descensos tras cerrar un año para el olvido, el peor desde 2008. En los primeros compases de la sesión, el Dow Jones se deja un 1,4%, mientras que el Nasdaq y el S&P ceden un 1,9% y 1,2%, respectivamente.
Pero, ¿qué motivos tiene el mercado para caer? Las bolsas de ambos lados del Atlántico han encontrado la excusa en China. Los inversores temen una desaceleración económica en el gigante asiático después de que la actividad del sector manufacturero experimentase en diciembre su primera caída en 19 meses.
En EEUU, el PMI manufacturero en diciembre fue revisado una décima a la baja en el dato definitivo a 53,8 puntos. Se trata del nivel más bajo desde noviembre de 2017. En noviembre, el índice se situaba en el 55,3 puntos.
En el plano empresarial, Tesla sufre un duro revés tras no cumplir con las previsiones del mercado. La compañía fundada por el controvertido Elon Musk comercializó un total de 90.700 vehículos en todo el mundo durante el cuarto trimestre, un 8% más que en el tercer trimestre y de los cuales 13.500 fueron Model S, 14.050 Model X y 63.150 Model 3. Con todo, la cifra ha quedado por debajo de los 92.000 que esperaban los expertos.
