La recuperación económica china apunta a ser más rápida que lo esperado

Nos despertamos con una buena noticia que nos llega del Oriente como un rayo del sol al amanecer: los datos de ventas en la República Popular China son mucho mejor de lo esperado. Aunque aún se desconocen las cifras agregadas de todos los sectores, las estadísticas parciales son más que alentadoras. Esto es muy relevante, ya que China está “viviendo en el futuro”: la segunda economía global comenzó su desescalada hace ya casi dos meses, lo que la convierte en un excelente predictor de lo que puede suceder en el mundo de la “nueva normalidad”. Los informes de las empresas señalan un punto en común: el aumento de las ventas de comercio electrónico y la fidelidad a las marcas líderes.

Los ejemplos son numerosos y están comenzando a llegar a través de los preceptivos informes y “conference calls” del mes de marzo de las empresas a sus inversores. Todos apuntan a una misma realidad: las ventas de las principales empresas globales en el mercado chino han experimentado subidas extraordinarias, lo que demuestra que la demanda subyacente es aun fuerte. Se disipan los temores de que ocurra un escenario con deflación debido a un exceso de oferta frente a un consumidor prudente que no quiere gastar. Esto, según los historiadores económicos, fue uno de los ingredientes que aceleraron la Gran Depresión en los años 30 del siglo pasado. Esto apunta a que la economía China se esté recuperando con mucha más rapidez de lo esperado. Esa es la historia que señalan los indicadores de exportación y producción industrial suministrados por el “DANE chino”. Los primeros suben un 3,5% este mes frente a febrero, una caída del 6,6% vs el 2019. Las proyecciones de caída eran de prácticamente de un 10%, por lo que este dato se ha recibido con alivio. La producción industrial ha crecido un increíble 33%, record histórico, frente a una desaceleración del 2,7% en enero y 24,27%. El índice oficial de gerentes de compras de manufactura subió a 52.0 durante el mes, desde un deprimente 35.7 en febrero. La previsión que Reuters compila entre los economistas del mundo era de un 45.

Saltando de lo macro a lo micro, para muestra, dos botones, dos ejemplos de marcas icónicas (de la nueva economía y de la del siglo pasado): Tesla y Nike.

Sin embargo, lo que se está constatando es un cambio de los hábitos de compra por canal, trasladándose de “retail” a “online”. También hay un cambio coyuntural en la composición de la canasta básica familiar, hecho que se ha dado también en Colombia, como apunta Camilo Herrera, presidente de la demoscópica Raddar y ponente en el próximo foro del Confidencial Colombia “La Encrucijada del Nuevo Consumidor” el próximo 10 de junio las 11:00 am.

El líder en el desarrollo de vehículos de propulsión eléctrica, Tesla, reporta en marzo las mayores ventas de su historia en el gigante asiático, con más de 10.000 unidades vendidas en un mes. Esto representa un crecimiento del 260% sobre las desastrosas ventas de febrero. El objetivo de venta para todo el año es de unos 150.000 carros, producidos en su recién inaugurada planta de Shanghái, por lo que la empresa del billonario Ellon Tusk augura cautelosamente un buen año comercial. La cifras China Passenger Car Association (CPCA) reporta para el total del mercado automotor chino una reducción a la mitad de la tasa de descenso en ventas (-80% en febrero, -40% en marzo).

La americana Nike, empresa de equipamiento y ropa deportiva, ha visto su negocio crecer un 22%, superando la cifra de negocio del 2009, informa el WSJ. “En un momento en que las personas estaban confinadas en sus hogares, nos movimos rápidamente para aprovechar nuestro ecosistema de aplicaciones digitales y la red Nike Expert Trainer”, dijo el presidente ejecutivo John Donahoe a los analistas en su primera “conference call” desde que tomó el mando. Las ventas digitales aumentaron más del 30% en China. Su encarnizado competidor germano, Adidas, prevé un alza acelerada del negocio en los próximos meses, a pesar de que su presencia de marca y distribución ha disminuido significativamente a raíz de la crisis sanitaria. Un portavoz de Adidas señaló que han visto un alto aumento “en las tasas de conversión y el crecimiento excepcional en el comercio electrónico propio.”

Buenas noticias desde la antigua Catay. Aunque “una golondrina no hace verano” y haya que esperar a los datos de abril, hoy, más que nunca, el sol sale por Oriente.