Con los republicanos en el Senado a punto de absolverle del impeachment aupado por la bancada demócrata en la Cámara de Representantes, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ofreció el martes su tradicional discurso sobre el Estado de la Unión. Un evento que, por segunda vez en la historia, se produce en medio de un juicio político contra el mandatario del país. El ex presidente, Bill Clinton, ya se dirigió a los legisladores en 1999 en plena vorágine de su proceso de impeachment. ¿La diferencia?, el demócrata no se enfrentaba a la reelección.
Es por ello que el actual inquilino de la Casa Blanca, incidió en la fortaleza de la economía patria, su acuerdos comerciales, la muerte del jefe de ISIS, Abu Bakr al-Baghdadi y del líder militar iraní Qassem Soleimani, así como sus planes de atención médica e infraestructura. Una variedad de temas englobados dentro de su mensaje global, por título el “gran regreso estadounidense”, para justificar su reelección el próximo noviembre.
“Hace tres años, lanzamos el Gran Regreso Americano. Hoy me encuentro ante vosotros para compartir sus increíbles resultados”, aclaró Trump, quien dijo que su visión demuestra que su administración está construyendo “la sociedad más próspera e inclusiva”. “Todo ciudadano puede sumarse al existo sin precedente de América y donde toda comunidad puede formar parte de este ascenso extraordinario”.
De esta forma, su administración dice haber “destrozado” la mentalidad del declive estadounidense. ¡Estamos avanzando a un ritmo inimaginable!, determinó. Según relató Trump, desde el momento en que asumió el cargo, operó rápidamente “para revivir la economía de EEUU, reducir un número récord de regulaciones, promulgar recortes de impuestos históricos y luchar por acuerdos comerciales justos y recíprocos”. “Los años de decadencia económica han terminado”, sentenció.
El presidente de EEUU volvió a poner de manifiesto cómo durante su periplo en la Casa Blanca alrededor de 3,5 millones de personas en edad de trabajar se han sumado a la fuerza laboral. También recordó que bajo su mandato, el país ha ganado 12.000 nuevas fábricas mientras que en la era del demócrata, Barack Obama, y el republicano George W. Bush se perdieron 60.000.
No se olvidó de mencionar como el ingreso medio real de los hogares en estos niveles está en el nivel más alto jamás registrado y como desde su elección, “los mercados bursátiles de EEUU se han disparado un 70%, agregando más de 12 billones de dólares a la riqueza de nuestra nación”.
En este sentido, Trump hizo referencia a su política comercial y los acuerdos recientemente completados. Según explicó, muchos políticos abogaron por reemplazar el Acuerdo de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN o NAFTA, por sus siglas en inglés) pero “ninguno hizo absolutamente nada”. “He cumplido con mis promesas, hace seis días reemplacé el NAFTA y firmé en nuevo Acuerdo EEUU-México-Canadá”, añadió.
Tampoco olvidó mencionar a China y su “nuevo acuerdo innovador”, en referencia a la Fase 1 de los planes comerciales entre las dos mayores economías del mundo, que “defenderá a nuestros trabajadores, protegerá nuestra propiedad intelectual, traerá miles de millones de dólares y abrirá nuevos y amplios mercados a nuestros productos fabricados y cultivados en EEUU”, recalcó.
Críticas al socialismo y apoyo a Guaidó
Trump se comprometió a restaura el liderazgo estadounidense en todo el mundo y defender la libertad. Mencionó cómo su administración revirtió las políticas fallidas de la administración Obama en Cuba y apoya las esperanzas de cubanos, nicaragüenses y venezolanos para restaurar la democracia.
El mandatario recordó que EEUU lidera una coalición diplomática de 59 naciones contra el dictador socialista de Venezuela, Nicolás Maduro. “Maduro es un gobernante ilegítimo, un tirano que brutaliza a su pueblo. Pero el dominio de la tiranía de Maduro se romperá” aventuró el republicano antes de presentar a Juan Guaidó, presente en la Cámara de Representantes como invitado de Trump.
“Esta noche aquí hay un hombre que lleva consigo las esperanzas, los sueños y las aspiraciones de todos los venezolanos. Con nosotros está el verdadero y legítimo presidente de Venezuela, Juan Guaidó”, destacó el inquilino de la Casa Blanca asegurando que todos los estadounidenses están unidos con el pueblo venezolano en su justa lucha por la libertad. “El socialismo destruye las naciones. Pero recordemos siempre, que la libertad unifica el alma”, perseveró Trump.
Defensa, salud, inmigración e infraestructura
El mandatario manifestó que para salvaguardar la libertad de su país se han invertido 2,2 billones de dólares en servicios militares y se ha creado una nueva categoría en las fuerzas armadas que incluye también el espacio. El republicano dijo estar trabajando para “acabar con las guerras de América en Oriente Medio” y defender las vidas estadounidenses.
En lo referente al sistema de salud del país, Trump fue tajante al arremeter contra los demócratas y dejar claro que “nunca dejaremos que el socialismo destruya el sistema de salud de EEUU”. Sobre este asunto prometió que una mejor calidad de vida para los estadounidenses requiere el sistema más asequible, avanzado y de mayor calidad. Además dijo que “siempre protegeremos a pacientes con condiciones y afecciones preexistentes”.
Sobre la inmigración, Trump espetó que EEUU “debería ser un santuario para los americanos que cumplen la ley”. “No queremos criminales extranjeros” afirmó al tiempo que aseguró que su administración ha realizado un esfuerzo sin precedentes para asegurar la frontera con México.
Trump abogó por frenar la atención médica gratuita para los inmigrantes ilegales. “Si forzar a los contribuyentes estadounidenses a brindar atención médica gratuita e ilimitada a extranjeros ilegales le parece justo, entonces apoye a la izquierda radical”, aclaró. “Pero si cree que deberíamos defender a los pacientes y a los mayores estadounidenses, ¡quédese conmigo y apruebe la legislación para prohibir la atención médica gratuita del gobierno para los extranjeros ilegales!”.
Hubo referencias a la necesidad de reconstruir y fortalecer la infraestructura de EEUU. Trump animó a los legisladores para que apruebe el proyecto de ley del senador republicano John Barrasso, para invertir en nuevas carreteras, puentes y túneles a través. El comandante en jefe de EEUU se comprometió también a garantizar que todos los ciudadanos puedan tener acceso a Internet de alta velocidad, incluida la América rural.
Caos en Iowa e impulso en la popularidad de Trump
Sus palabras en el Capitolio se produjeron un día después del caótico recuento de los caucuses demócratas en Iowa y justo la misma jornada en que una encuesta de Gallup señaló que el republicano alcanzó los mejores niveles de popularidad de su presidencia, con un 49% de los encuestados aprobando su papel y un 50% no respaldando su papel como presidente de EEUU.
La lista de invitados del presidente y la primera dama, Melania Trump, destacaron por su papel en sintetizar algunos de los logros del mandatario. Entre ellos se encontraba un ex adicto que se ha beneficiado de uno de los programas de capacitación laboral de la administración Trump; el director adjunto de la Patrulla Fronteriza de EEUU; una estudiante de cuarto grado y su madre de Pennsylvania que, según la Casa Blanca, se vieron negativamente afectadas por la legislación del estado.
También contó con la presencia de una madre y un hijo cuyo padre fue asesinado por una bomba en la carretera que, de acuerdo a los funcionarios estadounidenses, fue facilitada por Soleimani, el comandante iraní reciente asesinado; y un ex jefe de policía en Venezuela que estuvo encarcelado durante años en el país antes de escapar a Florida.
Antes del discurso se añadieron invitados adicionales entre los que destacó Juan Guaidó, que la Casa Blanca definió como el presidente interino de Venezuela y líder de la Asamblea Nacional venezolana elegida democráticamente. También estuvo presente el presentador conservador de radio, Rush Limbaugh, quien recibió la Medalla de la Libertad de manos de Melania Trump.
La respuesta demócrata, también en español
La respuesta demócrata llegó de la mano de la gobernadora de Michigan, Gretchen Whitmer, quien centró su atención en los esfuerzos de su partido por mejorar la atención médica, la infraestructura y las condiciones económicas para la clase trabajadora. “Es bastante simple”, inidicó Whitmer, “los demócratas están tratando de mejorar su atención médica mientras los republicanos en Washington están tratando de quitárselo”, añadió.
También hubo contestación demócrata en español gracias a la congresista por Texas, Veronica Escobar. Al igual que Whitmer, Escobar incidió en la atención médica y la economía, así como en el tema de la violencia y tenencia de armas. El distrito de Escobar incluye El Paso, donde el año pasado un hombre armado mató a 22 personas e hirió a docenas más en el ataque más mortal contra los hispanos en la historia del país.
“Un terrorista doméstico confesó haber conducido más de 10 horas para atacar a mexicanos e inmigrantes”, relató la legisladora. “Justo antes de comenzar su ola de asesinatos, publicó sus puntos de vista online y usó un lenguaje de odio con las mismas palabras utilizadas por el presidente Trump para describir a inmigrantes y latinos”.