Colombia está en conversaciones con el Instituto Gamaleya de Rusia sobre la adquisición de dosis de la vacuna Sputnik V COVID-19, dijo el lunes su ministro de Salud, pero no se apresura a llegar a un acuerdo debido a los acuerdos existentes de suministro de vacunas con compañías farmacéuticas.
El país andino ya tiene acuerdos con una serie de productores de vacunas y el mecanismo COVAX respaldado por la Organización Mundial de la Salud para asegurar más de 61 millones de dosis de vacunas, suficientes para inocular a unas 35,2 millones de personas.
Colombia recibirá vacunas desarrolladas por Pfizer y BioNTech, así como AstraZeneca, Moderna y Sinovac.
“Tenemos un acuerdo de confidencialidad con (el Instituto Gamaleya de Rusia)”, dijo a Reuters el ministro de Salud, Fernando Ruiz, en una entrevista telefónica. “Estamos hablando con ellos, pero realmente con la cantidad que tenemos asegurada en este momento … no tenemos la urgencia de continuar”.
Aún no hay una estimación de cuántas dosis de Sputnik V podría recibir Colombia en un posible acuerdo, agregó Ruiz.
Dijo que Colombia también tiene acuerdos de confidencialidad con Sinopharm y Cansino de China, así como con el Serum Institute de India.
El país sudamericano está programado para comenzar una campaña de vacunación masiva el 20 de febrero y espera inocular al 70% de su población en 2021 en un intento por lograr la inmunidad colectiva contra el coronavirus.
Pero el gobierno está preocupado por la adopción de vacunas, dijo Ruiz. “Las encuestas muestran que poco menos del 40% de la población tiene dudas sobre la vacunación. Esperamos que una vez que comience el proceso, todo eso cambie”.
Aunque Colombia dijo anteriormente que no vacunaría a los inmigrantes indocumentados, el Ministerio de Salud ahora está desarrollando un plan para proporcionar vacunas a los migrantes con la ayuda de COVAX, dijo en un comunicado.
Colombia es el hogar de unos 1,72 millones de venezolanos que han huido de la agitación económica y política en el país vecino. Casi 1 millón de esos migrantes están clasificados como “irregulares” por las autoridades de migración.