Después de haber sido operado, Wardle, de 45 años de edad quería estrenar su pene biónico con su pareja sentimental y todo funcionó muy bien hasta que su pareja lo encontró inconsciente en el suelo tiempo después de haber tenido sexo con ella.
Andrew Wardle duró 5 días en coma y todo se debió a una complicación con la vesícula biliar, la cual fue retirada tras una operación con una pequeña incisión en su abdomen. Afortunadamente todo quedó en un susto para el británico, quien hoy asegura estar muy feliz.
Él afirmó que durante muchos años intentó acabar con su vida debido a su condición y que además fue abandonado por su familia biológica cuando él era muy niño. Después de su operación tuvo que mantener como prueba dos semanas de erección continua mediante un líquido de un pequeño saco instalado en su pene.