Esteban Sánchez era un joven de 32 años que departía con sus amigos en el barrio Calatrava de Itagüí, Antioquia. En un momento de la noche se le resbaló una botella de licor, la causa para que sus acompañantes de parranda lo lincharan hasta asesinarlo.
“Después de una ingesta exagerada de alcohol de un grupo de personas que se encontraba en vía pública, se tiene información que desde la madrugada habían tenido problemas internos en diferentes residencias, y por temas de intolerancia y detona violencia entre los mismos amigos”, dijo Rafael Oltálvaro, secretario de Seguridad de Itagüí.
Según Rafael Otálvaro, a Esteban Sánchez lo persiguieron con palos y uno de los agresores lo hizo con una arma blanca. Su madre se dirigió al CAI del barrio para hacer el denuncio, pero cuando la Policía llegó al lugar de los hechos, el joven no contaba con signos vitales.
Cinco personas fueron capturadas, enfrentan su proceso de judicialización y deberán afrontar cargos por homicidio.