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Confidencial Noticias 2025

Etiqueta: Ecopetrol

Petróleo Verde

Sin pena ni gloria, en marzo de 2022, Ecopetrol exportó sus primeros barriles verdes de petróleo. Esta venta de millón de barriles, se compensó ambientalmente con 32.000 toneladas de bonos de carbono. Aún con reparos de efectividad, el petróleo verde, donde se obliga a compensar la afectación ambiental, es el futuro. Antes de asfixiar los hidrocarburos, se podría explorar una transición energética. Una decisión abrupta, a parte de inmensos costos económicos, afectaría la posibilidad de lograr recursos para salvar ecosistemas. Inclusive, bien diseñado, el petróleo verde podría ser menos contaminante que la prohibición.

Colombia no debe permitir ninguna actividad que no pueda compensar su afectación. El fracking es dañino, mientras no pruebe lo contrario, no se debe permitir. Su prohibición no tiene impacto social ni económico y podría prevenir un gran daño ambiental. Inclusive se debe elevar los estándares ambientales sobre la actual producción. Colombia debe ser líder mundial en transición energética, puede poner ejemplo en hidrocarburos.

 

No somos un país petrolero, pero si produce mucho petróleo. Estamos entre el puestos 20 y 25 del escalafón de producción mundial. Durante 2021, gracias al Covid y a la mala gestión de la ANH, Colombia registró la producción más baja de hidrocarburos de los últimos 12 años. Aunque gracias a precios altos durante 2022, se logró incrementar en abril la producción diaria a 755 mil barriles. Es una bonanza que se esta dejando sobre la mesa.

Dependiendo del precio, esta cadena, con todos sus gravámenes, aporta entre el 3,5-4,5% del PIB de los ingresos, entre directos e indirectos este año debe ser como $39 billones.  Las regalías petroleras para 70% de los departamentos, son su principal fuente de inversión. Esto sin considerar que cerca del 55% de los dólares que entran al país son de hidrocarburos. Frenar la exploración no tiene efectos inmediatos, pero a partir de 2023 contribuye a la devaluación y menores ingresos. Con nubes de recesión global y altas tasas de interés, Sin estos recursos, será mas difícil el desarrollo rural, mejoras en educación y un mas justo sistema de salud.

Permitir que se explote petróleo verde no solo permitiría aliviar la carga fiscal, sino que se podría sobre-compensar para que fuera negativa su contribución de gases efecto invernadero. Se crearía un mercado interno de bonos de carbono que salvaría ecosistemas como el Amazonas y podría darles una vida digna a comunidades rurales. En cálculos personales, al sobre pasar los US$23 tonelada de compensación por captura de carbono, es mejor para el campesino cuidar el bosque que deforestar. Hoy el mercado nacional esta en US$4, el voluntario internacional entre US$7-14.

La ley de cambio climático en 2018 le dio tres años para crear un mercado de bonos de carbono cosa que no ocurrió. La nueva administración podría tener esta victoria temprana. La tributaria en vez de poner impuesto a la exportación debería crear una sobre tasa de renta, con tal de financiar la salvación de los principales ecosistemas, un mecanismo similar al impuesto al carbono. La transición energética mas que un ejercicio fiscal, requiere atrincherarse en la protección ambiental, mientras las inversiones de transición se ejecutan. De un día para el otro, es difícil.

 

 

Autosuficiencia del petróleo no se logrará por más exploración o fracking

A pocos días de la toma de posesión del nuevo Gobierno aún existe la expectativa negativa que se pare la exploración petrolera y el país entre en una senda de desabastecimiento en los años subsiguientes con fuertes alertas de la devastación de la economía nacional y las finanzas públicas, que también fue duramente repudiado por muchos políticos y economistas durante la campaña. Lo que muestran los datos del sector es que no tenían el conocimiento necesario sobre el tema como para vociferar como lo hicieron.

Lo que no se ha dicho es que la exploración en Colombia desde hace más de 30 años no ha sido la principal vía por la cual hemos tenido petróleo. El éxito de esas exploraciones ha representado menos del 10% de las adiciones de reservas probadas de petróleo y gas; por ejemplo, para 2021 fue tan solo el 6% y 13% respectivamente, según cifras oficiales de la ANH. La gran mayoría de la producción (entre el 80% y el 90%) en las últimas tres décadas ha provenido de reservas descubiertas antes, en 1970´s, 1980´s y 1990´s, y principalmente lograda mediante sistemas productivos que llaman los ingenieros de petróleos recuperación primaria y algo de recuperación secundaria en campos “viejos”; también se explica por una de esas vueltas de la rueda de la fortuna debido a que el régimen Venezolano bajó la producción de crudos pesados, permitiendo que nuestros crudos pesados tuvieran mercado. Es decir, pareciera que toda la histeria que generó el tema en campaña era inocua.

 

Tampoco se ha dicho que el Fracking, que es un tipo de estimulación hidráulica a los yacimientos como la que se hace desde hace años en la recuperación primaria y secundaria, solo que a formaciones más duras y generalmente mediante pozos horizontales,  y por ello más costosa, puede ser una alternativa siempre y cuando los precios internacionales lo permitan. Pero no pareciera la más lógica porque primero, por ser más viable, rentable y sostenible para el país y para Ecopetrol,  estarían la recuperación secundaria y terciaria de las reservas ya descubiertas en los campos “viejos”.

Ecopetrol ha emprendido el aprendizaje del Fracking asociándose en algunos campos en USA y el discutido piloto en el país; pero por increíble que parezca, sabe poco de recuperación secundaria y terciaria cuando es su principal fuente y su mayor potencial. Solo hasta hace pocos años ha venido cambiando su estrategia de explotación, la cual ha debido hacer al menos hace tres décadas cuando empezaba a recibir campos con grandes reservas ya descubiertas, producto de la reversión de contratos petroleros; campos donde de hecho era socio desde antes de las reversiones.

También hay que decirlo, toda la histeria que genera el Fracking debe moderarse y de lo que debe hablar Ecopetrol, con prioridad, es de recuperación secundaria. A hoy hemos extraído del subsuelo menos del 20% de las reservas ya descubiertas de petróleo, de las llamadas reservas in situ: esto es lo que se conoce como el factor de recobro. En el mundo este factor supera el 30%. Estamos lejos de raspar la olla con lo que ya tenemos descubierto, podemos hacer mucho más en recobro mejorado en campos viejos donde, además, podríamos usar la misma infraestructura de superficie que ya tenemos y tener un menor impacto ambiental y menores costos.

Con las recomendaciones de la OCDE para “evitar” una mala influencia gubernamental sobre una empresa industrial del Estado, se eliminó la participación de los ministros en su junta directiva, en especial del de economía. Esto tiene un error estructural en la concepción de la relación de la empresa con la economía nacional, dado que ésta depende en una importante proporción de aquella, y por lo tanto no se podía seguir a rajatabla la recomendación de la OCDE, bien intencionada, pero que aplica a casos genéricos de Empresas de Propiedad del Estado y no a una como Ecopetrol que hace parte íntima del manejo económico y fiscal del país. Y es que estamos acostumbrados a ser “el vagón de la cola” y no hemos desarrollado el criterio suficiente para revisar las “mejores prácticas” que fueron desarrolladas en otros contextos para localizarlas debidamente al nuestro.

Y en cambio sí se dio paso al manejo politiquero y amiguero que le han dado, con exactitud lo contrario a lo que intenta proteger la recomendación de la OCDE. Se supone que el Gobierno que representa al mayor accionista presenta y elige para su junta directiva a prohombres con enormes conocimientos en el negocio y a toda prueba. La realidad que hemos visto es al revés, lamentablemente: ni conocimiento del negocio ni de economía (Fonseca, 2021). El petrolero es un negocio de mucho cuidado, no solo por las complejidades tecnológicas y de los mercados, sino porque es de grandes números, y cualquier riesgo materializado va contra los recursos públicos. Cuando el riesgo asumido no ha sido razonable comparativamente con otras empresas del sector, privadas, termina siendo un error, y ya le hemos visto varios a esta administración (Perú, Brasil, USA, ver Suárez, 2022).

Y no se trata solamente de la conformación de la Junta como bien resalta el profesor Cuéllar (Uniandes, 2022). Pero hay que ir más allá, con una comprensión más estratégica de las dos funciones que deberían estar encadenadas: una, la del manejo económico y fiscal del país, y dos, la función empresarial de Ecopetrol, en ese orden. Las decisiones estratégicas de política económica y energética del país deben tomarse en el Gobierno y delimitar así la cancha de juego en que la empresa debe moverse y desarrollar su negocio. Y no al revés, porque no solo queda como una rueda suelta en el manejo económico y fiscal, sino que puede representar una contravía a las políticas económicas del Gobierno. Es decir, no solo no es una herramienta sino que puede volverse un arma en su contra, y de reflejo, en contra de los colombianos. Por su parte, la función empresarial no tiene por qué ser interferida por el Gobierno una vez definida la política económica y energética, y la debe desarrollar la empresa autónomamente siguiendo los lineamientos de la OCDE.

Un ejemplo monumental que ilustra esto claramente es el de la gestión de la demanda. Los análisis de la UPME muestran que el consumo energético de los automóviles en el país es demasiado ineficiente, menos de un 23% (de toda la energía consumida a través de la combustión en los motores, tan solo 23% termina siendo energía útil en el movimiento de los vehículos).

La mayor parte de esto ocurre porque el parque automotor es viejo y mal mantenido, con tecnología de muchos años atrás, que no solo impacta al medio ambiente de manera grave (razón suficiente para ser retirados del mercado) y afecta de manera negativa a la seguridad vial, sino que en términos económicos es un pésimo negocio para el país. Si el parque automotor, que tiene en promedio una vejez de 17.5 años, fuera actualizado, se tendría un potencial de ahorro entre 38 y 50% por ciento, según las estimaciones de la UPME.

Una reducción de consumo nacional de petróleo del 50%, significa en términos relativos haber aumentado las reservas al doble en forma equivalente, sin discusiones de exploración ni de fracking siquiera. O liberando capacidad para exportar más si se requiriera como lo explica el próximo ministro Ocampo (Semana, 2022). Si Ecopetrol se maneja como empresa independiente del manejo económico del país y de la política energética, está solamente encaminada a generar utilidades, así esas utilidades se vuelvan humo tóxico en la ineficiencia del parque automotor, lo cual no es su problema. Es decir, torpemente encaminada a generar utilidades empresariales, sin tener en cuenta los efectos económicos, sociales y ambientales negativos para sus propios dueños, los colombianos.

Por lo que es imprescindible tomar decisiones estratégicas de país, antes que decisiones estratégicas de empresa. La reducción de la demanda de esta manera ahorraría al país en exploración, divisas para compra de combustibles, y el efecto en el medio ambiente. Es decir, que se podría invertir una parte importante de ese ahorro anual en generarlo ya, a través de incentivos y programas de ayuda al servicio público por tecnologías ultra-modernas incluida la electrificación del parque automotor público y privado. Podría hacerse hasta un monto tal que la tasa interna de retorno iguale la mejor de una inversión en exploración (teniendo el % de éxito anotado). No sorprenda que podrían ser montos enormes: como comparación hipotética, es posible que se obtenga una rentabilidad superior a la de Reficar invirtiendo los mismos 8.000 millones de dólares en reducir la demanda.

Estaríamos gerenciando el país como se debe, siguiendo el bienestar de la gente como único derrotero válido y el mayor beneficio económico, social y ambiental de los colombianos como objetivos supremos, y no dejando que se gerencie la empresa solamente, que aunque se hiciera muy bien terminaría en resultados negativos netos comparados. Mucho que reaprender y aplicar en el nuevo Gobierno, en la OCDE y en Ecopetrol.

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Este articulo ha sido escrito con base en las enseñanzas de los análisis estratégicos del sector energético del ingeniero Julián Garcia, compañero de comisión técnica en la Sociedad Colombiana de Ingenieros y profesor universitario. Mi gratitud con el ingeniero García por su profundidad.

* @refonsecaz

Calma, señor presidente electo

Ecopetrol es la empresa insignia de los colombianos, la joya de la corona que ha generado los mayores niveles de ventas de la industria colombiana, para el año 2021 creció en ingresos operacionales el 83,39 % y dejó 16,6 billones de pesos en utilidades, diez veces superior a las utilidades del año 2020. Es la gran compañía del País, pese a la incertidumbre arrojada por el presidente electo sobre el futuro de la exploración y explotación petrolera en Colombia y su propuesta de giro del sector energético hacia las energías limpias. Lo anterior es relevante si se tiene en cuenta que el 88,49 % de la participación accionaria de la nacional petrolera es propiedad de entidades estatales, y tan sólo un 11,57 % del componente accionario está en manos de inversores particulares.

Frente al anterior escenario es a penas natural que, el Gobierno Nacional sea el encargado de controlar los cuerpos directivos de la petrolera, en atención a que se trata de una Sociedad de Economía Mixta, de carácter comercial, constituida como sociedad anónima del orden nacional, adscrita al Ministerio de Minas y Energía, según Ley 1118 de 2006 que modificó la naturaleza jurídica de Ecopetrol. Huelga destacar por tratarse de una sociedad de economía mixta de carácter comercial, Ecopetrol como cualquiera otra sociedad comercial debe regirse por los estatutos societarios que constituyen su piedra angular. En reciente Asamblea de Accionistas se modificaron los estatutos sociales de Ecopetrol en el sentido de ampliar el término de permanencia de los miembros de la junta directiva de dos años a cuatro años, lo que significa en la práctica que la actual junta directiva elegida en 2021 tendrá permanencia hasta el año de 2025. Reforma social que forma parte del ejercicio de la autonomía de la que gozan las asambleas de accionistas en las sociedades anónimas con base en los principios del gobierno corporativo y sus prácticas internacionales.

 

Esta reforma estatutaria motivó a que el presidente electo publicara en la red social Twitter un mensaje del siguiente tenor: “No nos reten (sic). El voto popular es mandato. Quiero producir un consenso (sic) pero no doblegar el voto popular que quiere energías limpias. El propietario público elige libremente sus miembros en las empresas que los representen. Es la representación del pueblo”. El anterior mensaje en tiempos de inflación y devaluación acelerada del peso colombiano frente al dólar en índices históricos, con tendencia a lograr mayores niveles devaluatorios y de hiperinflación, no sólo se puede interpretar como un mensaje de amenaza para el gobierno corporativo de Ecopetrol si no que ocasionará mayor precariedad en el mercado de divisas y desconfianza inversionista en la economía nacional. De nada sirven los esfuerzos del ministro de hacienda designado y de los asesores económicos del presidente electo, si éste de manera desaforada y hasta populista carente de tacto de estadista realiza este tipo de declaraciones que para nada se compadecen con la realidad del País y el buen curso de Ecopetrol.

El señor presidente electo debe demostrar y enviar mensajes de calma para ante la actual crisis económica mundial. Administrar una entidad petrolera estatal cuya dirección ha sido exitosa en los últimos tiempos, lo evidencian los balances contables, no debería ser un acto de populismo, ni de redes sociales convocando al pueblo a tomar el control de ésta; empero su deber funcional como primer magistrado del País es el respeto por la ley. Su deber es garantizar el pleno ejercicio del gobierno corporativo de la estatal petrolera, y en virtud de ello, respetar las dinámicas corporativas de accionistas mayoritarios y minoritarios, es decir, El Estado y los particulares, respectivamente. Lo que funciona, no debería cambiarse.

Calma señor presidente, ya suficiente zozobra hay en la industria petrolera con sus equívocas declaraciones sobre la terminación de la exploración petrolera y las declaraciones de la ministra del ambiente designada sobre la prohibición de la técnica de fracking en el territorio nacional. Señor presidente electo: ¡Un llamado a la mesura y a las justas proporciones! Ecopetrol es una sociedad comercial de economía mixta, y pese a la gran participación del Estado, no le queda bien al primer burgomaestre electo lanzar palabras que se leen amenazantes y sin sentido alguno. El pueblo elige desde la esquina de las emociones, pero no sabe administrar, ni dirigir empresas, porque de ser así, Colombia sería un país de empresarios.  No olvide que su contendor para la segunda vuelta obtuvo 10.580.412 votos que también son de ciudadanos, Usted no gobernará únicamente para los 11.281.013 de ciudadanos que le eligieron.

Los representantes de las juntas directivas deben ser elegidos según las reglas estatutarias. El gobierno corporativo es claro y permite que la administración técnica y correcta de la estatal petrolera siga dando fruto, pero no vaya a poner a la primera línea y al sindicalismo a dirigir a Ecopetrol. Claro es, que si Usted fuese empresario no le daría a quienes no están preparados la dirección de su empresa. Acalle los ánimos y compórtese, por favor, con la dignidad que ostentará como futuro presidente de Colombia en el marco de la Constitución y la ley.

 

 

 

 

 

El fantasma de Duque en la junta directiva de Ecopetrol enciende el debate

Tras la publicación de un artículo en el diario La República donde la junta directiva de la Ecopetrol explica como esta integrada y la manera en cómo funciona, luego de que la reciente asamblea general modificara los estatutos, el presidente electo, Gustavo Petro, trino lo siguiente:

“No nos reten. El voto popular es mandato. Quiero producir un consenso, pero no doblegar el voto popular que quiere energías limpias. El propietario público elige libremente sus miembros en las empresas que lo representen. Es la representación del pueblo”.

 

De inmediato se desató una polémica en el país, en primer lugar, porque el órgano directivo de Ecopetrol está conformado mayoritariamente por amigos del gobierno de Iván Duque y se teme que vayan en contravía de los cambios que quiera implementar la Presidencia de Gustavo Petro en temas minero energéticos y de economías extractivas. Para solucionar este impase el mandatario electo tendría que convocar una asamblea extraordinaria que permita equilibrar las cargas y que modifique una vez más los nuevos estatutos que ordenaron que el período de cada miembro directivo pasara de dos a cuatro años.

Al respecto, el ministro de Hacienda designado, José Antonio Ocampo, dijo en los micrófonos de Caracol Radio que harán un llamado a una nueva asamblea general de socios de Ecopetrol para cambiar la actual junta directiva.

“»Se va a cambiar la junta directiva, pero esto no quiere decir que sean todos los miembros. Ya lo veremos en su debido momento, pero lo que se hizo fue un atropello a la democracia y al gobierno electo», comentó.

La junta directiva de Ecopetrol está conformada por Luis Guillermo Echeverri; Cecilia María Vélez White; Germán Eduardo Quintero Rojas; Hernando Ramírez Plazas; Carlos Gustavo Cano Sanz; Sergio Restrepo Isaza; Luis Santiago Perdomo Maldonado; y Esteban Piedrahita Uribe. Anteriormente, Juan Posada hacía parte de la Junta de la petrolera, pero fue seleccionado para la presidencia de ISA. Todos estos, cercanos al presidente Iván Duque.

 

Ecopetrol venderá su participación del 51,8% en Invercolsa

La junta directiva de Ecopetrol ha autorizado la venta de participación del 51,8% de la empresa en Inversiones de Gases de Colombia (Invercolsa), según ha informado en un comunicado.

La decisión, según ha explicado la empresa en un breve documento, tiene como principales objetivos la desinversión de un activo no estratégico para los objetivos de crecimiento y transición energética de la compañía, así como la reasignación de capital a nuevas oportunidades alineadas con su estrategia a 2040.

 

El pasado mes de marzo la petrolera anunció el lanzamiento del Plan Estratégico de Hidrógeno de bajo carbono, que tendrá proyectos por valor de 2.500 millones de dólares hasta 2040.

El plan estará dotado con una inversión anual promedio cercana a los 140 millones de dólares y tiene como meta la producción de hidrógeno verde, azul y blanco, que aportará entre el 9% y el 11% al objetivo de reducción del 50% de las emisiones de alcance 1,2 y 3 al 2050.

Para ejecutar este programa, la empresa ha trazado una ruta que se desarrollará en tres horizontes. El primero, entre 2022 y 2030, se enfocará en la expansión del hidrógeno en operaciones propias con proyectos a escala industrial e inicio de aplicaciones en movilidad sostenible con automóviles y autobuses.

El segundo, de 2030 a 2040, busca capturar y materializar resultados significativos en la descarbonización de las operaciones, diversificar en movilidad marítima y de aviación con hidrógeno y nuevas oportunidades comerciales en los mercados de Europa y Asia. El tercer horizonte, desde el año 2040 en adelante, está enfocado en la masificación del uso del hidrógeno y la expansión del portafolio.

Ecopetrol cosecha los mejores resultados de su historia

La petrolera estatal colombiana Ecopetrol cosechó en 2021 los mejores resultados de su historia, tras contabilizar un beneficio neto atribuido de 16,9 billones de pesos colombianos, casi diez veces más que las ganancias registradas en el ejercicio precedente.

La compañía ha explicado que el histórico beneficio se debe a un entorno de precios favorables y una «destacada» gestión comercial que permitió materializar unos mejores diferenciales de crudo, productos y petroquímicos. En el resultado también influyeron unos mayores volúmenes de venta de productos y gas, asociados a una mayor demanda en Colombia por la reactivación económica.

 

En este contexto, la cifra de negocio del grupo ascendió un 83,4%, hasta los 91,74 billones de pesos; con unos costes asociados a la producción de 36,16 billones de pesos, un 189,9% más. Las ventas nacionales crecieron un 85%, mientras que las exportaciones se impulsaron un 81,8%.

Por segmentos de negocio, el área de exploración y producción creció un 72,2%, el de transporte y logística decreció un 0,3% y el segmento de refinación se impulsó un 95,3%.

A cierre de año, el resultado operativo de la petrolera fue de 29,59 billones de pesos colombianos, un 287,7% más.

En lo que respecta al cuarto trimestre de 2021, la facturación de la empresa se multiplicó por más de dos en comparación con el mismo periodo el año anterior, hasta los 31,76 billones de pesos ); mientras que el resultado neto superó los 6 billones de pesos (1.393 millones de euros), nueve veces más que en el cuarto trimestre de 2020.

Ecopetrol anuncia millonaria inversión en la víspera de su centenario

Ecopetrol ha informado que la refinería de Barrancabermeja, principal instalación de refino en Colombia, realizará inversiones por cerca de 3,2 billones de pesos colombianos entre 2022 y 2024 destinadas a la incorporación de tecnología, modernización y confiabilidad de sus plantas y a la gestión ambiental, según ha informado este viernes en un comunicado.

La refinería, que celebra este viernes sus primeros 100 años, abastece cerca del 80% de la demanda interna de combustibles de Colombia. Está compuesta por 54 unidades de refino, 32 de servicios industriales, un centro de optimización y 351 tanques de almacenamiento.

 

El objetivo de la inversión, según la compañía, es consolidar a la región petrolera de Barrancabermeja «como uno de los centros de refino más modernos en el continente, con una operación cada día más seguro, limpia y rentable».

El plan de inversiones de la refinería hace énfasis en la gestión circular del agua, la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y continuar con la mejora en la calidad de los combustibles, la incorporación de nuevas tecnologías y energías renovables, el desarrollo de hidrógeno verde y azul, captura, uso y almacenamiento de carbono, y solucione basadas en la naturaleza, entre otros.

«La refinería de Barrancabermeja dará importantes pasos para continuar con su proceso de transformación con enfoque hacia la modernización de sus procesos, digitalización, descarbonización de las operaciones y transición energética, lo que le permitirá iniciar una nueva etapa de crecimiento y excelencia operacional para continuar entregando la energía que mueve a Colombia», ha destacado el presidente de Ecopetrol, Felipe Bayón.

Bayón también ha anunciado que, mediante una alianza con Claro (América Móvil) y el apoyo del Ministerio de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, Ecopetrol trabaja en un plan piloto para la implementación de la tecnología 5G en Barrancabermeja, convirtiendo a la región en uno de los primeros territorios 5G del país.

Por otro lado, el presidente de la empresa ha anunciado que el programa ‘Bachilleres Ecopetrol Mario Galán Gómez’ becará en 2022 a 10 jóvenes de la región con el 100% del valor de la matrícula en la institución de educación superior de su elección.

Asimismo, la empresa tiene previsto invertir más de 250.000 millones de pesos en proyectos sociales «para mejorar la calidad de vida de los habitantes del área de influencia».