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Confidencial Noticias 2025

Etiqueta: Vapeadores

Las terrazas se han convertido en un 45% en el lugar donde el humo del cigarrillo expone a los no fumadores, revela estudio

Foto: Ine.es

El 45 de los no fumadores asegura estar expuesto al humo del tabaco en las terraza y, concretamente, el 52 por ciento está expuesto al humo de cigarrillos convencionales y el 37 por ciento a las nuevas formas de consumo tabáquico como cigarrillos electrónicos o tabaco calentado, según el ‘Estudio de tabaquismo pasivo en España 2024’ relizado con casi 3.000 entrevistas entre la población española de 16 años o más por la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), cuyos resultados preeliminares se han presentado este miércoles.

 

Esta encuesta muestra que el 17 por ciento de la población española es fumador activo, el 29 por ciento exfumador y el 51 por ciento nunca ha fumado y, con respecto a los vapeadores y tabaco calentado, el seis por ciento es fumador activo, el tres por ciento exfumador y el 85 por ciento nunca lo han probado. Así, los datos revelan que casi el 17 por ciento de la población no fumadora mayor de 16 años presenta algún tipo de exposición pasiva al tabaco.

Esta cifra de tabaquismo pasivo es mayor en los lugares de ocio como la hostelería, sobre todo en las terrazas donde la exposición se multiplica hasta por siete. En este sentido, el 16 por ciento de los trabajadores de hostelería están expuestos al humo de tabaco, frente al siete por ciento de trabajadores de la empresa privada y el cuatro por ciento de la empresa pública. En cuanto al humo de vapeadores, el 22 por ciento de los hosteleros afirman estar expuestos, frente al tres por ciento de los trabajadores de empresas públicas o privadas.

Uno de los ámbitos que más preocupan a los expertos son los hogares ya que en más del 30 por ciento de los hogares hay al menos un fumador y el 56 por ciento de los fumadores convencionales fuman en casa, cifra que asciende al 60 por ciento cuando se trata de vapeadores o productos de tabaco calentado. Así, en el 19 por ciento de los hogares españoles hay exposición al tabaquismo pasivo.

Asimismo, a pesar de que el consumo de tabaco en lugares cerrados no está permitido en España, el 7,5 por ciento de los encuestados no fumadores que estudian afirman estar expuestos al humo en centros educativos, así como el 13,4 por ciento que asegura estar expuesto en lugares de ocio cerrado como cafeterías, restaurantes o centros comerciales.

En este aspecto, el expresidente de SEPAR y miembro del Área de Tabaquismo de SEPAR, el doctor Carlos A. Jiménez Ruiz, ha apuntado que, en locales de ocio cerrado, los estudios anteriores muestran que, en el año 2005, un 37,4 por ciento de los no fumadores estaban afectados, en 2011 esta cifra bajó al 12 por ciento, año en el que se prohibió fumar en espacios interiores en España, pero, en el año 2024, un 28 por ciento de los encuestados asegura estar expuesto al humo de tabaco en ocio interior, sin incluir las terrazas.

«Esta cifra es debido a estar sometido a humo de tabaco ambiental, no se contempla el 12 por ciento de la población sometida a aire contaminado por humo de cigarrillos electrónicos y tabaco calentado en locales de ocio cerrado», ha apuntado el doctor Ruiz.

En líneas generales, la prevalencia del tabaquismo pasivo en España se ha reducido en los últimos años ya que, en el año 2005 el 49,5 por ciento de la población afirmaba estar expuesta al humo, frente al 21 por ciento en 2011 y el 17 por ciento en 2024.

En este contexto, el secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla, ha reivindicado que «la autorregularán en el ámbito de la salud pública es el intento de que nada cambie, un libre albedrío pero con todos los determinantes comerciales de la salud», advirtiendo de que «es una competencia del Ministerio el diseño de las políticas de tabaquismo».

«Se nos está intentando confundir porque no quieren que se hable de fumar sino de vapear, se habla de riesgo modificado. El descenso de consumo de tabaco convencional es a expensas de que se está incrementando el consumo por otras vías. Los dispositivos electrónicos impactan en la salud, no son productos de bajo riesgo», ha declarado por su parte el director del PII Tabaquismo de SEPAR, Juan Antonio Biesco.

El vapeo puede producir cáncer de pulmón

Los nuevos productos de tabaco como los vapeadores cada vez se afianzan entre los adolescentes de 13 a 18 años, situación que preocupa a los especialistas ya que, aunque aún falta más evidencia científica, hay «datos suficientes» de que el vapeo «tiene el mismo impacto nocivo que el tabaco convencional» y, según ha apuntado el oncólogo médico y el secretario científico del Grupo Español de Cáncer de Pulmón (GECP), el doctor Bartomeu Masutti, el consumo de vapeadores podría producir cáncer de pulmón en 15 años, igual que ocurre con el tabaco convencional.

Por tanto, si los jóvenes empiezan a consumir cigarrillos electrónicos a los 15 años, podrían desarrollar un cáncer de pulmón a los 30-35 años. Aunque aún falta suficiente evidencia de este hecho, el doctor Masutti ha asegurado que «todo apunta a que sí». «El tiempo de observación es corto todavía, pero no hay ningún dato que diga que esto no va a suceder», ha señalado a los medios de comunicación durante la entrega de Premios TikTok GECP este martes.

 

«Más de la mitad de los escolares de secundaria, un 54,6 por ciento, admite haber probado ya los cigarrillos electrónicos1. De seguir este ritmo, se convertirá en un producto de gran consumo entre los menores. En solo un año se ha incrementado su presencia un 23 por ciento», ha indicado el jefe de Oncología del Hospital Doctor Balmis de Alicante, el doctor Bartomeu Masutti.

En este sentido, el doctor ha advertido de que, aunque «esta costumbre de consumo de tabaco por estas técnicas diferentes al consumo convencional es más reciente», existen «datos suficientes» para decir que «tiene el mismo impacto nocivo que el consumo de tabaco convencional».

«En relación a lo que es el cáncer de pulmón, que necesita un intervalo entre 15 y 20 años entre el consumo de tabaco y la aparición del cáncer de pulmón, todavía tenemos datos muy preliminares, pero tenemos datos más claros en otras enfermedades relacionadas con el tabaco que aparecen antes, con un periodo de exposición más temprano», ha declarado.

Así, ha explicado que el 85 por ciento de los casos de cáncer de pulmón podrían evitarse ya que existe una correlación clara entre el hábito tabáquico y el desarrollo de esta enfermedad. «Hay una simetría absoluta entre las curvas de consumo del tabaco en el momento convencional de cigarrillos y la aparición entre 10 y 20 años después de cáncer de pulmón. Y son unas curvas absolutamente idénticas. ¿Esto se va a producir con los cigarrillos electrónicos o los vapeadores? Todo apunta que sí», ha detallado el experto.

«Este cambio del consumo de tabaco, sobre todo en la población adolescente, puede tener, si no lo evitamos, consecuencias muy negativas en términos de salud a medio plazo», ha avisado el secretario científico del GECP.

Según un análisis presentado durante la conferencia de investigación de cáncer de Estados Unidos, las personas que habían consumido tabaco convencional y vapeadores, «tenían un riesgo de cáncer de pulmón entre tres y cuatro veces mayor que los que habían consumido solamente tabaco convencional», ha resaltado el doctor Masutti.

«Estos dispositivos son la puerta de entrada a los productos tradicionales de tabaco. La industria está gestando una nueva generación adicta con estos nuevos productos más atractivos. Además, existe una falsa sensación de seguridad e inocuidad totalmente alejada de la realidad», ha explicado el doctor Masutti.

En este contexto, el nuevo Plan Nacional de Prevención y Control del Tabaquismo 2024-2027, aprobado recientemente por el Ministerio de Sanidad, contempla la posibilidad de «equiparar la regulación de los cigarrillos electrónicos y los productos relacionados del tabaco (con y sin nicotina) a la regulación del tabaco tradicional», a pesar de la controversia que este punto ha ocasionado ya que algunos colectivos consideran que los vapeadores pueden ayudar a dejar de fumar.

En esta cuestión, el doctor Masutti ha afirmado que «debería ser totalmente equiparable» ya que es «un error» pensar que el consumo de vapeadores puede ayudar a deshabituar a los fumadores. «Esto cada vez tiene menos evidencia y cada vez es más preocupante. Utilizar los cigarrillos electrónicos como una forma de deshabituación del tabaco yo creo que es un error. Hay que igualar el riesgo y el impacto negativo para la salud del consumo convencional de tabaco con las nuevas formas de consumo, específicamente con los vapeadores», ha asegurado el experto.

Además, los vapeadores suponen un riesgo añadido para la salud ya que su fabricación no está tan homogeneizada como la del tabaco y, por tanto, no se conocen exactamente las sustancias y «puede existir un riesgo». «También puede existir un riesgo inherente ya que la forma de consumo del vapeador hace que la penetración a través de los bronquios sea más fácil y llegue más lejos dentro de la traquea que la aspiración simple mediante el cigarrillo convencional, es decir, el vapeador facilita probablemente una penetración en profundidad mayor», ha añadido el doctor.

Por su parte, la especialista en cáncer de pulmón en el Servicio de Oncología Médica del Hospital Puerta de Hierro de Madrid y miembro del GECP, la doctora Virginia Calvo, ha apuntado que «hay motivos claros de preocupación respecto de la oncogenicidad potencial de los cigarrillos electrónicos con una sólida base científica básica y molecular».

«Tenemos datos ya de que realmente no son inocuos, sino que sí que tienen riesgos, riesgos no solo de enfermedades respiratorias y cardiovasculares, sino probablemente a largo plazo de oncogenicidad y de riesgo de cáncer de pulmón, que todavía es pronto para poderlo decir, pero sí tenemos ya datos que nos pueden indicar que inocuos desde luego no son y que sí que pueden tener esos riesgos de oncogenicidad», ha asegurado la doctora Calvo, añadiendo que, aunque sean ‘sin nicotina’, muchos de ellos «sí tienen derivados de la nicotina, tienen aldeídos, tienen metales pesados, es decir, tienen carcinógenos, que son sustancias que pueden acabar dando lugar al desarrollo del cáncer».

Regulación a la compra y venta de vapeadores pasa a sanción presidencial

El Congreso de la República aprobó la conciliación al proyecto de ley que regula la compra y venta de vapeadores en Colombia.

El texto recién conciliado para ahora a manos del presidente de la República quien deberá firmarlo y sancionarlo para convertirlo en ley de la república.

 

El proyecto prohíbe el uso de vapeadores para menores de edad, y establece el etiquetado, la manera como se debe hacer publicidad, la promoción y la distribución de estos elementos.

Con la regulación se busca incluir a los cigarrillos electrónicos y los llamados vapeadores dentro de las limitaciones que establece la ley 1335 de 2009, conocida como la “Ley Antitabaco”, que incluye medidas para la prevención del consumo del tabaco y la exposición al humo de tabaco en el país, como la prohibición de fumar en lugares públicos cerrados y la limitación de la publicidad y promoción de estos productos, entre otras cosas.

Cigarrillos electrónicos sí representan un riesgo para la salud

Ante el aumento de consumo de cigarrillos electrónicos y vapeadores en la población juvenil, diferentes entidades han mostrado su preocupación por los efectos nocivos sobre la salud; creando y poniendo en marcha diferentes estrategias que buscan generar impacto en la prevención del consumo de estos dispositivos.

De acuerdo con Jair Esteban Arboleda, docente del programa de Terapia Respiratoria de Areandina seccional Pereira, los dispositivos electrónicos de administración de nicotina (SEAN) y los dispositivos similares sin nicotina (SSSN), permiten simular el ritual de fumar un cigarrillo mientras se inhala vapor con nicotina u otros aditivos de sabor. “El uso de estos dispositivos cada vez se promociona más en jóvenes bajo la creencia que es menos nocivo que el tabaco convencional”, explica el experto Arboleda.

 

Según la Encuesta Nacional de Consumo de Sustancias Psicoactivas 2019, arrojó que el 33,3% de la población entre 12 y 65 años, afirmó en haber consumido tabaco o cigarrillo alguna vez en su vida, mostrando una la prevalencia alta en la población de 18 a 24 años.

Para el académico Arboleda, la evidencia científica ha demostrado que estos productos son perjudiciales para la salud y no son seguros, y tampoco funcionan como intervención para cesar el hábito tabáquico. “Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos, realizaron una investigación de emergencia sobre el cigarrillo electrónico o lesión pulmonar asociada a vapeo el 17 de septiembre de 2019, debido a un reporte de 2,668 casos relacionados en 50 estados con 60 muertes confirmadas. Según la información obtenida, el 82% de los pacientes utilizó algún producto que contenía THC y el 57%, consumió productos que contenían nicotina”.

Así mismo, la Subdirección de Enfermedades no Transmisibles del Ministerio de Salud y Protección Social advierten a las personas que, al fumar, tienen mayor riesgo de infección por COVID-19 debido a que el humo del tabaco deteriora los mecanismos de defensa del aparato respiratorio y produce inflamación.

“En los jóvenes, el riesgo de adquirir enfermedades pulmonares y sistémicas es mayor debido a que lo hacen con mas frecuencia que fumar cigarrillo convencional, a esto se le agrega que incluso en lugares públicos y cerrados realizan esta práctica, muchos de ellos no tienen conocimiento acerca de los efectos deletéreos que esto representa para la salud propia y colectiva”, sostiene el docente de Areandina.

A pesar del riesgo para la salud que presentan estos dispositivos, actualmente Colombia no cuenta con una normativa específica que regule los SEAN y SSSN. Sin embargo, el Congreso busca actualizar la Ley 1335 de 2009 para extender las medidas de control aplicables a los productos de tabaco, a los cigarrillos electrónicos, buscando prevenir daños a la salud de los menores de edad y la población no fumadora e implementar políticas publicas para la prevención del consumo de tabaco y abandonar la dependencia del tabaco del fumador y sus derivados.

Investigación a empresas de vapeadores

Foto: Pixabay

La Superintendencia de Industria y Comercio, formuló pliego de cargos en contra de los comercializadores British American Tobacco Colombia S.A.S., Inversiones Glu Cloud S.A.S., Grupo Diy S.A.S., Lifetech S.A.S., para determinar si vulneraron las disposiciones contenidas en la Ley 1480 de 2011, en el ofrecimiento de productos que contienen nicotina y otras sustancias que afectan la salud y que son conocidos como “líquidos para vapeadores” y/o “vapeadores”.

 

La Superintendencia de Industria y Comercio recibió varias denuncias que indicaban que dichos empresarios, al parecer vulneraban los derechos de los niños, niñas y adolescentes en el comercio electrónico, al suministrar información engañosa respecto de los líquidos que se empleaban en los dispositivos denominados “vapeadores” y que contenían nicotina, así como por no observar las obligaciones legales respecto de las condiciones especiales que debían ser informadas a los consumidores para este tipo de productos nocivos.

La Dirección de Investigaciones de Protección al Consumidor pudo concluir de manera preliminar, que no se suministró información clara, oportuna y precisa respecto de la intensidad de nicotina ofrecida a los usuarios. Tampoco se suministró información mínima en idioma diferente al castellano, ni se indicó en los envases y empaques de los productos, de manera clara y en caracteres legibles, respecto de la nocividad de los productos ofrecidos, ni las condiciones o indicaciones necesarias para la correcta utilización de las sustancias que contienen nicotina y que se emplean con diversos dispositivos denominados “vapeadores”.

Además, se emitió publicidad de productos que son nocivos para la salud, sin advertirle claramente al público acerca de la nocividad y de la necesidad de consultar las condiciones, indicaciones para su uso correcto, así como las contraindicaciones del caso y por último se emplearon herramientas de comercio electrónico en las que no se tomaron las medidas posibles para verificar la edad de los consumidores.

En los contratos de adhesión se incluyeron cláusulas que irían en detrimento de los derechos que les asisten a los consumidores.

De confirmase la vulneración por parte de British American Tobacco Colombia S.A.S., Inversiones Glu Cloud S.A.S., Grupo Diy S.A.S., Lifetech S.A.S., a lo señalado en las normas imputadas, se podrán imponer multas hasta por 2.000 SMMLV.