Germán Vargas Lleras protagonizó un incomodo episodio en Ibagué al hacer un desplante al alcalde y su esposa. La Primera Dama de la capital del Tolima terminó casi en lágrimas y al alto gobierno le tocó moverse para arreglar el impase.
Cuando el candidato a la vicepresidencia andaba de gira en Tolima, su equipo de campaña no encontraba líderes de los partidos de la Unidad Nacional que le organizaran la logística de la visita que, al igual que muchas de sus correrías por el país, tiene que estar armada con ‘todas las de la ley’.
Todo indicaba que la organización no iba bien, hasta que una mujer ‘salvó la patria’ y tomó la iniciativa para montar el evento. Fue la esposa del alcalde de Ibagué Luz Amparo Noreña.
Esta es la historia:
Días antes de celebrarse Semana Santa, el candidato hizo una visita a Ibagué para impulsar su candidatura y la del presidente Juan Manuel Santos. Esta gira pretendía abanderar a los ciudadanos bajo el lema de la reelección, con el objetivo de que el próximo 25 de mayo depositen sus votos en las urnas para la Presidencia.
Germán Vargas Lleras es conocido por ser de carácter fuerte. Muchos aseguran que su personalidad evoca un profundo respeto combinado con algo miedo, pues el exministro habla directo y sin tapujos.
En esa ocasión, pensarían los cónyuges de la reelección, que la ciudad retumbaría al son del santismo con una multitudinaria asistencia de habitantes. Todos estaban seguros de ello y a la expectativa.
Luz Amparo Noreña, esposa del alcalde de la ciudad, Luis H Rodríguez, fue la encargada de hacer los arreglos para que Vargas Lleras tuviera una reunion nutrida, proporcionó sonido y se encargó de que todo estuviera dispuesto para un evento como Dios manda.
Pero a los pocos minutos de iniciado el acto el candidato Vargas Lleras comenzó a subir el tono en contra del alcalde y sin mesura ninguna dijo que Luis H Rodríguez no tenia un buen desempeño porque su gestión no está al día con lo programado desde hace dos años y llenò de detalles los incumplimientos que según él tenia la administración.
Tal acusación hizo que la mujer se retirara del lugar, enfadada y casi rompiendo en llanto. Es posible que Vargas Lleras no supiera en ese momento que gracias a ella tuvo micrófono, y un salon lleno de gente, que improvisaron pancartas y seguidores de donde no era facil encontrarlos.
El incidente no se llevó a mayores, la visita continuó naturalmente. Pero la imprudencia de Vargas Lleras llegó a oidos de la Casa de Nariño y al evaluar la situacion, tuvieron que hacer una llamada de alto nivel para ofrecer una disculpa.
El diario regional El Nuevo Día, informa en su portal web que en el acto político de Vargas Lleras “ni el apoyo de Luz Amparo podo evitar que el Alcalde de Ibagué se salvara, una vez más, de las críticas”.
Efectivamente, según el diario local, esta no es la primera vez que el exministro de Vivienda le hace un jalón de orejas.
“Cuando fui Ministro vine a reiterar el compromiso asumido con el presidente Santos hace dos años de cofinanciar integralmente la solución del agua potable de Ibagué, pero no puede ocurrir que a estas alturas del partido no tengamos diseños definitivos de ese plan maestro (…) ojalá, Primera Dama, la firma que ha presentado retraso se ponga al día”, le dijo Lleras a Amparo durante la reunión.
Confidencial Colombia sostuvo conversaciones con el alcalde Rodríguez, quien prefirió no dar mayor profundidad al respecto pero admitió que es un tema “muy superado”.
De hecho indicó que el aspirante vicepresidencial estaba mal informado y que en julio se le cumplirá al Gobierno Nacional con los estudios sobre el acueducto de la ciudad.
Luis H Rodríguez es un ibaguereño de 50 años, militante del Partido Liberal. Está casado hace 18 años con Luz Amparo Noreña y tienen dos hijas y un hijo. Daniela, 17 años; Tatiana, 15 y Luis H. de 11. Es abogado de la Universidad Externado de Colombia y tiene 8 años de campaña como Alcalde.
Este sabado la campaña reeleccionista tienía cita en Ibague. El candidato presidente Juan Manuel Santos fue al acto político en compañía del Alcalde y su acongojada esposa.
