Durante la segunda administración de Enrique Peñalosa, Bogotá presentó la tasa más baja de homicidios registrada desde 1970. De 17,4 casos por cada 100.000 habitantes en 2015, el número se redujo en 12,8 al finalizar el año 2018.
Vale la pena recordar que, durante el año 2018, según las cifras de la Secretaría de Seguridad, Convivencia y Justicia, en Bogotá fueron hurtados 43.719 elementos personales menos que en 2017 y 62.708 menos que en 2016. En este tiempo la ciudadanía tuvo una mejor percepción de seguridad en el barrio y en su localidad. En el 2017 el 42 por ciento de las personas se sentían seguras en su vecindario, en el 2018 aumentó al 57 por ciento. Lo anterior, según la Encuesta Bogotá Como Vamos.
En lo que tiene que ver con escenarios deportivos, se entregaron 150 canchas de fútbol con césped sintético en la ciudad, superando la meta del cuatrienio establecida, que era de 75 canchas. Junto a esto se realizó la intervención a 500 parques urbanos en las diferentes localidades de Bogotá y se continuó con la ampliación de la red de ciclorutas completando un total de 117.76 Km. Según la encuesta Bienal de Culturas, el porcentaje de personas satisfechas pasó de 43,6 %, en el 2015, a 60,8 %, en el 2017.
Podría continuar con el recuento de los logros obtenidos para una Bogotá que buscó ser mejor para todos y encontraría miles de razones para seguir dando mi apoyo irrestricto a este modelo de ciudad, hecho que se reafirma luego de ver el más reciente documento temático “¿Mejorar los Parques Reduce el Delito? Evidencia en Bogotá”, publicado por la Universidad de Los Andes, que tras analizar las apuestas de la administración de Enrique Peñalosa, concluye que al darle una nueva y fresca mirada al uso del espacio público de Bogotá para el disfrute de todos, redujo los delitos que se cometían en los parques de la ciudad
Al hacer el análisis se puede detallar que la renovación de iluminación redujo los delitos en las zonas intervenidas de la siguiente manera: en un 22% las lesiones personales, el 55% los hurtos modalidad a personas, 54% los hurtos modalidad a comercio y 29% los hurtos modalidad a residencias por kilómetro cuadrado. Por otro lado, la construcción de canchas sintéticas redujo los hurtos a personas en un 88% y los hurtos a comercio en un 92% por kilómetro cuadrado.
El documento dice además que la construcción de infraestructura recreativa, brinda a las comunidades nuevos espacios de entretenimiento y que puede ser parte de una estrategia integral que también genera impactos externos positivos en temas como la criminalidad, especialmente en el hurto a personas, por lo que debe considerarse como una estrategia valiosa al momento de planificar ciudades
Por último, es válido decir que los avances que se dieron durante la segunda administración de Enrique Peñalosa en materia de seguridad y apropiación del espacio público y de parques, evidencian la necesidad de ser tenidos en cuenta en la construcción de un POT para la ciudad, que en sus diversas escalas permita una apropiación y un verdadero proceso de revitalización en sectores de la ciudad, donde cada espacio diseñado fue una oportunidad de tener una reducción significativa a problemáticas que los bogotanos venían afrontando de tiempo atrás y que hoy consecuencia de las decisiones de la directora del IDRD se están viendo día a día en nuestra ciudad. No retrocedamos por el bienestar de Bogotá.
