Seguridad: Sigue sin cumplir expectativas en tiempos de pandemia

Ya corrido un mes de este 2021, Bogotá no registra todavía reducciones considerables ni brinda en los ciudadanos una mejor percepción de su seguridad. A pesar de que la Secretaría de Seguridad evidencia disminuciones en algunos delitos, la realidad no se compadece con los 10 meses de cuarentenas y las restricciones constantes, que deberían mostrar mejores resultados.

Las cifras oficiales de la Secretaría de Seguridad, de reducción para delitos como el homicidio del 6% o de hurtos a bicicletas del 3%, en el mes de enero con respecto al mismo periodo del año anterior que son celebradas como un gran logro porque no hay aumento, no deberían ser tal, pues no hay cómo comparar las cifras de un enero en 2020 sin restricciones en las calles, a un enero de 2021 con cuarentenas totales y sectorizadas que debieron servir para que los índices de todos los delitos hubieran descendido considerablemente, y el hecho que desde julio pasado se pusiera en marcha el ambicioso plan de seguridad anunciado por la alcaldesa Claudia López y que prometía atacar de frente a la delincuencia en Bogotá.

La administración insiste en mostrar las cifras mes a mes ignorando la realidad, pues lo mismo aplica para el delito de hurto al comercio, y es que resulta irónico que se presente como un gran logro la reducción de 67%, cuando el pasado mes se vio marcado por las continuas cuarentenas que obligaron a cerrar negocios y locales. Celebremos cuando esa reducción se mantenga con el 100% del comercio abierto y recuperado el 31% de establecimientos que cerraron el año anterior. Pasa igual con el hurto a celulares, y su reducción del 34% ya que no es una mejora si se tiene en cuenta que la capacidad de movilizarse de los ciudadanos por la calle y en el transporte público, que son los principales escenarios de este delito, está disminuida por el aislamiento, la dinámica de teletrabajo, trabajo en casa y virtualidad.

Percepción de inseguridad en 2020 empeoró

De acuerdo con la reciente encuesta de percepción y victimización de Bogotá 2020, realizada por la Cámara de Comercio, la percepción de inseguridad de los ciudadanos pasó de un 60 % en 2019 a 76 % en 2020, el nivel más alto en los últimos 5 años; tan solo un 41% de la población preguntada se siente segura en su barrio y en plena pandemia, indican que la calle es el espacio más inseguro, seguido del transporte público, los puentes peatonales, los potreros.

Como lo señala el informe, también aumentó a 17% el número de personas que revelan haber sido víctima directa de algún delito, con respecto al 15% de 2019. 132 de cada 1.000 ciudadanos aseguraron haber sido robados, siendo el celular el objeto más hurtado con un 48%, seguido de dinero en un 45%, y la billetera, 38%. Las modalidades más comunes para cometer este delito son el atraco con 41%, y el raponazo con 27%. Y las mujeres siguen siendo las más afectadas. Ocho de cada 10 mujeres en Bogotá, respondieron en la encuesta de la CCB que la inseguridad ha aumentado, pasando esa percepción general del 61% en 2019 al 81% en 2020. El 62% de las mujeres consideran que su barrio es inseguro, y para el 2020 el feminicidio fue el tercer delito que más preocupó a los ciudadanos (8,4%), seguido por la violencia contra las mujeres (4,8%).

Un 48%, no se siente confiado en la institucionalidad: no ven resultados en sus denuncias, el Número Único de Emergencias 123 mantiene solo un 20% de confiabilidad y aumentó la queja por mala atención en la llamada al pasar del 36% al 41. Desmejoró la relación con la Administración Distrital: un 59% dijo no haber tenido relación con la Administración y quienes si la tuvieron la calificaron como regular 19%, buena, solo 15% y mala 6%.

Prohibir parrillero en moto: una medida urgente ante inseguridad en Bogotá

Como lo muestra la percepción de la ciudadanía, el hurto es el delito que más preocupa y en gran parte de los casos los delincuentes utilizan como principal medio de transporte la motocicleta. En Bogotá, de acuerdo a la Secretaría de Movilidad antes de la pandemia se realizaban 770 mil viajes en moto, de ellos el 10% con parrillero; y, según el último reporte del Observatorio de Seguridad de la Policía, en 2019 se denunciaron en la ciudad 9.416 casos de hurtos en los cuales el delincuente era un parrillero, principalmente en hechos ocurridos en Suba, Kennedy, Engativá, Bosa, Ciudad Bolívar y Fontibón, Chapinero, Teusaquillo, Los Mártires, Santa Fe, La Candelaria y Usaquén, esperamos la realidad que evidencie el reporte de 2020.

Ya en 2018 se había adoptado esta medida de manera temporal por la administración de Enrique Peñalosa, en la zona comprendida entre la calle 100 y la avenida Primero de Mayo, y los Cerros Orientales y la carrera 68; los hurtos a personas bajaron de 1.373 a 957 y los hurtos a celulares de 957 a 636, es decir que si es efectiva.

Esta petición ya la hicimos extensiva en enero de 2020, al secretario de movilidad Nicolás Estupiñán, y en octubre, nuevamente y extensiva al secretario de seguridad Hugo Acero, ante la modalidad de hurto que cobra vigencia en la cual, los delincuentes que hurtan celulares, apartamentos, vehículos, entre otros, acuden en su mayoría a este medio de transporte para huir sin contratiempo y de manera rápida, en un modus operandi donde el que comente la acción es el parrillero, mientras que el conductor lo espera para huir. Hay que evaluar la posibilidad de volver a aplicar la restricción en una acción por la vida y la seguridad de los bogotanos.

@Luciabastidasu