Los bomberos griegos luchan contra las llamas de varios incendios que desde el sábado han devastado ya más de 14.000 hectáreas de bosques. El verano hace estragos.

Según la Oficina de Prensa de los Bomberos, unas 300 personas, entre bomberos, soldados y voluntarios, participan con 56 camiones cisternas, 4 aviones y 4 helicópteros en las actividades para controlar el fuego en la isla griega de Quíos, en el mar Egeo.

Desde hace siglos, la almáciga, una resina de una variedad de lentisco, que crece en Quíos, es famosa y muy solicitada por su alta calidad.

Se utiliza en la industria de productos farmacéuticos y de perfumes, así como en confitería, por lo que ha supuesto siempre una importante fuente de ingresos, mermada ahora, en medio de la grave crisis de la economía helena.

«El ingreso anual de la isla por las exportaciones de almáciga se sitúa en 12 millones de euros. El incendio ha destrozado entre el 30 % y 50 % de las plantaciones», ha declarado el Presidente de la Asociación de Productores de Almáciga Efzymis Moniaros.

«Para que los árboles quemados vuelvan a poder dar la producción de hoy, son necesarios diez años», ha añadido.

Según datos del Centro Europeo de Información sobre los Incendios Forestales (E.F.F.I.S.), hasta el 22 de agosto el incendio había devastado 14.090 hectáreas de bosques y tierras cultivadas.

Vientos muy fuertes y temperaturas entre 33 y 35 grados trabajan a favor del fuego.

Según la Agencia Nacional de Meteorología, los vientos amainarán en las próximas horas, pero con ello la temperatura puede aumentar.
Similar es la situación climática en Zante, una isla del mar Ionio, donde más de un centenar de bomberos intentan, con 34 camiones cisternas y 4 aviones, controlar un incendio de bosques que arde desde hace cinco días.

En las últimas 24 horas se han desatado 47 incendios forestales en toda Grecia.

Cada año el fuego devasta en Grecia entre 50.000 y 100.000 hectáreas de bosques, según los datos de los bomberos, disponibles desde 1990. En los últimos diez días se ha registrado un total de 589 focos de fuegos forestales.

El Ministro de Protección de Ciudadano, Nikos Dendias, ha ordenado que los servicios secretos participen en las investigaciones en curso para esclarecer las causas de los incendios.