América Latina ha sido incluida en la región de riesgo más alta del mundo para el crimen violento, debido a la prevalencia generalizada de las organizaciones de tráfico de drogas, el secuestro, la extorsión y el robo en 11 países, incluyendo en sus cuatro mayores economías, Brasil, México, Argentina y Colombia.
Los hallazgos provienen de una nueva investigación publicada por la empresa de análisis de riesgo Verisk Maplecroft, que evalúa los riesgos para las poblaciones, los negocios y las economías de los crímenes violentos en 198 países.
De acuerdo con la consultora, algunos países de América del Sur se enfrentan muchos de los mismos desafíos de la América Central y México. Como puerta de entrada a las rutas de tráfico de drogas en los EE.UU., Venezuela (7º) y Colombia (12) son identificados como lugares de riesgo ‘extremo’ en el índice de criminalidad.
Sin embargo, Colombia presenta un riesgo menor que su vecino, debido a los costos directos más bajos experimentados por las empresas y su compromiso más fuerte para participar en los esfuerzos de interdicción bilaterales. La brecha también es probable que aumentará en los próximos años las crisis políticas y económicas de la Venezuela intensifican. A principios de este año, Caracas fue nombrada la ciudad más violenta del mundo, y sin juego final claro a la crisis a la vista, tanto en Venezuela y su capital estará dominada por la inseguridad.