En días pasados, el Consejo de Estado había emitido dos sentencias que le ponían límites a la prima de salud y de localización y vivienda, que representaban casi 8 millones de pesos extras para los congresistas, pero por el decreto 2170 de 2013, volverían a recibir casi la misma suma bajo la figura de prima especial de servicios.

El presidente Santos firmó el 4 de octubre la misiva que vuelve a elevar la mensualidad de los miembros del Congreso de la República. Según dicta el documento, los congresistas tendrán derecho a 7’898.445 pesos, con un reajuste equivalente al porcentaje a la asignación básica, que además “sustituye para todos los efectos las primas de salud, de localización y de vivienda”.

La medida que realizó recortes del presupuesto a los miembros en la Secretaría del Senado el 30 de septiembre, será enmendada por el decreto firmado por el presidente, que también habilita el pago de los mismos 7 millones 800 mil pesos que no fueron entregados el mes pasado, ya que la medida fue retroactiva.

Aún así varios congresistas han dicho que no aceptarán el dinero. El Senador Camilo Romero dijo que renunciaba a la prima y si no es posible devolverla, «propondría fondo común para iniciativas de buenas prácticas políticas». Por su parte la Representante Angela Maria Robledo dijo que la donación podía ser una opción, mientras que el Representante Iván Cepeda aseguro que si no es aceptada la devolución de prima la donará «con supervisión de entidad.

A través de las redes sociales, cientos de usuarios han expresado su desacuerdo con la medida a través de #ConLaPrimaDe8Millones.