El IPSE sacará de la oscuridad a la Colombia lejana

Pese a que hay sitios tan aislados del desarrollo y de la interconexión eléctrica que no tendrán soluciones por esta vía, habrá una generación energética alternativa y complementaria que les llevará luz a los colombianos más incomunicados y más pobres.

Pese a que hay sitios tan aislados del desarrollo y de la interconexión eléctrica que no tendrán soluciones por esta vía, habrá una generación energética alternativa y complementaria que les llevará luz a los colombianos más incomunicados y más pobres. Por fin miles de etnias y negritudes podrán disfrutar de la electricidad para mejorar con ello su calidad de vida.

Este servicio de energía social para la prosperidad hace parte de la institucionalidad y de la presencia estatal en regiones apartadas. De igual manera y dentro del marco de responsabilidad social adelanta el programa “Luces Para Aprender” el cual sale adelante con la ayuda de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) que recauda ayudas monetarias para escuelas.

Así lo dijo en Confidencial Colombia el Director del Instituto de Planificación y Promoción de Soluciones Energéticas para las Zonas No Interconectadas (IPSE), Carlos Eduardo Neira Estrada quien aseguró que tal y como van las cosas, en 2014 el país y sus zonas periféricas estarán iluminadas. Esta meta será posible también por la interconexión con Venezuela.

En los próximos meses entrarán en ejecución tres proyectos hoy sobre la mesa para iniciar negociaciones con Venezuela en donde dos traerán energía a Colombia y en el restante la solución irá de Colombia a Venezuela.

Neira Estrada dijo que los proyectos de interconexión en la frontera se han desarrollado con recursos colombianos, aclarando que de a poco el vecino ha pagado sus activos y el servicio prestado.

Las otras alternativas, indicó, serán el sol, el viento, la biomasa y los combustibles líquidos. El funcionario explicó que algunas zonas tendrán electricidad hídrica o soluciones de electrificación rural por encontrarse en zonas cercanas a los cascos urbanos, pero sin la opción de la interconexión o de la energía convencional.

Según Neira Estrada, el 52 por ciento del país no cuenta con el servicio de energía o no está interconectado. Actualmente el IPSE hace presencia en 17 departamentos y 88 municipios, los cuales van desde los otrora Territorios Nacionales hasta la Guajira y el andén biogeográfico del Chocó que incluye este departamento así como a Cauca, Nariño y Valle.

Dentro de las metas de la entidad para 2014 está la prestación del servicio por 24 horas en 39 cabeceras municipales. “Hoy tenemos nueve ya solucionadas y al término de 2012 incluiremos ocho más”.

Para el IPSE los trabajos van a buen ritmo y es por ello que se calcula que entre4 2013 y 2014 quedarán los proyectos terminados, funcionando y permitiendo que las comunidades que no gozan del servicio de electricidad lo hagan para optimizar su calidad de vida.

El gerente del Instituto precisó que los nuevos proyectos de generación energética vienen del Sistema General de Regalías y del Fondo de Apoyo a las zonas no interconectadas (FASNI), concebido para las zonas no interconectadas.

Aun cuando el presupuesto del IPSE es de 19.000 millones de pesos de los cuales en lo corrido de 2012 se ha ejecutado más del 57 por ciento, hay obras como las del proyecto de Vichada que cuestan 80.000 millones de pesos y solo puede financiarse con regalías y el fondo para interconexión. Allí el 50 por ciento, es decir 40.000 millones de pesos los pone el Sistema General de Regalías y el otro 50 por ciento será el aporte del FASNI.

Carlos Eduardo Neira indicó que la interconexión con Venezuela y el desarrollo de algunos proyectos que demandan el uso de combustibles traídos del vecino país se hicieron por la conveniencia en costos y por el aspecto cambiario, situación que hace rendir más el dinero a la hora de hacer compras de energía o diesel.

Aseveró que con las compras de combustible a Venezuela se logra un ahorro considerable que permite mayor eficiencia en el uso de los recursos y por consiguiente una más óptima expansión como pasa con la línea de 35 kilovatios de Inírida en donde la energía que despacha Colombia se paga con galones de ACPM.

“Un galón de ACPM puesto en Inírida cuesta en promedio 8.300 pesos mientras que traído de Venezuela vale entre 3.500 y 4.000 pesos, lo que muestra una diferencia enorme que se aprovecha para estirar los recursos y lograr mejores resultados en generación eléctrica”, dijo Neira.

En opinión del funcionario hay situaciones paradójicas como es el caso de la Guajira en donde el potencial de generación eólica es muy grande, pero en donde la demanda del servicio es mínima lo que resultaría una mala inversión.

“Allí y en otras regiones habría mejores opciones con energía fotovoltaica porque inclusive hay departamentos con muchos ríos y afluentes en donde generar un kilovatio es muy oneroso por la falta de caídas de agua. Hay caseríos en donde la demanda es de entre 50 y 200 usuarios y la inversión en grandes planes no se justifica”, aclaró. Los precios de electricidad en Venezuela y el tipo de cambio con el bolívar permiten igualmente ahorros y eficiencias que redundan en más servicio. “Un kilovatio importado del país hermano vale mucho menos pues ellos generan a más bajo precio que ISA. Si generáramos con diesel en Puerto Carreño, ese kilovatio estaría en 750 u 800 pesos, pero la energía venezolana tiene precios mucho más bajos”.

Ese mercado inclusive redujo el subsidio con cargo al país por el bajo precio de la energía proveniente de Venezuela.

En la actualidad San Andrés y Providencia así como Amazonas tienen concesiones de generación de energía a veinte años con empresas nacionales y los resultados han sido los mejores.

Luces para aprender

Este programa para escuelas rurales por fuera de la interconexión arrancará en el departamento del Chocó en donde más de 400 escuelas adolecen del servicio de energía.

Para el total nacional, más de 4.500 escuelas no cuentan con el servicio, según datos suministrados por el ministerio de Educación Nacional.

En este proyecto trabajan los ministerios de Educación, de las TIC, de Minas y Energía a través del IPSE y la OEI. Este proyecto no solo mejora las instalaciones de las escuelas sino que lleva tecnología, computadores y conexión a Internet.

“Los primeros 5.000 millones de pesos tendrán como destino el Chocó, pero muy seguramente vendrán más recursos para las escuelas alejadas del país”, comentó el directivo.

También hay convenios firmados con universidades como la de Nariño, la Tecnológica de Pereira, la Nacional y la Universidad Industrial de Santander (UIS) que se encargarán de identificar y estructurar proyectos de energía para llegar a las comunidades.

Anteriormente, declaró, no existían las soluciones ni los planteamientos para conjurar las falencias energéticas, hoy esos proyectos ya existen y tan solo restan financiarlos. Reveló que un plan para interconectar siete cabeceras municipales del Chocó cuesta 210.000 millones de pesos que demanda una inversión grande del país, pero con resultados sociales de alto impacto.

El Instituto de Planificación y Promoción de Soluciones Energéticas para las Zonas no Interconectadas remplazó al Instituto Colombiano de Energía Eléctrica (ICEL) en 1999 a través del decreto 11-40.