Obama en su adiós: "sí se puede, sí pudimos hacer un país mejor"

“Os pido que creáis. No en mi capacidad para cambiar, sino en la vuestra. Que conservéis la idea de nuestros padres fundadores, la idea que susurraron los esclavos y abolicionistas, el espíritu de los inmigrantes y los que lucharon por la justicia, la creencia en el corazón de cada estadounidense cuya historia no se ha escrito aún: Sí, se puede”. Con estas palabras, el presidente Barack Obama puso fin a un discurso de algo más de 58 minutos en los que hizo balance a su gestión de ocho años al frente de los Estados Unidos.

Puntual, a las 9.00 p.m., y bajo los acordes de ya su tradicional himno musical en los mítines, el “In the city of Blinding Lights” de la banda irlandesa U2, el aún presidente de los Estados Unidos salió al ruedo del Centro de Convenciones McComick, en Chicago, como una estrella de rock, aclamado por los miles de asistentes, Obama tuvo que esperar unos minutos por los aplausos y vítores que no le dejaban comenzar su alocución. “Chicago mi casa”, agradeció estar allí, donde “todo empezó” hace ocho años.

VEA EL DISCURSO DE DESPEDIDA DE ESTE MARTES EN CHICAGO

El discurso se alejó de las profundidades políticas, de las diferencias partidistas que divide en dos al país en la actualidad y se centró en marcar una línea de unidad en torno al concepto de nación americana. No hizo ninguna mención directa al presidente electo, Donald Trump, aunque sí lo citó veladamente para defender su Sistema de Seguridad Social, el Obama Care. “Nuestro programa médico, que ha integrado a más de 20 millones de estadounidenses en el sistema público de salud, haciendo un mejor sistema y a un menor costo es para sentirnos muy orgullosos de la labor realizada, Si viene otro presidente y lo consigue mejorar con una menor inversión, ahí estaré yo para apoyar esas políticas”, afirmaba Obama, en clara referencia a la idea de Donald Trump de desmantelar el sistema creado cuando sea presidente.

Llegó el momento de hacer balance a sus logros. El presidente hizo un repaso de los hitos alcanzados en estos ochos años de presidencia. “El fin de las tensiones nucleares con Irán, las relaciones con Cuba, la Igualdad de matrimonio Gay, la eliminación de Osama Bin Laden… si a cada uno de ustedes le hubiera prometido esto hace ochos años, hubieran pensado que era demasiado ambicioso… y lo logramos”, declaro orgulloso de sus gestión.

No podía falta la referencia a la lucha por la igualdad y los derechos sociales y raciales. “Gracias, mis conversaciones con los estadounidenses me han inspirado y cada día aprendí de ustedes, me hicieron mejor presiente y persona. Para los blancos”, dijo el presidente “esto supone admitir que los efectos de la esclavitud y la época de Jim Crow no desaparecieron en los años 60, que cuando los afroamericanos se manifiestan, solo piden el mismo tratamiento igualitario que prometieron los padres fundadores”.

Obama también empleó unos minutos en repasar los logros económicos, dijo que deja un mejor país tras su mandato: el crecimiento económico, el valor de la vivienda, los salarios y las pensiones, así como el descenso de la pobreza. “Los ricos están pagando impuestos más justos y el paro ha descendido a mínimos de una década, Nuestra democracia no funcionará si todo el mundo no tiene las mismas oportunidades económicas”, declaró.

Respecto al cambio climático, dijo que “negar el problema es traicionar a la próximas generaciones y negar el espíritu que hizo grande a este país.

El discurso tuvo varios momentos de exaltación a la patria Amenazó con destruir al Estado Islámico (DAESH) al “igual que a todos los enemigos de Norteamérica, al tiempo que elevaba el tono y la pasión de un auditorio entregado al afirmar sentirse orgulloso y lleno de gratitud por haber sido el Comandante en Jefe de los soldados. “No podemos retirarnos del escenario internacional para luchar por la democracia, los derechos raciales”.

En el tramo final, Obama incluso tuvo tiempo de emocionarse al acordarse de su esposa Michelle, a la que calificó de esposa, madre de mis hijas y mejor amiga. “Asumiste un rol que no pediste y lo hiciste con estilo, gracia y buen humor. Eres un modelo a seguir. Has hecho sentirse orgulloso a este país.

Acabó el discurso y como manda la tradición el protocolo se quedó en los papeles. Los Obama, en el escnario, junto a su hija Malia (la otra hija, Sasha no asistió porque tenía un importante examen) y el matrimonio Biden, se despidieron nuevamente como estrellas con otro himno de fondo: “Land of hope and dreams”, de Bruce Springsteen, otro clásico que sonó en tantos de sus discursos de las campañas electorales.