Ante el fracaso, que se volvió una constante, de la concertación salarial, miembros de las bancadas legislativas exigirán que el tema del salario mínimo pase por el Congreso en donde se defina de manera clara y justa el ingreso básico de los trabajadores colombianos que se acostumbraron a recibir migajas o sueldos que se pierden con la inflación o los ajustes en los servicios públicos.

El Senador, Jorge Londoño Ulloa, del Partido Verde aseguró que no tiene presentación que los trabajadores sigan en el limbo y bajo el interés de algunos que lo que quieren es ver más empobrecido el país y mucho más diezmada la calidad de vida. El parlamentario cuestionó la falta de coherencia a la hora de fijar el salario mínimo y aseguró que la concertación tiene de todo, menos de tripartita toda vez que el Gobierno toma una posición cómoda en donde no participa ni esgrime una propuesta que ayude a los agentes en disputa a encontrar caminos.

“No tiene sentido hablar de una concertación salarial en donde los empresarios quieren pagar lo menos posible, en donde las centrales obreras están prácticamente solas y con un Gobierno que asusta con su mutismo. En ese orden de ideas es urgente que el Congreso tome cartas en al asunto porque inclusive se están desconociendo derechos laborales al amparo de la Constitución Nacional”, comentó el señor Londoño.

Agregó que el salario es ni más ni menos que el reconocimiento a la dignidad humana y en donde la Carta Política dice que los trabajadores deben tener unos ingresos que les permita el mínimo vital y para ello es necesario contar con emolumentos o salarios que no hacen referencia únicamente a las necesidades básicas insatisfechas sino a otro tipo de necesidades como la recreación y un ambiente sano.

“El Gobierno tendrá que entender que este boom económico que está viviendo el país, también debe ser y debe traducirse en buenos salarios para los trabajadores. Eso es importante y por eso en algún momento se llevó al Congreso una propuesta para que el legislativo pudiera decidir sobre el salario, pero desafortunadamente no pasó, lo cierto es que los congresistas debemos tener alguna injerencia en esa discusión porque finalmente somos los que aprobamos Plan de Desarrollo, reformas tributarias y otras medidas económicas, luego debemos estar presentes con el tema del salario mínimo”, afirmó el senador.

Para la próxima legislatura el Partido Verde pondrá de nuevo el tema sobre la mesa y para ello presentará un proyecto de ley que permita que los trabajadores, que finalmente son los que van a las urnas a escoger sus senadores y representantes a la Cámara, cuenten con el aval de los elegidos para propender por dignidad. Aclaró que la iniciativa no tiene cabida en la Casa de Nariño, no solo en este Gobierno sino en otros mandatos.

“Sin duda podemos decirles a los trabajadores de Colombia que el Partido Verde estará protegiendo sus intereses porque uno de nuestros postulados es la defensa de los derechos de la clase obrera, es por eso que en este partido milita Luis Eduardo Garzón quien fuera líder sindical y del corazón de los asalariados”, aseveró Londoño.

En opinión del congresista no es coherente que se le aumente 20.000 pesos en promedio al salario mínimo de los trabajadores porque con esa suma no vive nadie, con ese irrisorio aumento no se pagan ni los costosos recibos de energía y agua. Indicó que las economías, única y exclusivamente salen adelante con la mayor demanda de bienes y servicios, asunto que solo es posible con mejores ingresos en la población.

Para el Senador boyacense, injusticias como pagar sueldos de miseria hacen que las personas crean menos en el estamento, en sus gobernantes y en la clase política. Esa situación hace urgente revisar el modelo económico por cuanto en Colombia impera el Consenso de Washington que ni siquiera aplica en Estados Unidos.