Finalmente el Gobierno y la guerrilla del ELN anunciaron que el 7 de febrero iniciarán la fase pública de diálogos en Quito (Ecuador) con la que buscarán poner fin al conflicto y empezar a construir una paz completa. Confidencial Colombia consultó a varios investigadores para analizar las similitudes o diferencias que tendrá el proceso de paz del ELN con el de la guerrilla de las Farc al que se llegó a feliz término y actualmente se encuentra en proceso de implementación.
Para Ariel Ávila de la Fundación Paz y Reconciliación es importante tener en cuenta las diferencias que existen entre las Farc y el ELN, básicamente resumidas en tres aspectos.
Mientras las Farc estaban concebidas como un ejército popular que iba a tomar el poder haciendo uso de las armas. El ELN está fundado desde la tradición de las guerrillas foquitas inspirados en la revolución cubana, un pequeño grupo que espera aprovecha momento histórico y logra un apoyo popular para que sea la gente la que haga la revolución.
Otro aspecto que diferencia a ambos grupos es el ideológico, “mientras las Farc es una guerrilla marxista-leninista con estructura vertical, el ELN está ligado al segundo concilio Vaticano por lo que está cimentado en una cultura ética-religiosa”.
Finalmente, la tercera diferencia entre ambas guerrillas está relacionada con sus bases sociales, el ELN tiene estructuras urbanas de clase media-alta y las Farc estaban compuesta en su gran mayoría por campesinos pobres.
Una vez claras las diferencias entre ambos grupos, nos centramos en la agenda que abordarán a partir del próximo 7 de febrero los negociadores del Gobierno y el ELN en Quito (Ecuador), seis en total:
Participación de la sociedad
Democracia para la paz
Transformaciones para la paz
Víctimas
Fin del conflicto
Implementación de lo acordado
Cabe mencionar que dos de estos puntos ya fueron abordados en la mesa de la Habana, Víctimas y Fin del Conflicto.
El profesor de la Universidad Nacional, Víctor de Currea, considera que el ELN debería aprovechar lo bueno, lo malo y lo feo de dichos puntos y acoplarlos en el curso de las negociaciones
“El ELN sabe que hay un proceso previo que ha acumulado experiencias relacionadas con el mismo tipo de negociación, pero dentro de la agenda hay dos puntos que pesan mucho. Considero que deberían tomar lo bueno lo malo y lo feo y acoplarlo a las discusiones que el país ha dado en los temas de víctimas y justicia transicional”, señala Currea.
En ese mismo sentido, Ariel Ávila sugiere que de la agenda de diálogos que abordó el Gobierno con las Farc se debería tomar y aplicar en el proceso con el ELN el punto de Justicia Transicional, porque no puede haber un modelo para cada actor del conflicto (Farc, Militares con líos judiciales y ELN).
Finalmente, ambos analistas consideran que aunque hay diferencias abismales en ambos procesos, en la mesa con el ELN no se deben cometer algunos errores que pudieron haberse cometido en la mesa de La Habana.
“El ELN debe aprender de los errores de comunicación que se cometieron en la mesa de La Habana”, concluye el profeso Víctor de Currea.
Mientras que Ávila indica que se debería hacer claridad sobre el papel que jugará la sociedad civil en la mesa, que a juzgar por lo planteado por el ELN estarían presentes en la discusión de los tres primeros puntos de la agenda.