La constante apreciación del euro con respecto al dólar de los últimos meses ha derivado en una pérdida de competitividad de la economía europea puesto que sus exportaciones han disminuido con respecto al volumen del período previo a la pandemia, y ello repercute negativamente en su salida de la crisis.
Por su parte la FED anunciaba hace unos días su decisión de mantener los tipos de interés rondando el 0% -lo cual beneficia a su competitividad- y previsiblemente provocará una más rápida recuperación económica.
Brexit, un frente abierto en Europa
Por otra parte, las conversaciones entre la UE y el Reino Unido no acaban de llegar a buen puerto y no parece sencillo alcanzar un acuerdo en cuanto sus futuras relaciones económicas, con un evidente aumento de la tensión entre ambas partes durante las últimas semanas.
Por el momento, ya son varias las entidades bancarias no comunitarias que han buscado nuevas localizaciones para sus sedes en países de la eurozona.
La falta de acuerdo derivaría en importantes consecuencias económicas tanto en las importaciones como en las exportaciones de ambos bandos ya que sus relaciones económicas se situarían bajo las normas de la Organización Mundial del Comercio.
Opciones de inversión en situación de crisis
El panorama en los mercados financieros sigue siendo incierto y convulso y no parece que la situación vaya a cambiar hasta la consecución de una vacuna eficaz y segura para la Covid-19, fecha que los más optimistas no sitúan hasta bien entrado el próximo 2021.
Tradicionalmente, en momentos de crisis la inversión en metales preciosos como el oro ha sido recurrente ya que es una forma de preservar el valor del patrimonio, pues siempre han sido considerados como un valor seguro, a pesar de que también pueden presentar extremas volatilidades por su dependencia de acontecimientos globales, lo que aumenta significativamente el riesgo al invertir en ellos. Durante la crisis financiera global del año 2008, mientras el índice Down Jones se desplomaba, el precio del oro no solo aumentó sino que siguió esa tendencia hasta el año 2012.
Y es que los metales preciosos son escasos y muy valiosos por lo que recurrir a ellos como elementos de inversión es una opción a tener en cuenta y más cuando históricamente el mercado de metales preciosos y el mercado de la bolsa se han movido en direcciones opuestas, sin embargo, tampoco tienen que comportarse así siempre y hay contextos en los que intervienen otros factores que será labor del inversor estudiar.
Cómo invertir en metales preciosos
Los metales preciosos como el oro se pueden comprar físicamente o bien invertir en ellos por medio de la inversión en productos financieros relacionados y representan una oportunidad para los inversores de diversificar su cartera, pues pueden ofrecer garantías frente a la inflación, la volatilidad de las bolsas o la depreciación de divisas debido al valor intrínseco de los mismos. En el momento de redactar este artículo los futuros del oro rondan los 1.880 USD, al ser el metal de mayor importancia es frecuente que en períodos de inestabilidad su demanda sea mayor, aunque ahora mismo los analistas hacen sus predicciones sobre qué es lo que puede suceder con su precio a continuación.
No obstante, también cabe mencionar la existencia del trading online de metales preciosos a través de contratos por diferencia –CFDs- en la plataforma de un bróker online de confianza. En este caso no se compra la materia prima dado que las CFDs permiten abrir posiciones sobre metales preciosos como el oro y la plata –además de otros activos- operando sobre el movimiento de los precios de los metales sin adquirir su propiedad. Los CFDs son, sin embargo, productos especialmente complejos y arriesgados que hay que conocer muy bien antes si se quiere operar con ellos, debido a que al realizar trading online se utiliza apalancamiento; se trata de la relación entre el capital propio que el trader deposita en una operación y el capital del que va a disponer realmente al hacer uso de un cierto nivel de apalancamiento, lo que multiplicará ganancias y pérdidas en su depósito en función del apalancamiento usado pudiendo ser estas muy cuantiosas. Es necesario conocer el mercado mediante el análisis de su funcionamiento y las posibles direcciones que pueda tomar para así obrar en consecuencia, la mejor arma del trader es una correcta utilización y conocimiento de las herramientas para gestionar el riesgo disponibles al hacer trading y el uso de un apalancamiento razonable en relación al capital aportado, intentando evitar incurrir en pérdidas inasumibles.
Además del oro y la plata prestaremos atención al platino y al paladio, una de los motivos para fijarnos en ellos es por su papel en la fabricación de catalizadores para controlar la contaminación de los vehículos en un momento en que se endurecen las regulaciones para disminuir las emisiones contaminantes.
Aunque la inestabilidad en los mercados parece que hace que la cotización de los metales preciosos siga una tendencia alcista no olvidemos que lo que debe primar es el principio de prudencia, la inversión en metales preciosos puede ser una buena elección para diversificar la cartera, pero siempre valorando el riesgo de este mercado y de las distintas operativas.