Si al paso de la pandemia le sumamos la larga lista de decisiones reprochables por parte del Gobierno Nacional, tenemos la ruta perfecta para llegar a la crisis en la que estamos metidos. Si alguien esperaba un escenario distinto le hago un abierto llamado a la cordura.
Ahora bien, el gobierno Duque ‘no se ha quedado de brazos cruzados’ y ya puso en marcha los planes que orientan el gran plan de reactivación:
Por un lado, la estrategia “Concluir, concluir y concluir” con la que se les ha notado la premura que hay para finalizar, o por lo menos hacer eventos de entrega del mayor número de obras posible a lo largo y ancho del país y que ponen a trabajar a toda máquina al sector de la construcción.
Por el otro, el plan “Compromiso por Colombia” que prevé la creación de algo más de 700.000 empleos que apuntan especialmente a los sectores minero-energético e hidrocarburos.
Hasta ahí muy bueno, no obstante, y de manera lamentable el Gobierno ha perdido de vista que las vacantes que abren estos sectores por lo general no emplean mujeres. Para 2019 aproximadamente solo el 17% de trabajadoras del sector minero-energético eran mujeres. Si estas son las cartas con las que el país apostará a la reactivación el Gobierno ya le dio la espalda a las mujeres sin titubear.
Todo apunta a que el Gobierno Nacional ha echado en saco roto las cifras que indican que los sectores mayormente afectados por la crisis son los mismos que emplean más mujeres: Alojamiento y Servicios Gastronómicos 68%, Artes 62%, Comercio 61%. Esto, además, sin claridad en las cifras de impacto de la pandemia en términos de subempleo y empleo informal.
Esta hoja de ruta para la reactivación de una economía varonil es aún más preocupante si tenemos en cuenta que según el DANE, el 40,7% de los hogares colombianos es sostenido por madres cabeza de hogar, cuando en 2005 el porcentaje era de 29,9 %.
¿Qué pasará con los ingresos de estos hogares? ¿Cuál es el plan del Gobierno que ve por su reactivación?
Lo lógico, si de esperar una respuesta del gobierno se tratara, es que tengamos que revisar el alcance de los auxilios económicos que ya se están entregando a través de la devolución del IVA y del Ingreso Solidario.
A julio del 2019 en Colombia había 13,07 millones de personas en pobreza monetaria, por lo que la devolución del IVA hecha en marzo que llegó a 4 millones de personas aproximadamente se quedó corta en atender las necesidades de esta parte de la población.
Por su parte el Ingreso solidario según la fuente oficial le ha llegado a 2.616.744 hogares con un promedio de 3,1 personas por hogar, así, le estaría llegando a 8.111.906 personas. De igual manera insuficiente para atender la pobreza monetaria que hoy aqueja al país.
¿Qué está haciendo el Gobierno de Iván Duque para evitar que más colombianos caigan en pobreza? Con planes que desconocen la equidad de género de cara a la reactivación y con auxilios de cobertura deficiente el panorama es desolado e incierto.
Ya sabemos las que serán sus apuestas para el próximo año, o así lo demuestra su propuesta de presupuesto en la que la vicepresidenta y la alta consejera para las mujeres han estado ausentes y con la que pretenden avanzar en el proceso de enajenación de activos del Estado y gravar toda la canasta básica familiar, otra medida que a todas luces profundizará la desigualdad.
Duque y su gabinete siguen llenando de argumentos a la ciudadanía que aún reconoce en él la posibilidad de traer soluciones a la mesa y así lo exige a través de la protesta, sin embargo, todo parece indicar que la administración ciega sordomuda seguirá adelante con sus planes así eso implique pasar por encima de los colombianos y las colombianas.
PD: Paz en la tumba de Juliana Giraldo, una víctima más de la desconexión de este Estado indolente con su territorio.