El sospechoso del tiroteo de Chicago durante la celebración del Día de la Independencia de Estados Unidos ha sido acusado este martes de siete cargos de asesinato, por lo que se enfrenta a cadena perpetua sin libertad condicional si finalmente es declarado culpable, según han informado las autoridades estadounidenses.
El fiscal estatal del condado estadounidense de Lake –en Illinois–, Eric Rinehart, ha anunciado que solicitará al juez encargado del caso la detención del sospechoso Robert E. Crimo “mientras continúa la investigación”, según ha recogido la cadena ABC.
“Quiero enfatizar que habrá más cargos. Anticipamos docenas de más cargos centrándose en cada una de las víctimas: víctimas con daños psicólogos (y) víctimas con heridas físicas”, ha agregado Rinehart en declaraciones a los medios.
“Buscaremos la pena máxima contra este delincuente. No porque busquemos venganza, sino porque la Justicia y el proceso de sanación así lo exigen”, ha agregado el fiscal estatal del condado de Lake.
La Policía del condado de Lake, en Illinois, ha elevado este martes a última hora a siete la cifra de fallecidos tras el tiroteo del lunes en Highland Park.
La alcaldesa de Highland Park, Nancy Rotering, ha sido quien ha confirmado una séptima víctima por el tiroteo, que ha dejado un total de 39 personas heridas repartidas por los centros sanitarios de la zona, según ha recogido la cadena estadounidense CNN.
Por su parte, el subjefe de la Oficina del Alguacil de Lake, Christopher Covelli, ha ofrecido declaraciones a los medios de comunicación en las que ha informado de algunos detalles de las investigaciones en marcha, si bien ha incidido en que la información es “preliminar”.
“Según dónde nos encontramos, en este punto de la investigación (…) creemos que Crimo planeó previamente este ataque durante varias semanas”, ha explicado Covelli respecto al supuesto autor del tiroteo en Highland Park durante el desfile del 4 de julio, jornada en la que Estados Unidos celebra el Día de la Independencia.
El subjefe de Policía ha detallado también que, por el momento, se desconoce los motivos que impulsaron a Crimo a abrir fuego, y que no se cuenta con información para determinar si se trata de un ataque racista, por motivos religiosos u otras razones.
Asimismo, Covelli ha informado de que “no hay indicios de que haya alguien más involucrado en este ataque”, con lo que “todos los indicios” apuntan a que Crimo habría actuado en solitario.
Crimo se encuentra aún bajo custodia mientras que investigadores y empleados de la Oficina del Fiscal del estado revisan la información en el marco de la investigación del suceso, que además de los seis muertos dejó también más de una treintena de heridos.
Según la emisora WBBM, apenas diez minutos después del inicio del desfile se escucharon hasta 20 detonaciones de arma de fuego, aunque este martes las autoridades han elevado a hasta 70 las rondas disparadas contra la multitud. Al llegar, los agentes confirmaron múltiples víctimas en un lugar que, según un testigo, “parecía una zona de guerra”.