El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha anunciado la convocatoria de una reunión de unos diez países centrada en temas migratorios, alegando que es “un asunto estructural” que afecta a prácticamente toda la región.
“Tenemos que evitar que se incrementen los flujos migratorios”, ha expuesto López Obrador este miércoles en rueda de prensa, alegando que, si bien es necesario “proteger” a los migrantes”, también hay que dejar claro que, al emprender este tipo de desplazamientos, “son más los riesgos”.
El presidente de México aspira a negociar “un plan conjunto de ayuda” y, en cuanto a posibles fechas de la reunión, “cree” que puede producirse en los próximos diez días.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ha advertido precisamente este miércoles de que el flujo “sin precedentes” de personas atravesando las Américas requiere de una mayor colaboración entre los gobiernos de Centroamérica y el de México, de tal manera que se garantice la asistencia humanitaria de miles de personas.
El Tapón del Darién, una peligrosa selva que conecta Colombia y Panamá, ha registrado en lo que va de año más de 390.000 cruces y, sólo en agosto, 82.000 personas atravesaron esta zona, una cifra mensual sin precedentes. En su mayoría, se trata de origen venezolano, ecuatoriano y haitiano.