El representante a la Cámara, Carlos Ardila, rechazó enérgicamente la decisión del Gobierno Nacional para retomar a partir del pasado 5 de enero, las fumigaciones terrestres con glifosato en el departamento de Putumayo.
Ardila, insistió que los niveles de toxicidad del químico ponen en riesgo la vida y salud de los putumayenses, en especial de las comunidades étnicas y campesinas, las mujeres embarazadas y los niños. Así mismo, advirtió que reactivar el programa representa un peligro para los cultivos y la biodiversidad de la región.
“Me he opuesto categóricamente a la aspersión con glifosato, ya que considero que afecta desproporcionadamente los derechos constitucionales como lo son la vida, la salud, el medio ambiente sano, generando una gran afectación social”, anotó el Representante liberal.
De otra parte, llamó la atención sobre la necesidad de financiar e implementar el Programa Nacional de Sustitución de Cultivos de Uso Ílicito, considerando que es el único camino para luchar contra este flagelo.
“Esta medida de retomar las aspersiones con glifosato, son contrarias a los mandatos constitucionales que debe cumplir el Gobierno Nacional al momento de formular e implementar la política pública de lucha contra los cultivos de uso ilícito”, puntualizó el Congresista Carlos Ardila.