La Corte Suprema de Justicia condenó a 25 años de cárcel a Luciano Marín, alias ‘Iván Márquez’, por el asesinato de monseñor Isaías Duarte Cancino, ocurrido el 16 de marzo de 2002 en la ciudad de Cali.
De acuerdo con el fallo, “el encargo criminal fue cumplido por Carlos Augusto Ramírez Castro, alias ‘El Calvo’ y Alexander de Jesús Zapata Ríos, alias ‘El Cortico’, quienes el 16 de marzo de 2002, a las 8:00 p.m., en la diagonal 71C con carrera 26 del barrio Ricardo Belalcázar de Cali”.
Monseñor Duarte Cancino fue arzobispo de la Diócesis de Apartadó donde estuvo del lado de la gente en medio de los enfrentamientos constantes entre la guerrilla y los paramilitares. Adelantó mediaciones humanitarias tanto con los actores armados, el empresariado asociado a la producción y exportación del banano, así como con la institucionalidad local y regional. Esta labor ha sido destacada por la exalcaldesa de Apartadó, Gloria Cuartas. Entre esos agenciamientos de paz resaltan sus apoyos a los procesos de desmovilización de la guerrilla Ejército Popular de Liberación (EPL) y las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá (ACCU).
Cuando fue nombrado como arzobispo de Cali por el Papa Juan Pablo II, acompañó a las víctimas del conflicto y estuvo al frente de la lucha por la libertad en los casos de los secuestros por parte del ELN en la iglesia La María (mayo de 1999) y del kilómetro 18 (octubre de 2000).
Monseñor Isaías Duarte fue asesinado en la noche del sábado 16 de marzo de 2002. El hecho criminal se presentó en horas de la tarde, luego de salir de la parroquia El Buen Pastor, en el sector de Aguablanca en Cali, en donde formalizó el matrimonio de 103 parejas. Fue al salir de esa actividad, camino a su vehículo, cuando dos jóvenes sicarios se le acercaron por la espalda, en medio de sus acompañantes y le dispararon.
La Corte Suprema de Justicia determinó que los miembros del Secretariado de las Farc del que hacía parte Iván Márquez, ordenaron el asesinato y que el exguerrillero y líder de las disidencias sabía del hecho.