La alcaldía debe emplear mujeres para reducir pobreza y desempleo

Diego-Cancino-Minuatura

Diego Cancino

Bogotá necesita un programa de empleo que vincule prioritariamente a mujeres y que contribuya a reducir las extensas jornadas de trabajos del cuidado de las que se encargan ellas, que se han agudizado durante la cuarentena. Se debe cambiar la centralidad de los programas de reactivación, que el empleo y la economía del cuidado sean el punto articulador.

El desempleo en la ciudad de Bogotá ha llegado a niveles nunca antes vistos, prácticamente una de cada tres mujeres hoy se encuentra desempleada en la capital, pero además la brecha entre mujeres y hombres desempleados ha aumentado a tal punto, que nos recuerda que esta crisis no es igual para todos, pues se ha ensañado con las mujeres y con la poblaciones más empobrecidas.

Es claro que salir de esta crisis no se trata de recetas mágicas, sino de toda la imaginación, la creatividad, pero sobre todo de saber escuchar. La CEPAL ha venido insistiendo en que la salida de este agujero debe ser una que implique la equidad de género y la inclusión. La recuperación debe incluir a las mujeres.

En un sondeo que realizamos desde mi oficina encontramos que durante la cuarentena las mujeres aumentaron las horas dedicadas a los trabajos del cuidado más de lo que lo hicieron los hombres: cuidado de niños, adultos mayores, personas discapacitadas, oficios del hogar, etc. Las mujeres asumieron tres horas más de lo que asumieron los hombres.

En lo que corresponde al desempleo el 23% del total de personas desempleadas a nivel nacional se encuentra en Bogotá, y una de cada cuatro mujeres que se encuentra desempleada en el país es bogotana. La Capital no solo es una de las regiones que más le aporta al PIB, sino además también una de las que más genera empleo, no obstante en medio de la crisis muchos de los cuales se han perdido.

Es por eso que a partir de identificar los elementos que hoy más se ensañan contra las mujeres en lo económico (el desempleo, la carga de horas dedicadas al trabajo del cuidado y la pobreza), queremos proponerle a las ciudadanas y ciudadanos, y a las autoridades de Bogotá, que cambiemos el centro de los proyectos de reactivación económica hacia el empleo de las mujeres y la garantía de servicios del cuidado, y para ello que implementemos un programa de empleo público para las jefas y jefes de hogar, y que dichos trabajos esten encaminados a satisfacer necesidades del cuidado.Y que se definan y articulen por medio de las redes comunitarias del cuidado que hay en los barrios y localidades.

No seríamos los primeros en implementar este tipo de propuesta, a nivel mundial existen muchas experiencias, de orden nacional, con resultados muy prometedores. Sin embargo, a nivel de ciudades seríamos pioneros en la región y a nivel global, en aplicar este tipo de programas.

Son muchas las experiencias pero podríamos resaltar la de Argentina y Sudáfrica, la primera logró crear 2 millones de empleos, cerca del 70% de mujeres, con un costo de apenas 1,1% del PIB, y con impactos muy positivos sobre los ingresos de los hogares más pobres. Por su parte, Sudáfrica logró generar cerca de 1 millón de trabajos, reduciendo entre 60 y 80% los hogares por debajo de la línea de pobreza, y un costo de 1,1% del PIB.

Estas políticas no son un gasto vacío, todo lo contrario tienen como punto a favor su sostenibilidad, pues es claro que cada peso gastado en un empleo, es un peso además para gastar en bienes y servicios. Y por su parte un servicio del cuidado, garantizado públicamente, es una reducción significativa de las horas que destinan los hogares para estos trabajos.

En este momento la ciudad discute los proyectos de reactivación económica más importantes en la ciudad, creo que esta discusión no puede obviar el problema de desempleo y la brecha de género, por eso, iremos presentando en detalle esta propuesta, pero estamos seguros, que este podría ser el mejor ejemplo para el país y para la región.

@cancinodiegoa