Una niña de diez años ha muerto por disparos de pistoleros del Clan del Golfo en el corregimiento Dipurdú de Andagoya, en el municipio de Medio San Juan, en el departamento colombiano de Chocó.
La víctima ha sido identificada como Valeria Murillo Murillo, quien recibió el impacto de una bala cuando se refugiaba junto a su madre en una vivienda de madera.
El comandante de la Policía en Chocó, el coronel Efrén Blanco, ha explicado que “una menor de 10 años resultó lesionada y finalmente falleció”. “Los ilegales hicieron disparos a la vivienda en el corregimiento y, según la información que nos suministró la comunidad, la niña estaba al interior de una vivienda con la mamá. Las balas atravesaron la casa de madera”, ha relatado.
Blanco ha indicado que “en esa jurisdicción hay una situación grave entre grupos criminales, el ELN –Ejército de Liberación Nacional– y el Clan del Golfo”. La Policía ha abierto una investigación para localizar a los responsables de este ataque.
“Condenamos el asesinato de Valeria Murillo Murillo, menor de 10 años, que fue víctima de los disparos indiscriminados en la comunidad Dipurdú del Guácimo, Medio San Juan, Chocó. Nuestra solidaridad con su familia”, ha publicado la cuenta de la filial colombiana de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Además, el organismo ha realizado un “llamado a respetar la vida y la integridad de la población civil, especialmente de niños, niñas y adolescentes. Instamos a garantizar la seguridad y los derechos humanos de las comunidades del pacífico, especialmente de niños y niñas”.
En el corregimiento Dipurdú hay temor por nuevas incursiones armadas y la población pide garantías de protección y seguridad para permanecer en el territorio. Las autoridades han emitido ya una alerta por desplazamiento masivo.