He notado cierto nerviosismo en el Centro Democrático, producto de la paranoia que les hace pensar o creer que el presidente Gustavo Petro tiene la intención de perpetuarse en el poder.
Los comentarios en Twitter que uno les lee, parecen escritos si con la intención de hacernos creer que el primer mandatario tiene ganas de cambiar la Constitución para quedarse en el poder indefinidamente como lo pretendía hacer cierto expresidente.
Si señor hablo de Álvaro Uribe Vélez, a quien la Corte Constitucional tuvo que frenarle sus intenciones de perpetuarse en el poder de manera indefinida como era su pretensión. No me cabe la menor duda, que si no hubiese sido por ese fallo que le fue adverso al líder del Centro Democrático, esto sería una dictadura, pero de derecha.
Y fue por culpa del cambio en el articulito que permitió la primera reelección de Uribe que se alcanzaron a romper algunos temas relacionados con el equilibrio de pesos y contrapesos en el sistema constitucional de nuestro país y que terminaron de profundizarse cuando Juan Manuel Santos siguió el mismo ejemplo.
Gracias a Dios Santos reflexionó y permitió que se prohibiera la reelección presidencial, de modo que el uribismo que ahora es oposición no tiene por qué temer que el país regrese a este escenario porque tendría que darse una modificación en la Carta Magna, pero esta vez preguntado al constituyente primario si así lo quiere o desea.
No hay razón entonces para pretender sembrar pánico en el pueblo colombiano tratando de dejar la impresión de que se estaría configurando un escenario de reelección indefinida que abriría la puerta para una dictadura de izquierda como ocurre en Venezuela o Nicaragua.
Ya es hora de que el Centro Democrático ejerza una oposición seria, de argumentos, donde haya espacio para el debate de ideas y no para las mentiras y la posverdad.
Si en verdad desean ser alternativa de poder deben pensar que hasta el momento no lo han hecho bien y que más bien están desperdiciando un escenario que les puede servir para demostrar que en nuestro país, se puede ejercer la política de manera inteligente.