¿Hay algo más importante que un buen descanso? Dormir bien cumple un rol fundamental en nuestra salud física y mental. Los especialistas recomiendan dormir un promedio de ocho horas. Una de las cosas más importante para garantizar un sueño pacífico y reparador es tener una cama confortable y adecuada para nuestras necesidades.
La base cama + colchón deben proporcionar el soporte adecuado para la columna. La capacidad de soporte está directamente relacionada con la composición de estos elementos. Si te interesa saber más, sigue leyendo esta nota.
¿Cómo elegir la base de cama?
La base cama parece un elemento menor, pero no lo es. La que utilicemos para nuestra cama influirá en las propiedades del colchón. Si elegimos bien, las potenciará. Por lo tanto, debemos saber cuál elegir para nuestras necesidades.
El conjunto de base cama con colchón necesita estar en plena armonía. Existen diversos tipos de bases. Aquí nombraremos las tres principales:
– Bases de láminas
– Bases tapizadas
– Bases articuladas
Las bases hechas con láminas (generalmente de madera) ofrecen mucha ventilación al colchón. Además, dependiendo de la madera que elijamos, tendremos una base resistente pero flexible. Este tipo de base para colchón está muy recomendada para los colchones de látex, ya que permite que estos se aireen sin problemas.
Revisando los conjuntos de base cama y colchón, notamos que las bases acolchadas son muy populares. Algunas incluso ofrecen espacio de almacenamiento en ellas. Ofrecen un soporte mucho más firme. Muchas vienen con un sistema de ventilación incorporado, ya que están tapizadas con tejidos transpirables o tienen la tapa perforada para permitir que corra el aire. Si no tiene sistema de ventilación, no podemos utilizarlas con un colchón de látex.
El último tipo de base se solía pensar como exclusivo de hospitales y residencias para adultos mayores, pero, hoy en día, todos quieren aprovechar sus ventajas, las cuales son muchas en términos de confort. Si decidimos optar por una base articulada, necesitaremos informarnos muy bien sobre el colchón a comprar. No todos los colchones se adaptan a la articulación. Por eso, nos conviene comprar la base de cama y el colchón juntos.
¿Cómo elegir el colchón?
Si por las mañanas nos despertamos adoloridos o contracturados, es momento de que cambiemos nuestro colchón. A continuación, describiremos los tipos de colchones que podemos encontrar y cuáles son sus características.
• Colchones de espuma
La mayoría de ellos están hechos con poliuretano. Se adaptan a todo tipo de cuerpo y son los más accesibles económicamente. Aunque, si vivimos en un clima muy caluroso o sufres calores, debemos saber que este tipo de material no regula la temperatura. Es ideal para los colchones sencillos de niños y adolescentes.
• Colchones de muelles (o espirales)
Tienen una estructura formada por muelles en su interior. Pueden venir en distintas combinaciones: muelles independientes, continuos o embolsados. Si tenemos una cama matrimonial, los muelles embolsados son la mejor opción, ya que permiten mejor independencia a cada persona. Por ejemplo, si en la pareja hay mucha diferencia de pesos, esto ayudará a equilibrarlo. En cambio, si tenemos un colchón sencillo, podemos optar sin problemas por un colchón con muelle continuo.
• Colchones de látex
Este tipo de colchones son los recomendados para las personas con problemas de columna. Ya que proveen una mejor adaptación al cuerpo humano que los colchones confeccionados a partir de muelles. El látex es firme, pero también tiene flexibilidad. Este material también es ideal para climas fríos o personas que padecen el frío. Los colchones de látex mantienen el calor (aunque necesitan una base con ventilación como vimos en el apartado anterior).
Dentro de los colchones de látex existen distintos tipos según la composición del material: El látex sintético se obtiene por una formulación química; la mezcla lleva una combinación de látex y espumas, son menos densos y generan menos humedad que el látex natural.
Debemos saber que también existen colchones especiales, como los ortopédicos. Estos suelen ser los mejores para las bases de cama articularles.
• ¿Duro o blando?
El colchón no debe ser ni duro ni blando. Lo ideal es que sea mullido, para que se adapte perfectamente a la curvatura de la columna. La firmeza debe ser media, así el colchón cederá correctamente a la presión y peso de las distintas partes de cuerpo.
Otros factores a tener en cuenta para elegir tu base y colchón
• Limpieza
Se recomienda rotar el colchón periódicamente. Tanto la base como el colchón pueden cubrirse con protectores 100 % algodón.
• Postura al dormir
Si se duerme boca arriba es mejor un colchón con mayor firmeza. Si se duerme de costado es mejor que sea más blando, así el hombro se puede hundir levemente.
• Peso
Mientras mayor sea el peso de la persona, mayor firmeza necesitará para no hundirse y moverse con facilidad en la cama.
Beneficios de dormir bien
1. Aumenta la creatividad: Dormir la cantidad correcta de horas proporciona equilibrio hormonal. Esto permite una imaginación más potente
2. Ayuda a balancear el metabolismo: Cuando el cuerpo descansa bien genera leptina, una hormona que regula nuestro apetito. Si, por el contrario, el descanso es insuficiente, tu cuerpo producirá ghrelina (una hormona que aumenta tu apetito).
3. Mejora tu sistema inmunitario: Este sistema se regenera mientras dormimos, si descansamos bien, le damos el tiempo necesario para fortalecerse.
4. Facilita la conservación de la memoria y reduce la depresión: Cuando dormimos nuestras neuronas y su funcionamiento mejoran, esto equilibra la actividad de los neurotransmisores (como la melanina y la serotonina, fundamentales para que nuestro ánimo esté equilibrado). Todo esto contribuye al correcto funcionamiento de nuestra mente.
5. Fomenta la salud cardiovascular: Diversos estudios científicos han demostrado que las personas que sufren insomnio son más propensos a padecer una insuficiencia cardiaca que quienes descansan apropiadamente. Esto se debe a la relación directa que existe entre el poco sueño y el aumento del cortisol (mejor conocida como “hormona del estrés”). A mayor cortisol en sangre, mayor es la probabilidad de padecer hipertensión arterial y trastornos en la frecuencia cardiaca.
Como podemos ver, elegir la base de cama y colchón correctos para nosotros y nuestra familia, tiene muchas ventajas. Esperamos que esta guía nos haya sido útil para encontrar nuestro merecido descanso