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Confidencial Noticias 2025

Etiqueta: Mujeres

Wow… que mujeres

No sería verdad decir que Colombia no ha tenido mujeres sobresalientes en el tema político; con los años que tengo he visto el surgir de mujeres bravas, inteligentes y con gran perfil, mujeres que les han propuesto a este país ideas, le han ofrecido esfuerzo y le han demostrado dedicación.

Pero lo que se está viviendo en nuestra Colombia en estos tiempos, es de verdad digno de resaltar. Un ramillete de mujeres que se atreven a enfrentar de manera directa a un gobierno como el que tenemos hoy en nuestro país. Y no me refiero aquellas, que como dirían en mi tierra, dan más vueltas que un desvelado; a esas definitivamente no me refiero, me refiero aquellas que tienen la virtud y el carácter de denunciar y de enfrentar sin titubeos a este gobierno.

 

Parece increíble, pero justo cuando vivimos uno de los momentos más peligrosos de la historia reciente de nuestro país, cuando muchos sentimos que la democracia peligra, cuando muchos nos preguntamos cuando permitimos que esto le pasara a esta patria, salen las mujeres a darnos un trago de esperanza.

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Hoy son ellas las que hacen despertar la convicción de que hay una salida, son ellas la de los discursos que dan claridad, son las mujeres las que se enfrentan de manera valiente contra la amenaza que se le plantea a la sociedad.

Y claro que también hay hombres valientes que quieren darse la pela por defender esta democracia, pero pareciera que es en este momento, en donde el creador saca de su aljaba la ardentía de la mujer, las cuales tienen una forma especial y complementaria de ver los problemas y resolver las dificultades.

En países como el nuestro, calificado de manera general como machista, siempre se ha planteado que detrás de un gran hombre siempre hay una mujer; pero en este tiempo, en nuestro país, parece que las mujeres han decidido salir de las espaldas de los hombres y ponerse al frente; y de manera valiente defender con pasión, a veces con mucha más pasión de la que demostramos, a este país y evitar su caída al precipicio.

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Muchos dirán que la mujer no está preparada para gobernar a este país, que equivocado están; la verdad es que estas han estado preparadas hace mucho tiempo, pero puede suceder que es ahora, en este momento exacto en que la providencia divina les del espacio para lograr metas, que solo ellas pueden hacer que alcancemos como sociedad.

Pero es importante dejar claro, que en este artículo no estoy resaltando aquellas mujeres que comulgan con el destino que el actual gobierno ha pintado para este país, ni aquellas a las que se les nota el cálculo en su no muy creíble inconformidad, en este artículo me refiero a las Vicky, a las Paloma,  las Lina, las Pedriza, y a todas esas valientes mujeres que levantan la voz por encima incluso de muchos hombres para defender esta patria.

Como hombres tenemos que reconocer que hemos fallado a la hora de liderar, en nuestros hogares muchas veces lo hacemos con arrogancia y con el errado concepto de la inferioridad de la mujer, muchos no han entendido que nunca se ha planteado dicha inferioridad, el llamado siempre ha sido hacer complemento, a protegerlas, a ser ese escudo para que ellas siempre se sientan seguras.

Es esa complementariedad la que hoy nos conduce a ver mujeres que se han convertido en la esperanza de una nación ensombrecida por el caos y la incertidumbre, mujeres que no se le arrugan a ningún presidente, por más puño en alto que muestren, para decirle lo equivocado que esta, pero tampoco se les arruga para llamar a los bandidos cobardes y anunciarles su caída ante el asedio de la justicia.

Mujeres que defienden la institucionalidad, y que poco a poco se convierten en ese dique en el cual se fundamenta en las normas y las leyes que de nuestra constitución se emana. Colombia debe estar alerta, posiblemente tengamos la sorpresa de ser lidereados por una mujer, en lo particular a mí me resulta esperanzador y tengo que reconocer que para nada me molesta esa opción.  

Jefferson Mena Sánchez

Las 22 mujeres rurales cacaocultoras que viajarán a Ghana (África) para intercambio de saberes

El Fondo Mujer Libre y Productiva de la Vicepresidencia de la República, en alianza con la Federación Nacional de Cacaoteros (FEDECACAO), lidera una misión internacional en la República de Ghana, en el marco del programa Mujer Rural Cacaocultora Mentora. Esta iniciativa cuenta con el apoyo de la Embajada de Colombia en Ghana, el Ghana Cocoa Board y la Agencia Presidencial de Cooperación Internacional de Colombia (APC-Colombia).

Como parte de esta misión, 22 mujeres rurales cacaocultoras colombianas viajarán a Ghana para participar en un valioso proceso de intercambio de saberes con mujeres cacaocultoras africanas. A través del diálogo, el aprendizaje compartido y la construcción colectiva de conocimientos, las participantes fortalecerán sus capacidades productivas y comunitarias, generando impactos positivos en sus territorios de origen.

 

Esta experiencia internacional busca consolidar una red de cooperación Sur-Sur entre mujeres rurales, promoviendo el desarrollo sostenible, la equidad de género y el empoderamiento económico en el sector cacaotero.

“Estoy muy contenta por lo que vienen haciendo y extiendo mi saludo a todas las mujeres jóvenes, lideresas, emprendedoras, empresarias y productoras que hacen parte de los programas rurales de cacaocultoras mentoras y del programa Ella Exporta a África (…) Espero que sigan adelante y que fortalezcan la economía del país, fortalezcan el generar empleo a otras mujeres y me ayuden a abrirle la puerta a otras mujeres en sus emprendimientos, que ustedes se vuelvan pioneras. Es así como tenemos que avanzar. Ustedes son la ahora la cara de Ella Exporta a África y sé que ha valido la pena hacer todo esto. No dejen de creer en lo que hacen y si ustedes se mantienen firmes, yo me mantengo firme”, fue señaló por su parte la vicepresidenta Francia Elena Márquez Mina.

FEDECACAO también celebró este logro como una oportunidad para mostrar el potencial del cacao colombiano a nivel global: “Estas mujeres llevarán consigo no solo el conocimiento, sino el alma del campo colombiano. A través de ellas, estamos construyendo puentes que unen culturas y fortalecen el liderazgo femenino en la agricultura. Además de llevar un mensaje al mundo de que en Colombia nuestro cacao es sostenible ambiental, social y económicamente”, expresó su presidente, Eduard Baquero López.

Estas 22 mujeres rurales son procedentes de municipios como Girón (Santander), El Tarra y Tibú (Norte de Santander), El Dorado y Mapiripan (Meta), Chaparral y Ortega (Tolima), Algeciras (Huila), Tumaco (Nariño); Buenaventura, Jamundí y Florida (Valle del Cauca), Caparrapí (Cundinamarca), Tadó (Chocó), Santa Marta (Magdalena), Apartadó (Antioquía), Arauquita (Arauca), Puerto Libertador (Córdoba) y Caloto (Cauca), municipios con presencia del cultivo del cacao y vocación cacaotera en la producción y transformación.

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La propuesta federal

La Misión de Organización Electoral (MOE) (@moecolombia) reseña que solamente 16 mujeres en la historia electoral criolla se han postulado con las intensiones de ser las primeras mandatarias de los colombianos, ejercicio que se viene reviviendo en los últimos meses con la potente presencia de figuras femeninas de todas las líneas ideológicas para agitar las urnas en el 2026.

Para la muestra, candidatas de izquierda como la actual vicepresidenta, Francia Márquez (@franciamarquezm), que sin querer queriendo se posiciona en las variadas encuestas, en las que sus puntos de favorabilidad van acompañados de un síntoma discursivo similar al de su jefe político, el presidente Gustavo Petro. Seguramente su capital electoral del sur occidente colombiano la respaldarán.
Por los lados derechos, sin lugar a dudas, la pre candidata, Paloma Valencia (@PalomaValenciaL) se ganó un fuerte impacto entre la opinión pública y los generadores de opinión tras liderar la caída de la Consulta Popular promovida por el Gobierno y su sequito de senadores.

 

Estoy seguro que las próximas encuestas la posicionarán aún más y seguramente tendrá porcentajes a favor en la consulta interna del Centro Democrático.

A propósito de la acalorada y temprana carrera por la presidencia, una ex colega e independiente como Vicky Dávila (@VickyDavilaH) sigue posicionada en las encuestas de cualquier marca estadística demostrando que su anhelo sigue latente. En este sentido, dicen los analistas políticos que la periodista ahora candidata puede tener a futuro el respaldo del todo poderoso, Álvaro Uribe Vélez (@AlvaroUribeVel), unción nada despreciable a la hora de un cabeza a cabeza a finales de una agresiva contienda electoral como la vivida.

Paralelamente, y producto del ánimo electoral en los recientes días apareció la propuesta del Movimiento por firmas, Unión Federal por la Equidad (UFE), encabezado por Martha Viviana Bernal (@MarthaVivianaB3), 37 años de edad, madre separada, como muchas mujeres criando un hermoso hijo, abogada de profesión, con toda las ganas e intenciones de empezar esta titánica odisea de ser pre candidata y a futuro candidata presidencial, si como lo dicta nuestra norma electoral consigue recolectar más de 50 mil originales rubricas.

Dice ella que: “proponemos un modelo federal donde sean las regiones autónomas para definir sus recursos y, digamos como tal, sus políticas, sin olvidar que van a tener una línea técnica por parte del gobierno central. No es que vayan a ser repúblicas independientes”. Siento que más allá del discurso, la oratoria, la retórica política la democracia participativa sigue en pleno furor por el bien de nuestra democracia.

Ideas, de centro, derecha, izquierda, independientes o federales despiertan, especialmente desde las mujeres, la oportunidad de escuchar diversas propuestas que deben ser encaminadas a propender por el bienestar de más de 50 millones de compatriotas. He venido insistiendo desde esta ventana editorial que las mujeres están de moda en la “cosa política”, lo que puede significar que por primera vez en la historia nuestro país puede abrirle una oportunidad al sexó más fuerte: ¡las mujeres! “todavía falta trabajar más por la paridad, sobretodo, y como lo acabamos de ver, en cargos para la Presidencia de la República”, recuerda la directora de la (MOE), Alejandra Barrios. Los tiempos electorales tienen la última palabra.

Edgar Martínez Méndez

Accionista del Unión Magdalena considera que el fútbol no es para las mujeres

El mayor accionista del equipo de fútbol, Unión Magdalena, Eduardo Dávila, generó un fuerte debate al decir en entrevista para la Wradio, «el fútbol no es un deporte para la mujer”.

Dávila dijo aconsejó además para las deportistas que deben espacios en el tenis, voleibol, dominó, «Que vayan a jugar tenis, voleibol, dominó, pero fútbol no”.

 

El empresario del fútbol dio estas declaraciones en momentos en que Linda Caicedo brilla en el Real Madrid y la Selección Colombia Sub-17 en el Suramericano Femenino ha realizado una buena actuación en el torneo internacional.

Al respecto, la defensora del Pueblo, Iris Marín escribió en su cuenta de X rechazó las declaraciones de Eduardo Dávila pidiendo a los colombianos apoyar a las jugadoras de fútbol en Colombia.

«Sus declaraciones son lamentables y obsoletas, discriminan a las mujeres en el fútbol, reproducen estereotipos machistas y perpetúan la violencia de género y las barreras que históricamente han obstaculizado el acceso y desarrollo de talentos femeninos en condiciones de igualdad en el sector del deporte, la recreación y la actividad física», escribió la defensora del Pueblo.

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¿Cuál será la agenda del 2026 y el papel de las mujeres?

Los estudios y pronósticos para el 2026 señalan que será el tiempo de las mujeres. Evidentemente, la Ley 1475 impulsó y fortaleció la participación política de las mujeres. Sin embargo, la realidad política femenina sigue siendo difícil, especialmente en el ámbito electoral. La participación y el liderazgo de las mujeres en la política y en la vida pública en condiciones de igualdad son fundamentales para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) antes de 2030. No obstante, los datos muestran que la representación femenina sigue siendo insuficiente en todos los niveles de toma de decisiones a nivel mundial. Por lo tanto, la paridad de género en la política aún está lejos de lograrse.

Al 1 de enero de 2025, hay 25 países donde 28 mujeres ocupan cargos como Jefas de Estado y/o de Gobierno. A este ritmo, la igualdad de género en las esferas de decisión más altas no se alcanzará en los próximos 130 años. Solo 18 países están liderados por una Jefa de Estado.

 

Datos recopilados por primera vez por ONU Mujeres muestran que solo hay nueve países donde las mujeres ocupan el 50% o más de los cargos ministeriales de gabinete, desempeñándose principalmente en áreas tradicionalmente vinculadas al rol femenino: Mujer e Igualdad de Género, Familia e Infancia, Inclusión Social y Desarrollo, Protección Social y Seguridad Social, y Cultura.

Actualmente, el 27,2% de los escaños parlamentarios nacionales están ocupados por mujeres, cifra que ha aumentado desde el 1% registrado en 1995. Solo seis países han alcanzado o superado el 50% de representación femenina en parlamentos unicamerales o cámaras bajas: Ruanda (64%), Cuba (56%), Nicaragua (55%), Andorra (50%), México (50%) y Emiratos Árabes Unidos (50%). Otros 21 países han alcanzado o superado el 40%, incluyendo nueve en Europa, seis en América Latina y el Caribe, cinco en África y uno en Asia-Pacífico.

Sin embargo, en 21 países las mujeres ocupan menos del 10% de los escaños en cámaras bajas o parlamentos unicamerales, e incluso hay tres cámaras bajas sin representación femenina. Al ritmo actual, la paridad de género en los cuerpos legislativos nacionales no se logrará antes de 2063.

En América Latina y el Caribe, las mujeres ocupan el 36% de los escaños parlamentarios, mientras que en Europa y América del Norte constituyen el 33%. En África Subsahariana, el 27%; en Asia Oriental y Sudoriental, el 23,5%; en Oceanía, el 20%; en África Septentrional y Asia Occidental, el 19%; y en Asia Central y Meridional, el 17,5%.

Factores que inciden en la baja participación femenina:

  1. Misoginia y machismo: El patriarcado se exacerba cuando las mujeres intentan ocupar espacios tradicionalmente masculinos, especialmente en la toma de decisiones políticas.
  2. Carga de cuidado: Mientras la responsabilidad del cuidado recaiga exclusivamente en las mujeres, los hombres tendrán más ventajas para dedicarse a la carrera política.
  3. Desafíos post-electorales: Las coyunturas relacionadas con los gastos de campaña, como el aplicativo “Cuentas Claras” y la reposición de votos, afectan la continuidad de las mujeres en política.

Estos factores son fundamentales para comprender el ejercicio político femenino, ya que determinan si las mujeres que se postulan a cargos de elección popular logran sus objetivos o desisten de continuar. El cronograma político también es clave en este contexto; las mujeres que aspiren a cargos deben proyectar y planificar sus acciones de campaña con antelación. Además, es vital contar con una red de apoyo sólida, donde los hombres asuman roles de cuidado con empatía y corresponsabilidad.

Es posible que en los países donde se observan avances significativos haya un cambio en las relaciones de pareja, con una distribución más equitativa de las responsabilidades de cuidado. Esta transformación contribuye a que más mujeres se involucren en política.

Con la llegada de los Concejos de Juventud y el inicio de un nuevo período electoral, es deseable que muchas mujeres ocupen las nuevas curules y aprovechen los avances hacia la paridad. Además, es fundamental que estas mujeres estén comprometidas con agendas contemporáneas para cumplir los ODS, especialmente desde un enfoque de género. Así se garantizará para las mujeres una vida libre de violencia, con el pleno ejercicio de sus derechos en el país que merecen.

El cambio empieza por ti, por mí y por todxs.

Marcela Clavijo

Mujeres, por favor

Que yo siendo mujer me avergüence de las mujeres que nos representan no es nada que les deba asombrar, ni nada que me abochorne reconocer. Las de la izquierda histérica y gritona – las de la política, el mitin y las medidas estrella- llevan dos semanas sembradas con sus estupideces. Dejen que les cuente:

Primero fue la ministra de Sanidad, que al no tener competencias se inventa el trabajo y acaba prohibiendo beber bebidas alcohólicas en lugares donde la presencia infantil sea mayoritaria; adiós a las terrazas de los parques que dan vida a las horas aburridísimas de tobogán y balancín, o “subibaja”; adiós a la cervecita fresquita en las fiestas del pueblo junto a los hinchables y a la del parque de bolas.  A ver quién es el guapo que aguanta ahora las eternas tardes de sábado sin ese aliciente social, tan aceptado por los padres jóvenes, el resto- los que peinamos canas- ya no vamos al parque, ni empalmamos aperitivos y comidas y cenas a la ligera, el cuerpo no nos lo aguanta.

 

Después vino esa pelea callejera protagonizada por Trabajo y Hacienda, por la tributación del sueldo mínimo interprofesional. ¿Cómo es posible que dos ministras del mismo gobierno rompan negociaciones y no caiga el gobierno entero? Señoras, sororidad, apóyense, que esto es bueno para todos los españoles. Pero Montero estará pensando en que Hacienda somos todos y como todos deben pagar, y Yolanda estará pensando en la clase trabajadora esa que aspira a algo mejor, pero aspira eternamente, porque ella nunca habla de trabajar más y mejor, sino de menos horas y cobrar más. Claro, así no hay quien se ponga de acuerdo.

Si queríamos más vida, más chisme y más aplausos, la ministra de Hacienda es al gobierno de España como Montoya a la Isla de los famosos y nos deja perlas impagables que nos muestran claramente las intenciones de este desgobierno de perdedores. Su última actuación estelar y se lo escribo literalmente no tiene desperdicio: “Qué vergüenza que todavía se cuestione el testimonio de una víctima y se diga que la presunción de inocencia está por encima del testimonio de mujeres jóvenes”, léanlo de nuevo.

Pues eso, la calamidad que tenemos por ministra se carga así inconscientemente y con toda intención el Estado de Derecho.  Si es que lleva ahí dentro, en su profundidad, una pequeña dictadora que cuanto más grita en un mitin, más pulsa por salir a la luz.  Y es que cada decisión judicial- en este caso por Dani Alves, el jugador de fútbol- que guarda algo de polémica sentimental, esa que el feminismo de izquierda ha elevado a norma y ley, sirve de munición al gobierno para denigrar al poder judicial, único de los tres poderes que aún puede salvar al Estado de Derecho.

Que el gobierno de España vive en perpetua campaña contra el poder judicial no es ninguna sorpresa, pero que grite que la voz de una mujer joven que dice haber sido víctima de agresión sexual y no se ha podido probar suficientemente pesa más que la presunción de inocencia de un señor… pues es cargarse de un plumazo el Estado de Derecho. ¡Ay! Pobre España que ya a uno no le queda ni la inocencia, ni la presunta inocencia. Señoras, por favor, recuperen la cordura y pongan cabeza y menos sentimentalismo y corazón: las denuncias y los cargos contra alguien hay que demostrarlos, no traguen esa basura izquierdosa de solo con decirlo basta. No, no basta. Hay que denunciar, hay que tener pruebas y han de ser contundentes y si no hay pruebas suficientes… pues siempre ganará la presunción de inocencia. Pónganse en el lugar del reo, cualquiera podría acusarlas sin pruebas y su suerte sería la que ahora le desean.

Y a nuestro desgobierno esto les da alas porque así, abriendo brechas sentimentalistas en la justicia acaban desgastando la imagen del Poder Judicial, único contrapeso a este desgobierno que tal vez, solo tal vez, sean los héroes de la democracia española.

Almudena González

El G100 aspira a representar a más de un millón de mujeres de todo el mundo

Las representantes del G100, una organización de mujeres a nivel mundial se hicieron presentes en el Women Economic Forum Colombia 2025, en donde hablaron para Confidencial Noticias y expusieron que su meta es agrupar a más de un millón de mujeres de todo el mundo, conocer sus experiencias y darlas a conocer en diferentes países.

A continuación la entrevista:

 

Por: Milena Ardila y Alejandro Poveda

‘Mujeres de Caña Dulce’ llegan con ‘Que le piquen caña’

La agrupación ‘Mujeres de Caña Dulce’ es una iniciativa creada por María Isabel Saavedra y Vicky Echeverri. Su propósito es recuperar el legado y la memoria colectiva de mujeres del Valle del Cauca que han sido clave en la música, el arte y la ciencia durante más de 100 años.

Mujeres de Caña Dulce nació con la idea de rendir tributo a 120 mujeres y destacar su contribución en distintas áreas. A partir de esta iniciativa, se creó un himno en forma de bambuco que representa la riqueza cultural de la región. La producción musical estuvo a cargo de Vicky Echeverri y cuenta con arreglos de Pablo Manresa y mezcla de Rafa Vergara.

 

Este marzo, las voces de cuatro mujeres se alzan en un canto de fuerza, resistencia y sororidad. «QUE LE PIQUEN CAÑA» es el nuevo himno que representa las batallas internas y los sueños colectivos de todas las mujeres que día a día desafían los límites y construyen un mundo más equitativo.

Este poderoso tema, una producción de Vicky Echeverri, fue compuesto por María Isabel Saavedra y Vicky Echeverri, con la participación especial de talentosas artistas como Cala García, Juliana Barrios, Alexandra Alban «Alexa Conga» (percusión) Sara Munera (flauta) y quienes unen su arte y sensibilidad para dar vida a una canción que trasciende el sonido y se convierte en un manifiesto.

Acceso a empleo en Guaviare, Vaupés y Guainía, sigue siendo limitado para las mujeres

 Foto: Oxfam Colombia

La Universidad del Rosario y el Consejo Privado de Competitividad (CPC), con el apoyo de Davivienda, presentan el primer el Índice de Equidad de Género (IEG) subregional, un estudio que mide las brechas de género a nivel departamental en Colombia y ofrece una radiografía detallada sobre las desigualdades estructurales entre mujeres y hombres en el país.

 

El IEG analiza, de forma comparada para los periodos 2023 y 2024, seis pilares fundamentales para la equidad de género: infraestructura del bienestar, infraestructura del cuidado, acceso a cargos de representación y acceso a mercados, educación y salud.

Por medio de este índice se visibilizan los avances y las brechas de género con el propósito de motivar la discusión, proporcionar insumos para la formulación de políticas públicas basadas en evidencia y fortalecer la capacidad institucional y territorial para promover la equidad de género en el país.

Principales hallazgos del IEG 2024

● Bogotá, Atlántico y Cundinamarca lideran la medición, reflejando avances principalmente en los pilares de: infraestructura, empleo y acceso a servicios.

● Entre 2023 y 2024, departamentos como Cauca, Córdoba y Sucre registran avances, reduciendo sus brechas en varios pilares.

● En estos dos años, las brechas de género persisten en departamentos con alta ruralidad, como Guaviare, Vaupés y Guainía, donde el acceso a servicios básicos y empleo sigue siendo limitado para las mujeres.  Uno de los factores clave que refuerzan esta desigualdad es la falta de acceso a infraestructura básica como acueducto, energía eléctrica y gas, que, aunque son esenciales para mejorar la calidad de vida de todos por igual, el IEG evidenció que la falta de acceso a estos servicios afecta particularmente a las mujeres, más aún en zonas rurales, en razón a la carga doméstica que recae sobre ellas. Es así como son ellas quienes, en su labor de cuidado, recorren largas distancias para acceder al agua, lo que incrementa su carga de trabajo no remunerado.

● El acceso a infraestructura del bienestar y del cuidado son pilares clave para reducir desigualdades estructurales, de allí que la inversión en servicios de cuidado y en tecnologías digitales sea habilitadora de una mayor equidad.

● La representación política sigue siendo baja en las mujeres, ya que aunque han habido avances en algunos departamentos, la participación de las mujeres en cargos de poder sigue siendo limitada.

● Desde el pilar de educación, las mujeres alcanzan mayores niveles de educación formal y son mayoría entre las personas graduadas de educación superior. Sin embargo, sus ventajas educativas no se traducen directamente en mejores oportunidades en el mercado laboral. Por su parte, los hombres enfrentan tasas más altas de deserción en su trayectoria educativa hasta la educación media. Este fenómeno podría explicarse por múltiples factores, entre estos la necesidad de buscar fuentes de ingreso.

● En salud, el Índice evidencia que los hombres presentan mayores tasas de suicidio consumado en todo el territorio nacional, aunque las mujeres registran más intentos de suicidio. Además, se observó un cambio en la brecha de género en el indicador de prevalencia de la depresión, que pasó a centrarse más en los hombres en 2024.

● En materia de seguridad laboral y prevención de accidentes, los hombres presentan una mayor tasa de mortalidad en incidentes de tránsito y laborales. En 32 departamentos, las muertes masculinas por estas causas superan a las femeninas.

Una herramienta para la equidad en Colombia

Para la Universidad del Rosario y el CPC, el IEG es una herramienta esencial para orientar esfuerzos hacia una Colombia más equitativa. Al respecto, la doctora Ana Isabel Goméz, rectora de la Universidad del Rosario, afirmó: “La equidad de género es un compromiso colectivo y un pilar del desarrollo social y económico. La falta de políticas públicas efectivas y la ausencia de medidas concretas impiden cerrar las brechas existentes. El IEG debe ser una herramienta de referencia para la toma de decisiones, orientando estrategias que permitan garantizar oportunidades equitativas y construir una sociedad más justa, competitiva e inclusiva».

Por su parte, Ana Fernanda Maiguashca, presidenta del Consejo Privado de Competitividad, señaló: «Esta medición es clave para el país. El IEG nos ha brindado información que es necesaria para la toma de decisiones y la formulación de políticas tanto públicas como de acciones privadas en particular en el ámbito regional. También nos permitió poner una lupa en las áreas en que como sociedad requerimos tener más y mejor información. De forma tal que su construcción genera un gran valor en diferentes frentes. Finalmente, ojalá lo veamos como una fuente interesante de datos que nos haga reflexionar sobre nuestros sesgos inconscientes y su impacto en nuestro bienestar y competitividad».

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Maritza Pérez, vicepresidente ejecutiva de Banca Personal y Mercadeo del Banco Davivienda, destacó: «En la Casita Roja promovemos la inclusión de todas las personas. Por eso, además de motivar el acceso a servicios financieros para hombres y mujeres, apoyamos iniciativas como el IEG: un insumo para identificar retos y orientar acciones públicas y privadas que potencien el crecimiento de todos los colombianos, en línea con nuestro compromiso de hacer del mundo una casa más próspera e incluyente».

De hombres y  de mujeres

La Declaración Universal de Derechos Humanos (1948) fue uno de los grandes logros de la sociedad occidental, consecuencia de las atrocidades de las dos grandes guerras y del holocausto judío del Siglo XX. El reconocimiento de los derechos humanos como catalizadores de civilidad permitió la valoración del concepto de dignidad humana en su estatus ontológico y moral. Los derechos humanos fueron un revulsivo a la crisis humanitaria, lo cual es loable, no obstante, pareciera que han cumplido su ciclo, se han distorsionado al punto de desbordarse. Existe una crisis de hiperderechos. Todo lo que quepa en la imaginación human termina en derecho humano. El catálogo de derechos humanos cada vez se amplía más al punto que, rayan con la psicodelia, lo inmoral y la estulticia.

Este último escenario, llevó a la administración del presidente estadounidense Donald J. Trump (1946), a suscribir el pasado 05 de febrero, una orden ejecutiva que tiene por título “Mantener a los hombres fuera de los deportes femeninos”, increíble pero cierto, con esta distorsión de los derechos humanos, muchos hombres participan en competencias deportivas femeniles. La orden del Presidente Trump, pretende excluir a los atletas transgénero de las competencias femeninas de cualquier categoría, especialmente entre escolares. La orden tiene un argumento científico y natural, la elegibilidad deportiva ha de ser en función del sexo y no de la identidad de género o de reducción de testosterona. Lo cual es plausible y obvio. Las mujeres transgénero tienen ventajas atléticas sobre las mujeres, en tanto que, los hombres transgénero tienen desventajas atléticas frente a los hombres.

 

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La medida es apoyada por la mitad de los gobernadores de los Estados Unidos; también hay voces disonantes, como la de la Gobernadora de Maine, Janet Mills (1947), que amenazó con demandar la orden ejecutiva para ante los tribunales. La orden es realista, resulta indigno para una dama compartir espacios privados con alguien de otro sexo, como lo es también para los caballeros. No hay excusa para que mujeres transgénero invadan espacios reservados para mujeres, como baños, barracas de unidades militares, prisiones, hospitales, saunas y spas. La misma interpretación aplica para hombres transgénero invadiendo espacios reservados para hombres. El sexo genético no es una construcción social como aducen muchos académicos. El sexo es binario: hombre o mujer, pero no hay una puerta giratoria para que artificialmente se cambie de sexo según la conveniencia ideológica de turno. La carga cromosómica es XX y XY, en algunos casos hay variaciones excepcionales que deben ser atendidas según cada particularidad.

La identidad de género, es un constructo sexual a partir de la ideología que busca imponer una forma social donde desaparecen los roles naturales masculinos y femeninos. Moldear mentes infantiles por vía de discurso ideológico para crearles identidades sexuales ajenas a su naturaleza es un acto aberrante. Ocurre en California, por orden del Gobernador Gavin Newsom (1967) los niños son manipulados por el sistema educativo alterando su orientación sexual mientras se les omite la información a sus padres.

El exceso de derechos humanos y de humanismo está llevando a la hecatombe moral y al socavamiento de la familia. Cada día hay más proliferación de tendencias surrealistas sacadas de una agenda global perversa ¿Qué sigue en ese mundo de hiperderechos humanos? ¿Matrimonios interespecies, humano y gato? ¿Ideología de género perruna y gatuna? El movimiento cultural destructivo arroja creces contaminadas en la batalla cultural; impondrá su anhelado orden, la ideología de género es una de sus armas.

Sólo hay dos géneros, masculino y femenino. Afirmar que la condición sexual se construye en la mente es desconocer la condición humana. Suficiente ya de ese juego de palabras: hombros, hombres, hombras, mujeros, mujeres y mujeras. La realidad no cambia porque la reescriban sesudos académicos con Ph.D. desde una universidad. Simplemente se trata de ideología y manipulación social que rayan con la egolatría, el fanatismo y en algunos casos, la violencia.

León SandovalFerreira

La enfermedad silenciosa que afecta la salud de las mujeres

La endometriosis es una enfermedad crónica y progresiva que afecta a aproximadamente una de cada diez mujeres en edad reproductiva. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), esta condición suele estar subdiagnosticada y tiene un impacto profundo en la calidad de vida de las personas que la padecen, además de representar un desafío considerable para la medicina moderna.

El doctor Camilo Libos, ginecólogo adscrito a Colsanitas y autor del libro Endometriosis: enfermedad oculta, comenta que: “La endometriosis ocurre cuando el tejido que recubre el interior del útero, conocido como endometrio, no se expulsa adecuadamente durante el ciclo menstrual. En lugar de ser eliminado, este tejido puede desplazarse a través de las trompas de Falopio y adherirse al peritoneo, una membrana que recubre los órganos de la pelvis y el abdomen. Este fenómeno, denominado menstruación retrógrada, desencadena procesos inflamatorios y la formación de cicatrices, características principales de esta enfermedad”

 

Los síntomas de la endometriosis son variados y debilitantes. Entre los más comunes se encuentran: el dolor pélvico crónico, dismenorrea (dolor menstrual intenso), dolor durante las relaciones sexuales, fatiga, problemas digestivos y dificultad para concebir. Estos síntomas, a menudo, se confunden con otras condiciones médicas, lo que retrasa el diagnóstico hasta ocho años en promedio.

“Tradicionalmente, el diagnóstico de la endometriosis requería técnicas invasivas, como la laparoscopia. Sin embargo, hoy contamos con la ecografía de mapeo de endometriosis, una herramienta avanzada que permite visualizar los tres tipos principales de la enfermedad: peritoneal, profunda y los endometriomas ováricos”, agrega Libos.

La endometriosis no solo afecta la salud física, sino también el bienestar emocional y social de las pacientes. El dolor incapacitante puede limitar la vida diaria, mientras que la infertilidad asociada a la enfermedad impacta profundamente en los planes familiares de muchas mujeres.

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Aunque no existe una cura definitiva, los tratamientos actuales están diseñados para aliviar los síntomas y mejorar significativamente la calidad de vida de las pacientes. Estas opciones incluyen medicamentos analgésicos, terapias hormonales y procedimientos quirúrgicos especializados. La intervención con la laparoscópica sigue siendo el estándar para eliminar quistes y lesiones, mientras que las terapias hormonales, como los progestágenos, ayudan a frenar la progresión de la enfermedad y mejorar las probabilidades de concepción.

“No se debe normalizar el dolor intenso durante la menstruación. Este tipo de molestias no son normales y deben ser motivo de consulta médica. La educación y la sensibilización son fundamentales para garantizar diagnósticos tempranos y tratamientos oportunos, es por esto que se recomienda a las mujeres que asistan al ginecólogo para prevenirlo en caso que sea necesario” concluyó Libos.

La investigación continua y el desarrollo de nuevas estrategias terapéuticas son esenciales para abordar esta condición de manera integral y mejorar la calidad de vida de las millones de mujeres que la enfrentan.

Colombiana destacada entre las 100 mujeres inspiradoras en la minería mundial

La iniciativa 100 Mujeres Inspiradoras Globales en la Minería (WIM 100, por sus siglas en inglés), anunció esta semana la edición 2024 de su reconocimiento a las 100 mujeres que han aportado a la transformación de la industria minera a nivel mundial. Entre ellas se encuentra una colombiana: Marcela Marín Rincón, directora de estrategia y desarrollo organizacional de Mineros Colombia.

La distinción a Marín Rincón reconoce su papel como parte de una de las empresas más importantes de la minería colombiana. Fue la creadora de la red #SomosMujeresMineras, con la que se busca promover la inclusión y el empoderamiento de las mujeres en la industria minera. También lidera programas como el voluntariado “Corazón de Oro”, que impulsa el desarrollo de las comunidades donde opera Mineros Colombia, y “Ella es Astronauta”, a través del cual tres niñas de su región fueron seleccionadas para visitar el Centro Espacial Johnson de la NASA en Houston (Estados Unidos).

 

Este reconocimiento hace que sienta un compromiso, aún mayor, con las niñas y mujeres del Bajo Cauca antioqueño, con el objetivo de continuar visibilizando el rol de la mujer, como un eje determinante para el progreso del territorio, tomando a través de este, el liderazgo social, político, económico y cultural en sus comunidades”, destacó Marín Rincón.

Las mujeres que hacen parte de WIM 100 fueron escogidas entre más de 570 postuladas y representan a 41 países de todo el mundo, un aumento con respecto a los 40 países representados en 2022 y a los 15 con los que empezó esta iniciativa en 2013. Las labores de las premiadas van desde asistentes y especialistas junior hasta líderes ejecutivas, destacando la profundidad del trabajo femenino en todos los niveles de la industria.

“Las mujeres enriquecen la industria a través de diversas experiencias que impulsan la sostenibilidad, la seguridad y el compromiso comunitario. Si bien persisten los desafíos, los logros de estas 100 mujeres inspiradoras resaltan por qué el sector minero debe liderar el camino al priorizar la diversidad, la equidad y la inclusión para fomentar un futuro resiliente e innovador”, aseguró Gina Jardine, presidente de WIM 100.

El programa WIM 100 se realiza cada dos años y destaca a mujeres que fomentan el cambio, la transformación, la inclusión y la reducción de brechas de género en la industria minera. Entre sus socios se encuentran BMO Capital Markets, Boston Consulting Group, Imnomotics y Stratum.

WIM fue creada con el fin de promover el empleo, retención y avance de las mujeres en el sector, a través de iniciativas como becas con el Imperial College London, pasantías, tutorías y administración de eventos de networking y actualización.

Las mujeres no caminamos seguras

Este 25 de noviembre, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, no podemos limitarnos a un acto simbólico de reflexión. La violencia de género en Bogotá sigue siendo un flagelo imparable, y aunque celebramos avances en términos de normativas y políticas públicas, la cruda realidad nos muestra que las mujeres seguimos enfrentando una violencia estructural, sistemática y creciente. Los recientes feminicidios, las amenazas latentes y la falta de respuestas eficaces desde las autoridades exigen un análisis profundo y una reflexión que, lamentablemente, sigue pendiente.

En Bogotá, el panorama es desolador. A pesar de contar con un presupuesto de $124.000 millones para la Secretaría Distrital de la Mujer, las cifras siguen siendo alarmantes. Cada cuatro días, una mujer es asesinada en la ciudad. Según el Observatorio de Feminicidios en Colombia, Bogotá ocupa el segundo lugar en feminicidios en el país, con 72 casos registrados en lo que va del año. Este dato refleja una contradicción dolorosa: tenemos recursos, pero no estamos salvando vidas.

 

Si bien desde la administración distrital se han anunciado medidas, como la reactivación del Grupo de Género Interinstitucional y la campaña «Bogotá Ciudad Púrpura», los datos revelan una desconexión entre el discurso y la acción. Los servicios psicosociales y jurídicos han disminuido un 48% en 2024 respecto al año anterior, y los Consejos Locales de Seguridad para las Mujeres han sufrido una reducción presupuestal del 46%. La respuesta institucional no está a la altura de la magnitud de la violencia que enfrentan las mujeres, y, lejos de garantizarles protección, las deja expuestas a una violencia machista que sigue arrebatando vidas.

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La semana pasada, el alcalde Carlos Fernando Galán expresó su preocupación por el feminicidio de Danis Miranda Yanes en Suba y pidió agilizar la captura del agresor. Sin embargo, cuando contrastamos esas palabras con la realidad de lo que ocurre en las calles de Bogotá, la inacción es evidente. En casos como el de Naomy Arboleda, una joven de 25 años asesinada brutalmente en el barrio Las Cruces, la justicia tarda en llegar. Naomy sufrió el acoso y la violencia de un hombre que, en represalia por sus reclamos, la golpeó hasta matarla.

Peor aún es el caso de Julieth Merchán, una mujer que vive bajo amenaza constante desde que un expolicía, Cristian Andrey Osorio, intentó asesinarla en su propio hogar. A pesar de la medida de protección que debería mantener alejado a su agresor, la Policía no ha actuado, y el violento sigue libre, amenazando con «adelantarse» a la justicia. Julieth está atrapada en un círculo de miedo, sin poder regresar a su casa ni trabajar tranquila. Esta situación refleja el vacío en la protección real de las mujeres en nuestra ciudad.

Estos casos no son aislados. Son el reflejo de una ciudad que, aunque declara su preocupación por la violencia de género, no implementa políticas efectivas para garantizar la seguridad de las mujeres. La fragmentación entre las entidades encargadas de la protección, la falta de coordinación y la reducción de los recursos destinados a la atención y prevención de la violencia son obstáculos que deben ser superados de inmediato. No es suficiente con declaraciones y campañas mediáticas; se requiere un compromiso real, con recursos adecuados y una política pública que priorice la vida de las mujeres.

A nivel global, la lucha por los derechos de las mujeres enfrenta amenazas serias bajo el pretexto de ideologías políticas que, como la teoría woke, buscan deslegitimar nuestros avances y presentar a la igualdad de género como una «perversión» de la familia y la sociedad tradicional. Este discurso, que gana terreno en diversas partes del mundo, es peligrosamente regresivo. Bajo la fachada de proteger la «familia tradicional», se esconde un ataque directo a los derechos conquistados por las mujeres, que de manera histórica hemos luchado por garantizar.

No podemos permitir que estas voces de odio, que promueven el retroceso en los derechos humanos, se impongan. Por ello, hoy más que nunca debemos exigir que se le ponga fin a la impunidad, que se brinde atención real a las víctimas de violencia de género y que se destinen recursos suficientes para garantizar una protección integral para todas las mujeres de Bogotá. Hoy, en el 25N, hacemos un llamado a la reflexión, a la acción y a la exigencia de justicia. Porque mientras no se garantice la seguridad de las mujeres, Bogotá no será una ciudad segura para nadie.

Quena Ribadeneira

Ascienden cifras de trabajo en cuidado no remunerado

El cuidado de personas con enfermedades crónicas y con discapacidad recae en las familias, especialmente las mujeres, que asumen esta responsabilidad sin remuneración económica, generando un gran impacto en los sistemas de salud y servicios sociales. Este trabajo analiza el costo económico del cuidado no remunerado, destacando su valor social y la necesidad de implementar políticas públicas que apoyen a los cuidadores.

Según el DANE, en 2021 el valor del trabajo doméstico y de cuidado no remunerado en Colombia ascendió a 462.295 miles de millones de pesos, cifra superior a la producción de las industrias manufactureras; sin embargo, este trabajo invisible no se refleja en las estadísticas económicas tradicionales, ya que se invisibiliza su aporte fundamental al bienestar social y económico del país.

 

Las cifras revelan que el 77,7% de las actividades de cuidado en Colombia son realizadas por mujeres. Ellas dedican un promedio de 21,3 horas semanales a estas labores, mientras que los hombres destinan solo 8,1 horas. Esta disparidad de género en el cuidado se traduce en una menor participación laboral femenina, menor acceso a educación y menos oportunidades de desarrollo personal, perpetuando brechas de género y desigualdades sociales.

“El cuidado no remunerado de personas con enfermedades crónicas y con discapacidad alivia la carga de los sistemas de salud y servicios sociales. Sin embargo, este apoyo informal tiene un costo económico considerable para las familias, quienes asumen gastos en alimentación, medicamentos, transporte, terapias y otros servicios especializados” afirma Miguel Sánchez, decano de la facultad de Enfermería de la Universidad El Bosque.

La Ley 2297 de 2023 reconoce la importancia del cuidado y busca garantizar los derechos de las personas con discapacidad y sus cuidadores. Esta ley establece medidas para fortalecer la autonomía de estas personas, promover su inclusión social y económica, y mejorar su calidad de vida.

“Es necesario implementar las políticas públicas integrales que hoy existen en Colombia para reconocer el valor del cuidado no remunerado y brindar apoyo a los cuidadores. Estas políticas deben incluir la valoración económica del cuidado para reconocer el aporte del cuidado no remunerado a la economía nacional a través de su inclusión en las cuentas nacionales.  De igual manera, resulta necesario ofrecer equidad en el acceso de servicios de cuidado accesibles que permitan ampliar la oferta de servicios de cuidado de calidad y accesibles para las familias que lo requieran, especialmente en las regiones rurales y dispersas del país” añadió Sánchez.

El cuidado de personas con enfermedades crónicas y con discapacidad es una tarea fundamental para el bienestar individual y social. Pese a ello, la fallida reforma en salud no propone mecanismos de apoyo para ofrecer formación, capacitación y acceso a servicios de salud y procesos de bienestar para los cuidadores. Para proponer soluciones a este problema, la Universidad El Bosque ha preparado un programa de formación de cuidadores que ofrece herramientas y conocimientos necesarios para brindar una atención integral y de calidad a quienes cuidan de otros.

Es necesario reconocer el valor del trabajo de cuidado no remunerado, principalmente realizado por mujeres, y adoptar políticas públicas que apoyen a los cuidadores y promuevan una distribución más justa de las responsabilidades de cuidado en la sociedad colombiana. La enfermería desempeña un papel crucial en la reducción de este costo al disminuir la necesidad de institucionalización de pacientes y brindar apoyo a los cuidadores familiares. Su intervención temprana y preventiva puede evitar complicaciones y hospitalizaciones, optimizando los recursos del sistema de salud.

Existe una importancia de reconocer y apoyar el trabajo de las enfermeras y enfermeros, no solo en el ámbito hospitalario, sino también en el cuidado no remunerado. Su dedicación y profesionalismo son invaluables para el bienestar individual y social. Invertir en el bienestar de las enfermeras y enfermeros es invertir en la salud de toda la sociedad.