La Fiscalía General del estado mexicano de Baja California ha informado este jueves sobre el hallazgo de nueve cadáveres en una fosa clandestina ubicada en un camino en los cerros que dividen Tijuana y Playas de Rosarito, en el noroeste del país.

Los cuerpos presentan un estado de descomposición muy avanzado que ha impedido a los investigadores que identifiquen la identidad de las víctimas, imposibilitando además determinar el género debido a estas condiciones, según ha informado la agencia de noticias Reforma.

Además de los nueve cuerpos, se han encontrado seis partes óseas de diferentes dimensiones, que podrían pertenecer a cuatro distintos cuerpos, si bien continúa abierta la investigación.

El hallazgo se da tan solo dos días después de que se localizaran los cadáveres de dos personas en el mismo camino vecinal. Con estos nueve cuerpos, aumenta a esta 21 las personas halladas sin vida en grupos entre las localidades de Tecate, Ensenada y Tijuana desde el pasado 19 de diciembre, según la citada agencia.

Ese mismo día, una camioneta tipo panel fue abandonada con seis cuerpos sin vida, cinco hombres y una mujer, estacionada frente a una farmacia en la céntrica Plaza comercial Conquistador, en plena zona «dorada» de Tijuana.

Mientras, el 21 de diciembre cuatro cuerpos fueron localizados en el interior de un vehículo Hyundai gris, abandonado en el interior de un rancho conocido como El Chapo, entre Tecate y Ensenada.

La Fiscalía continúa su investigación para determinar quién ha dejado los cuerpos sin vida de las personas en diferentes lugares del noroeste del país, además de intentar descubrir si tienen algún tipo de relación entre sí.