A principios del 2016, Angelina Jolie y Brad Pitt decidieron viajar a casa de un monje tailandés que vive en la ciudad de Siem Reap, en Camboya. El hombre plasmó un escultural tatuaje en la espalda de la actriz que simboliza el gran lazo amoroso que mantenía unida a una de las parejas más famosas de Hollywood. Sin embargo, parece que el sello de unión no funcionó, pues seis meses después se supo de la sorpresiva ruptura de ‘Brangelina’.

El monje Ajarn Noo Kanpai, fue el encargado de plasmar tres tatuajes en la espalda de Angelina Jolie en los que se ven inscripciones con patrones geométricos y figuras animales. La técnica empleada por el tailandés es muy antigua, puesto que usó barras de acero con agujas quirúrgicas, implementos que no son empleados actualmente para tatuar.

Brad Pitt también fue tatuado por Kanpai pero eligió como tatuaje un budista en la parte izquierda de su estómago. Los conocedores del artista tailandés, cuentan que los diseños de este tatuador cuestan miles de dólares, y además significan protección.

Aunque estas creaciones fueron una gran muestra de amor por parte de Angelina y Brad, parece que no tuvieron fruto, pues la relación más famosa de Hollywood terminó apenas seis meses después de haber ido a Camboya a marcarse en símbolo de amor eterno.

Ahora, la pareja de actores se encuentra en un gran pleito legal por sus seis hijos y los bienes que obtuvieron durante su tiempo de casados. Además, la actriz acusó a su ex esposo de agredir físicamente a uno de sus hijos, lo que indispuso completamente al actor y generó un fuerte escándalo.