Gracias a una exhibición de Neymar y Messi, el Barcelona se impuso en Ipurúa a un Eibar que lo puso en problemas en la primera media hora pero que acabó pagando el esfuerzo y la inocencia en los siguientes 60 minutos. (0-4)
Barcelona se agarra a la liga como a un club ardiendo. Ya lo dijo el otro día Piqué en una entrevista: “Estamos convencidos de que podemos ganar esta liga”. En Ipurúa, contra el Eibar, demostraron que irán hasta el final con esta idea. En un encuentro propicio para pinchar, faltaban dos piezas claves -Iniesta y Piqué-, la MSN y el resto de menos habituales salieron al rescate, para solventar el aprieto al que les sometió el local en los primeros 30 minutos y terminar goleando.
Lo hicieron gracias a una nueva actuación estelar de Messi y Neymar, ambos con gol incluido. A la fiesta tampoco faltó el tercer integrante, Luis Suárez. La tripleta se dio un festín en la segunda mitad. Al Eibar no le quedó otra que esperar a que pasara el tiempo y rezar para que la humillación no fuera más grande.
Salieron valientes durante la primera parte, pero acabaron claudicando ante el poderío de los astros culés. Los tres puntos les vuelven a arrimar al liderato a los de Luis Enrique, aunque la lesión de Busquets en el tobillo, bien sustituida por Rakitic como eje del pivote, puede acabar pagándolo.
