Desde los pasillos de un colegio hasta el estreno de una película, estos son algunos de los homicidas norteamericanos que encabezaron los titulares por personificar los tiroteos más aterradores en la historia de Estados Unidos, incluyendo el reciente episodio en el que fallecieron 13 personas en la base de la armada en Washington.
Aron Alexis
Identificado por la policía como uno de los agresores en el atentado a la armada de Estados Unidos en Washington, donde murieron 13 persona, Alexis había ingresado a la fuerza militar como contratista civil y se presume que había entrado al astillero usando la identificación de otro empleado.
Alexis creció en Fort Worth, Texas, y había comenzado a trabajar recientemente en la Marina estadounidense como contratista civil. Luego de un intenso tiroteo, el tirador murió abatido por la fuerza pública y posteriormente fue notificado al canal de la NBC News. Aún se desconoce la causa que lo impulsó a cometer el crímen, sin embargo las autoridades no descartan la influencia de terceros y mientras tanto continua la búsqueda de un segundo sospechoso que escapó del lugar, luego de que Alexis fuera dado de baja.
El presidente Barack Obama, calificó al ataque como un “acto cobarde” en el tiroteo masivo y envió sus condolencias a los familiares de los fallecidos.
“Haremos todo lo que esté en nuestras manos para asegurarnos de que quienes perpetraron este ataque rindan cuentas”, prometió.
James Holmes
Durante el estreno de la tercera entrega de Batman, fuentes locales afirman que Holmes entró a una sala de cine en Aurora, Colorado, y abrió fuego en contra de los espectadores de la función, entre los cuales se encontraban niños, dejando un saldo de 12 muertos y 58 heridos el 20 de julio de 2012.
La masacre fue condenada por los tribunales de Estados Unidos y algunos imponían la pena de muerte para Holmes, medida que solo es aprobada en el Estado de Texas. Asimismo, los sobrevivientes al suceso, demandaron al propietario del cinema y aseguraron que los sistemas de alarma del establecimiento no eran lo suficientemente estrictos.
Jeffrey Weise
De 16 años, el adolecente asesinó en su escuela a nueve personas, entre ellas cinco estudiantes de la secundaria, antes de quitarse la vida el 21 de marzo de 2005. Medios norteamericanos aseguran que antes de cometer la masacre le había quitado la vida a su abuelo y luego a su novia en Red Lake, Minnesota.
Cho Seung-hui
Ciudadano norteamericano de origen norcoreano, entró el 16 de abril de 2007 a la Universidad Virginia Tech y mató a 32 personas antes de suicidarse en Blacksburg, Virginia. La masacre es la peor de la historia de Estados Unidos en tiempos de paz.
Adam Lanza
El 4 de diciembre del año pasado, en la escuela primaria Sandy Hook en Newtowon, Connecticut, 20 niños y seis adultos murieron a manos de Lanza quien, una vez terminó la masacre, se quitó la vida.
A sus 20 años, el asesino vivía con en una casa de 1.6 millones de dólares con sus padres que, según medios locales, recibían una cuota de 250 mil dólares para la manutención de los bienes y servicios de la casa y su hijo.