Las alarmas se han disparado en el Manchester City por la lesión muscular que sufrió anoche con la selección española David Silva, que pone en duda su participación en los choques vitales de la Premier y la Liga de Campeones a los que se enfrentan los de Roberto Mancini la próxima semana.

A los diez minutos del choque clasificatorio para Brasil 2014 entre España y Francia (1-1), el canario se echó la mano a la pierna derecha al notar un pinchazo en una jugada sin balón y, tras ser atendido en la banda por los médicos de la selección española, pidió el cambio en el minuto 12 para que le sustituyera Santi Cazorla.

El City, que este fin de semana defiende su tercera posición en la liga inglesa frente al West Bromwich, sexto con un punto menos, y que el miércoles se juega su futuro en la Champions en Holanda ante el Ajax, espera a que Silva regrese a Manchester para valorar el alcance de su lesión.

El centrocampista español, de 26 años, es una de las piezas clave del conjunto de Mancini desde que llegó a Inglaterra el verano de 2010 por 33 millones de euros, procedente del Valencia, y fue uno de los principales artífices, junto con el argentino Sergio «Kun» Agüero, de la liga que conquistaron los «citizens» la pasada temporada.

Los «citizens» esperan que el canario, el único jugador que no era del Real Madrid o del FC Barcelona en el once inicial de Vicente del Bosque ante Francia, esté listo cuanto antes para dirigir su centro del campo.

El conjunto inglés, encuadrado con el equipo del portugués José Mourinho en el Grupo D de la primera fase de la Liga de Campeones, se jugará gran parte de sus opciones en la máxima competición europea la próxima semana, después de haber logrado un único punto en las dos primeras jornadas.

Los de Mancini, que partían entre los favoritos en la Champions dada su condición de campeones de la Premier League, sucumbieron en el Santiago Bernabéu (3-2) y no pudieron pasar después del empate ante el Borussia Dortmund (1-1).