Con una ceremonia muy cinematográfica, los Juegos Olímpicos de Londres 2012 quedaron oficialmente inaugurados. La historia reciente del Reino Unido y personajes como 007 o Mr. Bean ocuparon un lugar destacado, en un conjunto arropado por una impresionante banda sonora de éxitos de la música británica.
El momento cumbre, el más esperado por los miles de espectadores que estaban en el estadio y los cientos de millones que presenciaban la ceremonia por televisión, fue el encendido del pebetero, que se fue construyendo, poco a poco, con pequeños cuencos que llevaban unos niños que acompañaban a cada delegación de deportistas y que, finalmente, se unieron en un solo, pero compuesto de 204 recipientes, el número de países que compiten en estos Juegos.
Una imagen del jugador de fútbol David Beckham nos hizo saber que, cual James Bond, el futbolista pilotaba una motora que fue cruzando el Tamesis y se acercó con la llama al estado.
Steve Redgrve, campeón de remo y cinco veces medallista, fue el último portador de la llama que, a su vez, entregó a siete jóvenes encargados de llevarla al centro del estadio para encender un pebetero gigante, cumpliendo así el lema del Comité Organizador (LOCOG), ‘Inspira una generación’.
Londres inauguró así y con un enorme ‘castillo’ de fuegos artificiales los terceros Juegos de su historia, después de los de 1908 y 1948.
EXPLOSIÓN DE JÚBILO.
El “Hey Jude”, la famosa canción de los Beatles, interpretada por Paul McCartney, dio por clausurada una ceremonia, que 62.000 espectadores pudieron presenciar en el estadio.
La llegada de la Isabell II estuvo rodeada de expectación, espectáculo y humor. Daniel Craig, imbuido en su elegante smoking de 007, escoltó desde el Palacio de Buckingham a la reina y simularon llegar en helicóptero y descender hasta el palco de autoridades en un espléndido paracaídas con la bandera británica.
Lo curioso fue que la Isabel II se interpretó a sí misma en las escenas sin riesgo.
Poco después, la reina británica, que ha celebrado hace un mes su Jubileo de Diamantes, hizo su entrada en el Estadio Olímpico acompañada de su esposo, el duque de Edimburgo, en medio de una explosión de aplausos de los espectadores.
COMIENZA EL SHOW.
El espectáculo comenzó con el estadio invadido por cientos de voluntarios con trajes de campo del siglo XIX, que bailando y saltando mostrando la transformación del país, del campo a la vida industrial, mientras chimeneas de fábricas iban surgiendo desde el centro.
En la campiña ficticia se colocaron ovejas, caballos, gallinas, vacas, cabras y varios perros y gansos, y tampoco faltaron casitas de campo con sus chimeneas y molinos de agua.
Entre un evento musical y otro, cinco anillos olímpicos gigantes hicieron su aparición y se fundieron en una explosión de fuego, mientras luces de colores se proyectaban sobre las gradas.
Tras la revolución industrial y la referencia al sufragio femenino, un colorido espectáculo de enfermeras contó el nacimiento de la Sanidad pública británica después de la II Guerra Mundial.
Un evento que recordó la creación de un servicio basado en el principio de que “ninguna sociedad puede llamarse civilizada si a una persona enferma se le deniega asistencia médica por falta de recursos”, del político laborista galés Aneurin Bevan.
La literatura infantil también tuvo su referencia cuando la escritora JK. Rowling, creadora de las historias del niño mago Harry Potter, apareció en la ceremonia para leer el fragmento inicial del clásico del escocés J.M.Barrie, Peter Pan.
El actor británico Rowan Atkinson se puso en la carne de su famoso personaje “Mr. Bean” para recrear la película “Carros de fuego”, sobre los Juegos Olímpicos de París de 1924, corriendo sobre la famosa playa de la localidad de St. Andrews (Escocia).
La música británica, de todas las épocas y en especial desde los ’60 a nuestros días, fue la banda sonora que acompañó toda la ceremonia, canciones de los Rolling Stones, los Sex Pistols, Pet Shop Boys David Bowie, Jam, Specials, Queen, Eurythmics, o los Beatles entre otros sonaron sin parar. Bailes y estilos que recreaban otras épocas focalizados en el hoy, con Adele y que no olvidó a la fallecida Amy Winehouse.
Si algo llamó la atención de estos Juegos es que son los más femeninos de la historia. El Comité Olímpico Internacional ha conseguido que todos los países acudieran con representantes de ambos sexos y una gran cantidad de mujeres tuvieron el honor de portar la bandera.
Una de las grandes novedades ha sido la elección de la campeona de tiro Bahiya al-Hamad, de 19 años, que competirá en la modalidad de tiro con pistola de aire desde 10 metros, como abanderada de Catar. Este país árabe es uno de los tres, junto a Emiratos Árabes y Brunei, que permite, por primera vez, participar en unos Juegos Olímpicos a mujeres.
Luciana Aymar, capitana y referente del hockey sobre hierba femenino de Argentina; la ciclista colombiana Mariana Pajón; la atleta costarricense Gabriela Trana; la peruana Gladys Tejada; la taewondista dominicana Yulis Mercedes Reyes; la mexicana María del Rosario o la venezolana Fabiola Ramos, de tenis de mesa fueron algunas de las mujeres latinoamericanas que portaron orgullosas las banderas de sus países.